2.La Prima Instantánea

Al despertar, escucho el cantar de algunas aves, supongo que todavía es temprano y me pongo la cobija encima, doy la vuelta hacia mi otro costado y cierro nuevamente los ojos.

Tiempo después, despierto nuevamente y está vez si debo levantarme, hay muchas cosas por hacer los fines de semana.

Voy al baño, me lavo la cara, cepillo mis dientes, utilizo el inodoro y me lavo las manos con agua tibia.

Al bajar las escaleras, me sorprende ver que mi padre y mi madre están sentados al comedor, en silencio, y lo que realmente asustaba son sus expresiones.

—Chris, hay algo importante que debes saber —advierte mi padre con expresión sombría—. Siéntate por favor.

Obedezco y veo como mi madre pasa a sujetar la mano de papá, en forma de apoyo. Esto me está preocupando demasiado.

—Mi padre falleció en la madrugada —suelta mi papá, como un gran peso.

Se siente extraño, simplemente hablar de muerte produce una sensación de escalofrío en el cuerpo.

—¿Qué? Se supone no tienes padres, mis abuelos están muertos, dijiste —expongo atónito.

Yo conozco que mi padre vivió solo desde que era muy joven. Él se enamoró de mamá en la universidad y al terminarla se casaron, incluso yo nací antes de que ellos concretaran su matrimonio, pero jamás estaban mis abuelos en esa historia, él simplemente dijo que estaban muertos y jamás tocó ese tema... hasta ahora.

—Para mí lo están... desde que ellos dijeron que los decepcioné y me desheredaron, me excluyeron de sus vidas —explica dolido.

—No entiendo ¿Cómo puedes decepcionarlos? —pregunto. Pero en realidad esa no es la única pregunta en mi cabeza, hay miles más.

—Hijo, tu padre acordó hablar contigo con más calma y contarte su historia en otro momento —explica mamá con cariño, ella sí que transmite calma al hablar— pero escucha lo que tiene que decir ahora.

—Está bien —asiento más tranquilo.

—Mi hermano menor no vive aquí, él está en Rusia —relata. Ahora resulta que tengo un tío—. Él tiene una hija, tus abuelos se han hecho cargo de ella todo este tiempo.

Mi padre se detiene, parece que lo que me quiere decir es muy difícil, así que espero con paciencia.

—Tú tío llamó a Thomás y le dió la noticia —toma la palabra mi madre. Aprieta la mano de papá, con un gesto que indica que lo ha hecho bien—, pero también le pidió un favor especial.

—¿Qué favor especial? —cuestiono.

Esto no suena bien, algo grande se avecina.

—Que traigamos a su hija con nosotros mientras tu abuela se recupera, se puso muy mal con la muerte de tu abuelo —informa mi padre con más fluidez.

—¿Y cuál es el problema con eso? —me rio tranquilo. No es algo tan grave como pensé, me he quitado un peso de encima. Traer una niña por una temporada, ¿Qué problema puede traer?—. Puedo prestar mis viejos juguetes que aun no he regalado, una niña en la casa traerá alegría.

Pero la forma en que mi padre y madre se miraron brevemente, me eriza la piel. Acabo de sentir un extraño y penetrante frío entrar a la casa y una especie de intuición me dice que la situación es peligrosa de alguna manera. Puedo jurar que nunca en la vida me he sentido tan inquieto como en este momento.

¡No lo vi venir!

Tremendo proyectil me impactó al conocer que la "niña", es cuatro meses mayor que yo. Ella nació en diciembre y yo abril.

En la ducha, estoy pensando todo lo que mis padres me dijeron hace unos minutos en la sala. Es sorprendente cómo cambia la vida de un momento a otro.

¿Cómo vamos a hacernos cargo de dos adolescentes en mi casa? Conmigo es suficiente problema.

Ahora, tener bajo nuestro techo a una chica que no conocemos es preocupante, podría ser una mala persona, es posible. Desde que supe que mis abuelos de alguna manera dejaron a mi padre a la deriva en este mundo, he pensado que ellos son unas malas personas, crueles, dictadores y muchas cosas más. Es que, el solo imaginar a una chica criada por esos dos ¡Dios me asusta!

De nuevo la piel de gallina.

Además, me acabo de enterar que los bisabuelos de mi papá son rusos, una cultura completamente diferente, y mi tío vive en Rusia, ¿Será esa chica rusa también? ¿Habla Español? Trataré de responder mis inquietudes esta noche, cuando la conozca en el funeral del abuelo inexistente.

Nuevamente se me eriza la piel, pero ahora es por el frío, me estoy demorando mucho con el grifo abierto y el agua corriendo por mi cuerpo. Aunque es una ducha de agua caliente, el helado ambiente no deja de estar presente en una ciudad tan fría como esta. En consecuencia, me apresuro a salir y me visto con rapidez.

La música me ayuda a despejar la mente, olvidando cada preocupación con ella.

Si estoy triste la música me acompaña y si estoy feliz ella también está allí para mí.

Por eso tengo una bocina con conexión Bluetooth en mi habitación siempre disponible para reproducir buena música. También varios instrumentos musicales que he comprado al salir de la ciudad cuando vamos a visitar a mis abuelos maternos. Todos mis ahorros van destinados siempre a saciar este magnífico amor.

Papá quiere que lo acompañe a la ferretería por pintura, hay una habitación frente a la mía y la asignarán a la nueva integrante de la familia. Dejo mi guitarra sobre la cama, me pongo zapatos, tomo una chaqueta y bajo las escaleras corriendo. Papá ya tiene encendido el auto. Yo ando un poco distraído y me siento en la parte de atrás, cuando normalmente hago de copiloto.

—Pareces niño regañado —comenta papá en tono burlón. Lo miro extrañado y al comprender por qué lo dice sonrío.

—No me di cuenta hasta que me senté —le explico—. Estoy algo ansioso, no sé cómo será vivir con más familia, siempre hemos sido los tres solitos.

Mi padre asiente, puedo ver sus preocupados y expresivos ojos celestes reflejados en el retrovisor. Debe ser duro para él lo que está pasando. Todo este tiempo vivió olvidando que tenía familia y ahora de repente debe encontrarse de nuevo con ellos. Además, no imagino cómo sería si mi padre muriera y yo no pudiera hablar por última vez con él.