Catch Me, I'm Falling (adaptación Howard x Raj)

Capítulo 1

Enero 17 - Día 1

Yo amaba y odiaba al mismo tiempo el pabellón de cáncer. Amaba estar ahí para los niños que no tenían a nadie que los escuchara y también para los que no sabían qué decir en primer lugar. Sabiendo que podía ayudarlos de alguna manera, me mantenía despierto por las noches cuando estaba acostado, preguntándome qué diablos estaba destinado a hacer con mi vida.

Fue en el pabellón de cáncer donde conocí a Rajesh Koothrappali, un 17 de enero, era una tarde gris que no prometía nada en especial.

Tomé su expediente que se encontraba con los demás en mi escritorio, lo tenía entre mis manos. Era pesado, más pesado de lo normal. Deslicé mis dedos sobre él para abrirlo, pero me resistí, sabiendo que era mejor ir a conocerlo primero antes de tener cualquier primera impresión de él.

Me dirigí a su cuarto que ocupaba en el hospital con mi cálida sonrisa de siempre, preparándome para conocer a mi nuevo paciente. Él estaba medio sentado en su cama, con sus ojos pegados a la laptop que tenía entre sus piernas. Su cabello se encontraba un poco alborotado, como si hubiera apenas despertado.

- Hola. - Dije colocando mi carpeta entre mi pecho y mis brazos tratando de mostrar una actitud amistosa. - Soy Howard.

Él no se movió, sólo pestañeó y dijo un poco cortante:

- Hola. ¿Estás aquí para hacerme sentir mejor?

No me desanimé, había tenido esa reacción con otros pacientes antes. Descubrí que mientras todos querían alguien que los escuchara, nadie realmente quería abrirse y decir lo que sentía.

- Me gustaría sólo hablar, hacerte sentir mejor es trabajo de las pastillas.

Él dirigió su mirada hacia mí, con su cara aún sin ninguna expresión.

- No eres el primero que trata de hacerme sentir mejor.

Yo sólo asentí. Mi supervisor me había informado sobre la manía de Rajesh de correr a los terapeutas, pero me gustaba pensar que todo eso no era verdad.

- Escuché por ahí... - Caminé acercándome hasta su lado y tomé una silla. - ¿Te importaría si me siento?

Él se encogió de hombros.

- Adelante.

Me senté en la silla cruzando mis piernas. Mientras lo miraba, trataba de sentir lo que él sentía. Rajesh por su parte, ignoraba mi presencia mirando la pantalla de la laptop, parecía que estaba siendo absorbido por esta.

Él se veía pequeño en sus sábanas, sus hombros empequeñecidos por una pila de almohadas y un edredón envuelto alrededor de su cintura. Tenía un aire de derrota, como si hubiera mirado hacia el futuro y hubiera aceptado su destino. Llevaba la muerte como un manto.

- ¿Quieres hablar o debo sólo sentarme aquí mientras termina la hora? - Le pregunté sacando algún tipo de conversación, mientras apoyaba mis codos en mis rodillas y colocaba mi mirada en él.

Él hizo un murmullo en forma evasiva, pasando su dedo lentamente por el mouse de la laptop.

Asentí, aceptando su respuesta. Si él no quería hablar, no podía hacer nada más; no podía forzarlo.

- Está bien. - Repliqué. Abrí mi bolsa y saqué un libro con el título The Great Gatsby.

Abrí el libro justo en donde se encontraba el separador y comencé a leer. Había leído este libro por primera vez en mi clase de inglés y me quedé enganchado con las metáforas y la forma en que las palabras se juntaban, casi como una poesía. El libro aún tenía tontas anotaciones con lápiz que yo había hecho, se suponía que me ayudaría a "entender la novela".

La hora pasó rápidamente, sin ninguna palabra articulada en la habitación del hospital. No era la mejor reunión que había tenido, pero estaba preparado para el desafío de Rajesh Koothrappali. Miré cómo el reloj digital junto a su cama cambiaba a las nueve de la noche, por lo que coloqué mi libro de vuelta en mi bolsa y la cerré.

- Te veo la próxima semana, Rajesh. - Dije dedicándole una pequeña sonrisa.

Estaba a punto de darme la vuelta e irme, cuando habló. Sus labios moviéndose lentamente mientras las palabras salían de su boca.

- Me gusta ese libro.

Me detuve y lo miré.

- A mí también.

Él asintió mínimamente.

- "Así que nos llevó hacia la muerte a través del frío crepúsculo".

Traté de no quedarme con la boca abierta mientras lo miraba. Él estaba citando el libro. Este chico que había hablado no más de diez palabras, estaba citando a Gatsby como si fuera la cosa más normal del mundo.

- Es hermoso. - Dije finalmente, no estaba seguro de qué era hermoso con exactitud, pero era algo hermoso y se nublaba en mi cerebro.

- Lo sé.

Me quedé mirándolo por un largo rato, esperando si decía algo más antes de que me fuera, pero no fue así, por lo que le dije adiós y me fui a casa.

Enero 24 - Día 8

Claro que no me había pasado toda la semana con sus palabras dando vueltas en mi cabeza. Eso sería una estupidez. Tampoco había estado esperando hasta el martes y, desde luego, no había estado contando las horas hasta las ocho... o tal vez sí.

Cuando entré en la habitación del hospital sentí una extraña mezcla de esperanza y un nerviosismo persistente. Rajesh levantó su mirada hacia mí cuando entré, pero rápidamente regresó sus ojos a la pantalla delante de él, sin ninguna expresión.

- Hola. - Dije, tomando una silla junto a su cama sin preguntar.

La silla no tenía almohada, pero era cómoda y lo suficientemente grande, así que podía recostarme un poco en ella.

Él asintió con la cabeza a modo de saludo, parece que seguía ignorando mi existencia. Dejé escapar un suspiro. Pensé que esto sería más fácil.

- ¿Crees que podríamos hablar esta vez? - Le pregunté, teniendo un poco de esperanza.

- ¿De qué quieres hablar? - Contestó en un tono de afirmación más que de pregunta.

- Podrías hablarme de ti. - Sugerí. Sabía que podía lograr que se abriera conmigo. Lo sabía.

- Alguien no leyó mi expediente. - Él sonrió, asintiendo con la cabeza mientras miraba el expediente en mis manos.




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