Tres. Maldición

Todo comienzo maldito, se conjura por medio de un hecho determinante, que tiene tintes de profecía.

Para ella, lo que trazo su camino era un sueño, en una noche de invierno… allí pudo ver, cómo ella le abría el pecho a un hombre y le sacaba su corazón… para comérselo pedazo a pedazo.

En un principio, se asustó mucho. No entendía, qué pasaba con ella para tener tales sueños, en los que cometía esos atroces actos.

Poco a poco, empezó a ver como en esos sueños se encontraba realizando sacrificios, danzando en la noche y jurándole lealtad al averno.

Después de la negación y el miedo, llegó en la etapa de la curiosidad… empezó a visitar lugares y personas, que la fueron adentrando en este mundo.

También leyó libros que le hablaban de aquellas artes que trabajan con lo culto, con lo misterioso, en medio de sombras y tinieblas.

Decir que se sintió tentada por eso, era eufemismo, después de superar el temor, empezó a amar esa parte de sí.

En medio de una regresión le confirmaron su más grande sospecha … Algo en ella albergaba la esperanza que esos sueños pertenecían a una vida pasada y no eran parte de su imaginación…

Descubrir que eso era algo que ella había hecho, la hizo sentir como se develaba ante ella.. su presencia en este mundo.

Decidió no seguirse resistiendo a su naturaleza… y por eso le dio rienda suelta a todo su ser… poco a poco comenzó a desarrollar habilidades que iban más allá de cualquier comprensión…

En este camino, su apariencia física, le ayudaba en su cometido. Era una mujer con una belleza cautivadora, tenía un largo cabello lacio de color negro, parecía una cortina, sus ojos en forma almendrada del mismo color de su cabello, piel clara… muy clara, labios rojos y carnosos y una dentadura hermosa y blanca, que parecía brillar con una luz sobrenatural. Su risa era inquietante, muy estridente, tanto... parecía hacer temblar el suelo.

Comenzó a realizar pequeños trabajos, para aquellas mujeres con el corazón roto, que llegaban a la puerta de su casa a pedirle su ayuda e intervención, para poder saciar los susurros de sus corazones.

Por lo general, sus pedidos consistían en solicitar que sus esposos no las abandonaran… también las amantes llegaban para pedir que sus amados abandonaran a sus esposas, ya que soñaban con ocupar su lugar.

Se ocupaba de cualquier asunto en donde pudiera utilizar la magia como un camino para conseguir todo aquello que se deseaba.

Sus clientas con sus pequeñeces… mientras ella alcanzaba la grandeza…

Le encantaba cumplir deseos ocultos y oscuros. La deuda y el karma que se originaban de ellos le hacía temblar de alegría… ver como estos deseos llevaban a los inocentes a la perdición.

Su camino cada día se adentraba más por sendas oscuras y poderosas…

En un punto, ya no le bastaba con hacer trabajitos… por eso empezó a invocar la muerte, la desgracia y la maldición por medio de alianzas con seres malditos.

Las atrocidades que cometió son largas… además, no le basto con hacerlo ella, también les enseñó a algunas personas a hacer rituales… a cambio de su fuerza y vidas…

Destruyó, mató y robó…

Sin lugar a duda, se ganó a pulso su puesto en el averno… por eso, cuando su muerte llegó a manos de su principal aprendiz… Un hedor nauseabundo e intenso, ocupó su ataúd…

Ese olor pertenecia a todo el mal que desató en su paso por la tierra…

Como era tanto su karma, que su alma no pudo descansar… por eso se vio obligada a convertirse en un espectro del más allá…

Tenía una deuda que pagar…

El camino que eligió se convirtió en un infierno de cacerías, con ella dominando las puertas del averno.

Los que tuvieron la desgracia de toparse con ella… sufrieron las muertes más dolorosas y tormentosas…

Se dice que ella deambulaba por las calles buscando a sus víctimas… mirando muy de cerca las intenciones de sus corazones…

Su risa, era el preámbulo que anunciaba a los vivos, su intención de muerte. Cuando la escuchaban, los corazones se paralizaban, los cuerpos no respondían y la sangre se helaba…

Sabían que habían empezado a contemplar la presencia del horror…

Aunque muchos intentaron dar cacería, no lograron su cometido…

Su presencia se volvió parte de las pesadillas de quienes alguna vez la habían consultado, eso incluía a los familiares de estos…

Todos tenía una deuda con ella... por utilizar sus servicios…

Por eso... Están advertidos...

Después no digan que no sabían...

¿Conocerán el averno?