Capítulo 13 : No te aferres a alguien que no te quiere

Teresa

¿Cómo te fue en el examen?

Bien, si quieres podemos repetir la pijamada más seguido.

Me encantaría.

Sonreí, y luego me di cuenta que estaba sonriendo y dejé de hacerlo, ¿qué me está pasando?

 —Hey—dijo Teté que se estaba tomando una taza de té desde la cocina— ¿Qué pasó?

—Hola Teté, ¿Cuánto tiempo llevas ahí?

—Lo suficiente para admirar tu carita de niña enamorada, ¿con quién hablas?  

—Una amiga, se llama Celine y no me gusta, solo somos amigas.

—Ay Tesa, ya yo pasé por eso, te gusta, si niegas lo obvio será peor, créeme.

—Habló la voz de la experiencia.

—Sabes que tengo razón.

—Déjate de bobadas, no me gusta, además es menor.

—Y la historia se repite.

— ¿A qué te refieres?

—Jessica y Joshuad—recordó en tono de obviedad.

Sonreí—Cierto.

— ¿Qué nosotros qué? —dijeron Mamá y Papá sumándose a la conversación.

—A su niña le gusta alguien—dijo Teté.

—No es cierto—defendí.

— ¿De casualidad es una pequeña chica de ojos grande y cabello castaño ondulado que responde al nombre de Celine? —Dijo Mamá sonriendo y moviendo las cejas.

—No—guardé mi teléfono en el bolsillo y me levanté.

—Uys, invítala a comer  la quiero conocer—dijo Papá aumentando el hype* .

(*Hype: expresión que implica excitación, nerviosismo o altas expectativas frente a casi cualquier cosa)

—Celine es sola una amiga y fin de la conversación—dije mientras me dirigía a mi habitación.

— ¡Veremos! —exclamó Teté.

**************************

Bajé a la cocina a buscar un vaso de agua y me encontré una escena muy linda en ella.

—A tu lado siento que puedo con todo, te volvería elegir a ti en mil vidas más—Papá acariciaba la mejilla de mamá mientras estaba ella sentada en el desayunador con la manos en sus hombros, sus rostros estaban a centímetros, Papá la miraba como lo mejor del universo y ella como su lugar seguro—Te amo.

—Todos los días me vuelvo a enamorar de ti, Joshuad Celestino Cabral Mendoza—dijo Mamá riéndose un poco con su segundo nombre.

—Te encanta mi segundo nombre—dijo apretándola más fuerte de la cintura y rompiendo el espacio quedaba entre sus cuerpo.

—Me fascina.

Okey, ya es hora de cortar la escena, no quiero ver a mis padres comiéndose en la cocina.

— ¡Con permiso!—dije terminando de entrar—Veo que ya se arreglaron.

Papá volteó hacia a mí y Mamá apoyó su cabeza en su hombro—Se podría decir que sí.

—Me alegro, me gusta verlos felices y enamorados, aunque me hacen querer tener pareja y así no vale.

— ¿Cómo vas con Celine? —preguntó Papá.

—Ya les dije, Celine es solo una amiga—Mamá y Papá se miraron.

—Bueno, este fin de semana acamparemos en las montañas, si quieres la puedes invitar—dijo Mamá—Será divertido.

— ¿Qué? ¡Y porqué no me habían dicho!

—Te lo estamos diciendo ahora.

—David nos invitó a toda la familia.

— ¿Tío David vendrá?

—Sí.

— ¿Terry lo sabe?

—Sí, lo sé—dijo Terry entrando a la cocina —No iré.

—Ay por Dios, no seas bebé—dijo Jessica, retándolo.

Teté negó—Les encanta molestarme a ustedes.

—No puede ser Teté, ¿apoco no eras el experto superando relaciones? —ironicé.

—No soy perfecto, iré a ver a Sofía no me esperen para cenar.

—Espera, ¿alguna vez nos contaran que fue lo que realmente pasó entre ustedes? —preguntó Papá.

 Teté se detuvo por un segundo—Pregúntenle a él o lean mi libro, no sé.

Mamá negó sonriendo—Una pregunta hermanito, ¿Eres feliz?     

—Pues sí, muy.

—Él es feliz, tú eres feliz, ambos ganaron.

—Tienes razón. 

¡Iremos a acampar! Inventaré a Celine, pero no porque me guste sino porque sé que ella nunca lo ha hecho y es divertido disfrutar de la naturaleza con amigos. 

Celine                 

Esta semana no fue muy grata para mí, las clases estaban aburrida, y Larissa no me hablaba, hasta se cambió de lugar para no estar cerca de mí, Isa y Fanny no sabía muy bien qué hacer, pero al final terminaron del lado de Lari dejándome sola.

Me dolió, obvio, pero la vida está llena de altibajos que hay que saber superar.

Lo bueno es que mi semana se arregló al leer el mensaje de Teresa.

Tú, yo, mi familia y acampar en la cima de una larga montaña, ¿le entras?

Al principio el mensaje me pareció divertido, pero la idea me encantó.

¿Qué día?

Salimos el sábado en la mañana y volvemos domingo en la tarde, eso sí, tendrás que venir a mi casa el viernes en la noche, porqué saldremos antes del amanecer.

Yei, otra pijamada. Le preguntaré a Papá y te digo.

Perfecto, espero tu respuesta <3

Fui a su habitación y entré sin tocar.

—Papi Hey… ¿qué tienes? —me acerqué y me senté a su lado en la cama, estaba llorando, se pasó la mano por el rostro.

—Nada hija, estoy bien.

—No es cierto, Mamá se fue otra vez ¿verdad? —asintió, lo abracé—No te merece.

— ¿Por qué es así? ¿Qué hago mal? Trato de darle todo y siempre se termina yendo.

—Yo tampoco la entiendo.

—Solo quiero que seamos una familia unida y feliz.

—No la necesitamos, nunca lo hemos hecho—afirmé mientras lo seguía abrazando.

—Sí la necesitas.

—No, siempre hemos sido tu y yo, puede que ella me haya traído al mundo, pero no es una verdadera, le hemos dado demasiadas oportunidades y siempre se va, no se merece nuestro amor.

—No entiendo como de una mujer como ella, salió una niña tan perfecta e inteligente como tú.