EL CHICO DE MI SUEÑO
Hice todas las cosas que tenía que hacer ese día ya era hora de dormir me cepille los dientes, peine mi cabello, me puse mi ropa de dormir y caí rendida en un sueño...un sueño que me hizo sentir de todo.
Ahí estaba yo en el colegio hasta que me choque con un chico al cual se le cayó el cuaderno por el golpe, como no ponia quedarme sin hacer nada le ayude a levantarlo, se lo entregue y me disculpé, había un chico a su lado al parecer era su hermano.
Fui a mi clase y vi a ambos chicos al parecer estaban en mi misma clase.
Cuando terminaron las clases, alze mi mochila y me dirigí hacia mi casa.
La cafetería que estaba afuera del colegio a la que sabía ir a diario estaba abierta así que decidí pasar a comprarme un sándwich junto a una gaseosa para matar el antojo.
Y de nuevo ahí estaban ambos chicos sentados y comiendo lo mismo que yo tenía pensado comer. Si estuvieran mis amigos aquí me molestarían diciendo que seríamos la pareja perfecta jajaja qué loco ya se que van a decir.
—Hola
—Mmm?
—Si?
— Vamos en el mismo salón
— Bueno
¿Que fue esa conversación?
—En fin— susurré para mí misma —me puede dar un sándwich de pollo? Cuánto sería?
—###
—Tome —le entregué el dinero —muchas gracias —y me senté al lado de la ventana que daba hacia la calle
Los chicos se retiraron, mire por la ventana estaban dirigiéndose a la librería.
—Que niños descuidados—comento la señora que Flora— si en esa librería no hay nada ni atiende nadie...bueno supongo tal vez van a estudiar, el lugar es muy silencioso.
Los estudiantes solian ir a ese lugar ya que uno podía estudiar tranquilo pero de todas maneras parecia sospechoso cuando alguien se dirigia ahi.
Termine de comer y fui camino a mí casa, pase por la librería donde aquellos chicos fueron y mire que los estaban GOLPEANDO, ni bien mire esos actos entre a defenderlos, algo ya me decia que andaba mal. Eran cuatro chicos contra nosotros que éramos tres, los puse detrás mío sobre todo al que parecia que era mas pequeño y me puse en posición de defensa y con una voz tranquila les dije a los abusivos.
—Dudo que quieran seguir—mire a la ventana vieja señalando mi celular que estaba grabando aún así no quite la vista de enfrente.
—Que elijen...¿Se quedan aquí o se retiran tranquilamente?
—Tsk—ese sonido proveniente de el jefe demostro su molestia, era claro que iban por la segunda opción.
—Y bien?
—Vamos—dijo aquel jefe a su grupo, con eso me dejo claro que si era el jefe.
—Asi está mejor—termine viendo como se retiraban enojados.
—... —los dos chicos atras mio no decian nada asi que voltee y mire como ambos se retiraban después de los abusivos, no es como que esperara un halago o algo a cambio pero un gracias hubiera estado bien.
Salí del lugar después de ellos.
[***]
Al día siguiente no sucedió nada novedoso, volví a ir hacia la cafetería y otra vuelta estaban ahí.
No les tome importancia hasta que uno me agarró el brazo y me dijo en un susurro que logré escuchar claramente.
—Muchas gracias por lo de ayer...
Sonreí
—Gracias por agradecerme — me miró y sonreí mucho más.
Su hermano nos miró y a la vez sonrió con ternura.
Así pasaron los días, nos volvimos amigos versión los tres mosqueteros con una mujer en el medio. Y así es como pasaron los días, encontrandonos en la cafetería después de clases.
Uno de esos días salimos mas temprano por motivos de la renovación del colegio y pues quedamos en encontrarnos en la cafetería como siempre, yo llegue un poco tarde pero como dicen "mejor tarde que nunca"
—Hola chicos que hacen? — abracé su cuello mientras estaba de espalda.
— Ah (el nombre de la chica :v)?
Ese mismo día Alex en la mañana camino al colegio fue pensando
—Mmm porque me cae tan bien...yo no soy una persona amigable, social pero ella ha logrado que yo cambié...que yo cambie mi forma de ser...creo que siento algo fuerte por ella- lo último lo dijo en un susurro para si mismo- no eso no es posibl- ah disculpe -Alex se golpeó contra un señor que estaba pasando pero este se le hacía familiar.
—Ande con cuidado joven hay personas y veces en las que uno no amanece de buen humor
—Emmm gracias por el consejo
—Que raro ese rostro y sobre todo ese reloj
—Si piensa que me conoce yo no recuerdo haberlo visto y mi reloj es una marca que me recuerda a mí familia
—Asi que es eso
—Si, con su permiso tengo que ir a una reunión
—No se preocupe adiós
—Reconozco ese reloj y rostro de alguna parte...mmm
[Volviendo al presente]
—Alex? Estás bien?
—Emmm? Sisi estoy bien
—Pareces perdido- me acerque a su oído y susurre- recuerda que siempre me tienes aquí para cualquier cosa, no dudes en decírmelo.
—Esta bien (otra vuelta el nombre de la chica)
—Bueno que quieren pedir hoy? yo invito
—Tartaleta de fresa!!!
—Yo solo quiero un cafe nada mas
—Emmm bueno yo quiero una torta
Le dijimos al mesero todo lo que queríamos y pague anticipadamente. llegaron las ordenes y empezamos a comer hable con el hermano menor pero el mayor parecía estar literalmente en la luna.
No es como que pudiera hacer mucho pero de rato en rato lo miraba de reojo y siempre estaba viendo a la ventana al parecer estaba pensando en algo muy importante ya que afuera de la ventana no había nada interesante.
¿Que estará pensado, que pasa por su cabeza?
Solté un suspiro y me decidí a preguntar pero esta vez obtener una respuesta concreta.
—Hasta aquí, ¿Que demonios te pasa?
—Eh?
—Hace rato que estás muy pensativo.