Cazadora de demonios

Capítulo 19

Vania

(Pensilvania:dos años después)

Era curioso que todos avanzarán con su vida como si nada hubiera pasado pero yo no pudiera, después de la muerte de mi hermana las pesadillas habían acabado los demonios ya no me acechaban en esa fría y oscura noche la habíamos traído de regreso a casa celine ya no estaba sola mis padres la estarían cuidando

Me había auto exiliado de la academia a pesar de las súplicas de susana solo mantenía contacto con Phillipe, pero nuestra amistad había sufrido una fractura desde aquel día ahora el tenía una novia quien pensaría que la pelirroja de esa noche conquistaría su corazón

— ¿En que piensas? — musita Rachel — te he tenido en tratamiento desde hace tres años vania y todavía no puedes dejar atrás el pasado

— No es tan fácil — Contesto — pero éstoy mucho mejor, ahora puedo dormir tranquila por las noches ya no tengo malos pensamientos

— Comenze a salir con amigos — miento — ellos me tratan bien incluso podría decir que volveré a tomar mi puesto en el trabajo

Ella repara las marcas de mi brazo y las cubro para que deje de mirar, estaba evitando la realidad mi vida se fue al carajo lo único que deseaba era ,desaparecer de este mundo por más que lo intenté nunca lo conseguí .

— Seguiremos con los antidepresivos vania, es importante que juntas logremos superar la depresión no te lo digo solo como tu psicóloga también somos amigas

— ¿ Todavía sueñas con el demonio? — ella era la única que sabía cual era mi verdadero trabajo

Rachel y Susana eran muy buenas amigas, sabía que nuestro trabajo era cazar demonios no teníamos ningún tipo de verguenza muchos pensarían que estamos locos pero no es así existe el bien y el mal eso es todo

— ¡ No! — Respondo alto y claro — después de la muerte de celine el no me volvió a visitar quizás ya murió y no me dijieron

— Eso es todo por hoy vania tengo dos pacientes más esperando pero esta noche pasaré por tu casa para que cenemos ¿ de acuerdo?

— Te estaré esperando Rachel, tendré preparada lasaña, dile también a Phillipe que puede venir con Olivia serán bien recibidos

Rachel asiente curvando una sonrisa y no puedo evitar sentir un poco de tristeza al ver que Phillipe también me dejó atrás y yo aún no puedo avanzar con mi vida quedando estancada

Después que volvimos de Transilvania Phillipe se reencontró con Olivia al cabo de unos meses se hicieron novios y todos dicen que pronto se comprometerán.

— ¿ Quieres ir por un café? — pregunta david rodeando una bufanda de color Roja en su cuello

— No lo invite — dice con seguridad — Sabía que te enojarias si lo llevaba con lo mala que es su relación ahora

— Pero como culparlo el hombre te espero durante años y tu nunca correspondiste sus sentimientos, si estuviera en su lugar también hubiera echo lo mismo

— Pero tu la esperaste— Confieso — Melisa no volvería y aún así la esperaste a pesar de todo

— Mejor vamos por ese café estoy muriendo de hambre

Me abre la puerta de su auto desplazándose al lugar del copiloto en donde coloca música sintiendo la paz que necesitaba por unos minutos, David también había sido de gran apoyo luego de que lográramos arreglar nuestra relación de amigos hicimos como si nada hubiera pasado

— ¿Porque no pedimos pizza? — yo pagaré no te preocupes vania el que invitó fui yo

— También tengo dinero — exclamó enojada — tu madre me sigue ayudando con eso david

— ¿ Acaso olvidas que día es? — dice — mira el calendario vania

Al entrar a la cafetería me fijo en uno de los calendarios junto a la mesera viendo la fecha es mi cumpleaños número veintitrés y lo olvide
tiempo atrás era mi fecha favorita pero ahora sólo significaba un día más de vida

— Feliz cumpleaños vania — se disculpa — los invite sin decirte pero el me rogó si podía traerla

Phillipe cruza el umbral con la pelirroja de la mano y esta trae el regalo significando que es de los dos haciéndome sentir más incómoda de lo que ya estaba moviendome hacia la ventana

— Feliz cumpleaños vania — comienza ella — Phillipe , me invitó espero que no te incómode mi presencia

— Para nada Olivia — David se sienta a mi lado y ellos dos al frente del nuestro fijandome en el arañon que trae ella en su muñeca

— Esto parece una cita doble — dice ella — ¿ verdad bebé?

— Si me disculpan — debo ir al baño — a Olivia le hace muy feliz que me vaya y david se mueve dándome paso para salir

Me siento asfixiada, el pecho me arde al igual que mis ojos quiero llorar por más que trato de llorar no puedo hacerlo, el baño esta vacío y aprovechó para encerrarme en uno sacando mi teléfono debo escribirle a David y decirle que me iré por la puerta trasera

No tenía ningún sentimiento romántico por Phillipe pero el me había abandonado cuando más lo necesitaba mi hermana había muerto y el hizo borrón y cuenta nueva sin saber cómo me sentía en realidad la decepción fue lo que más me había dolido

— ¿Puedes salir? — pregunta Olivia — No eres una niña pequeña vania debemos arreglar este asunto

Me limpio las lágrimas con mi chaleco intentando evitar que ella vea mi lado frágil se que me dirá lo mismo de siempre

— Se lo que dirás Olivia que me aleje de el pero sigue siendo mi mejor amigo no puedo hacerlo así de simple

— Tu no lo conoces como yo vania — el me ama

— Conozco todas sus facetas mucho mejor que tu y si esta conmigo es porque tu no fuiste suficiente, lo estabas asfixiando con tus problemas

Sigue y sigue hablando y por unos minutos mis instintos más bajos salen reduciendo queriendo partirle la cara de un puñetazo

— ¿Te apetece decir algo más querida?

— No — contesta mirándose en el espejo — yo seguiré haciendo feliz a mi novio tu sigue buscando a tu demonio el te debe estar esperando en la oscuridad

— ¿ De que carajos estas hablando? Es mejor que ya no me digas nada no tengo tiempo para tus celos enfermizos olivia




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