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Felizmente se adentro al interior del estacionamiento cuya capacidad fue de solo alguna veintena de coches, no era grande pero tampoco pequeño, las rayas en el suelo que delimitaban las secciones donde uno debía estacionar su vehículo estaban mal marcadas, esto ayudado de las borracheras colosales que estaban ocurriendo aquí creo una escena caótica

cada quien se estaciono donde quisiera...

la situación fue incluso mas caótica a medida que se adentraba ya que alguien había amarrado a erca de 10 perros de diferentes razas a un poste, los pobres animales estaban ladrando violentamente, estirando sus cadenas intentando liberarse de forma desesperada

dándoles un breve vistazo continuo en su camino con el rostro levemente fruncido, se impresiono un poco por la diversidad de razas pero al final odiaba a los perros, los consideraba seres inferiores

cuando paso cercas de estos animales completamente ajeno a su existencia estos reaccionaron asustados trataron de huir de forma intempestiva de su presencia sin ningún éxito, hubo algunos que directamente se lastimaron con sus propias cadenas y habían comenzado a sangrar

El no puso atención de esto, simplemente los ignoro su mirada estaba completamente centrada en un bar cuyo techo fue construido con palmas secas y sus paredes de barro, parecía ser alguna clase de obra fabricada intencional mente rustica, dicha forma de construcción le recordó a las casas de los campesinos de su tierra natal

De hecho una vez se inmiscuyo al interior del establecimiento rápidamente noto algunos cuadros en las paredes con fotografías muy antiguas de algún lugar de mexica así como muchas banderas tricolor en las paredes...

no se molesto por indagar en cosas irrelevantes, sus ojos cambiaron de pupila discretamente, aumento sus sentidos, su visión se deformo un par de veces antes de lograr localizar lo que queria

dentro había un montón de personas sus ojos de serpiente examinaron a todos hasta detenerse sobre un yanki, el hombre estaba bebiendo unas cervezas con un sujeto que parecía ser su amigo y en el bolsillo de su short corto se le podían ver un par de llaves colgando, los ojos de John de inmediato se clavaron en este yanqui al seleccionarlo como su victima de robo

EUREKA !! grito en su mente, devolviendo sus ojos a la normalidad se deslizo entre los comensales del lugar y algunos otros clientes en silencio, una vez cercas del hombre blanco encontro una banca vacia sobre la mesilla principal donde el bar tender hacia su trabajo... john no inicio ninguna conversacion, simplemente espero a ser atendido, el bar tender fue muy eficiente, llego a su lugar con su camizeta blanca y pantalon oscuro, como sabia muy poco de bebidas simplemente señalo un tarro de cerveza cercano y dijo

-quiero uno-

el bar tender un hombre de origen hispano, posiblemente mexicano al igual que el asintio, tomo un tarro limpio que se encontraba en un estante trasero y lo lleno gracias a una maquina metalica

completamente lleno y espumoso lo trajo a su lugar

"Es en son de la misión" murmuro, asi se auto justifico, con el tarro en su mano... simplemente se lo lanzo a la boca...

sus ojos se contrajeron al sentir ese helado sabor amargo... sufrió una éxtasis comentario, resistió el shock psicológico... y disfruto el momento

las conversaciones de la clientela continuaron, el no acabo su tarro de un solo golpe, si no que bebio en silencio, por su puesto no estaba aqui para beber, escucho y escucho a su vecino de alado, ese yanqui de ojos azules quien hablo en su estado de ebriedad de muchísimos temas de interés

sorbo tras sorbo John bebió su tarro poco a poco, la sensación de embriagues nunca llego, como una forma de vida superior controlo eficientemente el alcohol en su organismo y evito que le afectada, podría sentirse borracho si quería, claramente hoy no era el momento de emborracharse así que simplemente almaceno el alcohol en su cuerpo para después mientras disfrutaba del sabor

poco despues de acabar con su tarro de alcohol, logro escuchar lo que queria, sus ojos brillaron con diligencia, miro al bar tender, le echo un pequeño grito, pago su cuenta... fueron 15 dolares

***!!!!**** John casi explota, 15 dolares por un P¨*** tarro de ****

suprimiendo sus intentos asesinos pago gracias al financiamiento de la chinita y se retiro

al pasar a lado del yanki borrachin su mano se transformo casi en una serpiente viva, fue rápida, fue fugas, sus sentidos se incrementaron, el tiempo se dilato... para cuando paso del hombre todo volvió ala normalidad, en sus manos había un par de llaves con un bonito llavero de palmeras repletas de cocos, la palabra Hawái estaba inscrita en color verde

"Bonito llavero" murmuro, habia decidido que ese formaria parte de su coleccion personal, asi que en secreto sus dedos separaron el llavero de las llaves y este fue arrojado a su dimension oscura

una vez hecho su trabajo decidió abandonar el lugar... como no había podido obtener datos de un transporte paso directamente a expropiar, este fue su lema, o las cosas se hacían por las buenas o por las malas, pero de que se hacían, se hacían

Mientras realizaba sus actos, en ningún momento entro en cuenta que desde el momento que puso un pie dentro del establecimiento un hombre vestido de pantaloncillos azules y camisa de vestir floreada de aspecto caucásico que se encontraba en la entrada ya lo había fichado, cuando abandono el area este hombre blanco envió un par de mensajes por su móvil

como su mission estaba cumplida abandono el establecimiento con una cara feliz y una sonrisa de oreja a oreja ignorante de que acababa de atraer atencion indeseada

Camino por las calles jugueteando con el juego de llaves en sus manos, a veces taradeaba alguna que otra melodía que se le venia a la cabeza, la sensación de progresar en sus objetivos fue muy placentera para el, esto fue mucho mas agradable que estar encerrado en esas ciudades fortaleza, aunque perdió su estatus de privilegio no podría negar que la libertad tenia su gusto