Ok- Mónica - dijo - una nueva aspirante llego- con sobervia miro a su alrededor
-¡en serio!, que pase- la chica se moria de los nervios, pero ella estaba inerte - toma siento, ahora ¿es verdad que quieres trabajar aqui?-
Bueno-bien, solo hay un puesto como ya debes saberlo, me tuve que desahacerme de dos de mis empleadas- la chica quedo sin habla a oir esas palabras
-¿que...?- miraba sus ojos frìos e inertes como si de verdad sus palabras fueran ciertas
-no...no lo mal interpretes, ellas se fueron a japon y francia a dirigir mis casas de modas, son directoras asì que deben reportar avance cada semana e impulse sus carreras como diseñadoras, solo hay una regla para poder trabajar aquì-
-¿cual es?- dijo entuciasmada
-sì tu te vuelves famosa, debes trabajar para mi antes de irte por tu cuenta, te aseguro que te combiene, te impulsaremos y con el tiempo tu tambien dirigiras una casa de modas, los desfiles son en conjunto y se da credito a todos los diseñadores al final; colaboramos como una familia, si estas deacuerdo firma el contrato, pero si vaz a renunciar que sea antes de ser famosa, pero si no quieres entonces no es el lugar para tì.
¿que opinas al respecto?- frìa, rigida e insensible haci se hacia conocer, como la soverbia dama de la casa de modas "sire"
-¿por que rayos corriste a el modelo cire?- dijo la administradora molesta
-mira, yo se lo que quiero y ese chico no da el ancho-
-¿y como estas tan segura?-
-yo no busco solo una expresiòn arrogante- la miro a los ojos y le dijo - no soy yo, solo quiero que las personas se sientan comodas con mi ropa- ella solo podia mirarla y algo la hacia sentir intranquila, su mirada no era la misma y un miedo la invadio al saber que ella no podia hacer nada por ella
-¡¿amiga estas segura de que esto no es por mario?!- y en ese pequeño instante su corazòn se detenia, al momento en que su voz se cortaba y sentia que la invadia una enorme tristeza
-¡no, no lo es!, -
-¡lo lamento!-
-¡vamos te invito unos tacos!-
-¡va!- pronto cayo la noche llena de calma, salvo para aquellos que tienen problemas y no duermen a causa de ello, asì la noche serena se combierte en una tortura
-¡al fin en casa!- decia cansado y frustrado, tomo un baño y comenzo con su pesar
-no...no me alcanza. ¿que voy a hacer a este paso me hecharan de aquí?, y aún me faltan gastos que cubrir, ¿que hare?- con sus dias contados una angustia invadia su pecho, porque ¿quien no se iva a sentir así en su situación? -¿que voy a hacer?- decia al colocar sus manos sobre la mesa y contener a como podia sus lagrimas, en tonces metio la mano en su bolsillo sacando la tarjeta de cirela -¿no creo que funcione?, pero tal vez sea la unica forma de salir adelante, no se que hacer todo esta mal, ¿y si me esfuerzo un poco más?- solo se quedo pensando en como se supone que ella se esforzo preguntandose - ¿valio la pena su esfuerzo?el se sentia inutil, sentia que no valia nada tratando de decidir si ir o no a trabajar ahí se le cruzo un pensamiento - de verdad debe ser engrida, pero supongo que todos debemos pasar por cosas malas y ella no es diferente en eso, ¡de verdad tuvo que luchar mucho para llegar a tener lo que ahora tiene!, y si yo no hago lo mismo defraudare a los mios- decia sin màs al mirar la foto de sus padres y cada que pensaba que no podìa màs, la nostalgia le hacia soltar tristes palabras de aliento.
Con una noche llena de nostalgia ambos se dispusieron a descansar, esperando un mejor consuelo y ánimos para no perder la esperanza.Con una noche llena de nostalgia ambos se dispusieron a descansar, esperando un mejor consuelo y ánimos para no perder la esperanza.
Al dia siguiente drago se encontraba fuera de la casa de modas, tratando de pensar sieta bueno entrar o no
-¿que hago, ya estoy aquì?, debo irme a casa... ¡no se valiente!- con un impulso y sin pensarlo decidido entro en aquella casa - ¿hola buenas tardes?-
-pase señor, ¿en que le puedo ayudar?- dijo una empleada con amabilidad
-que agradable- pensaba - ¡vine por esto!- entonces metio la mano a su bolsillo y mostro la tarjeta a la señorita, ella no dijo nada, solo permanecio callada
-¡sì, pase por aca!- camino entre telas, maquinas, gente, prendas, habìa mucha energìa y un ambiente ligero -señor- le indico la habitaciòn
-¡es enorme!-
-sì, pero pase. Señorita llego el nuevo modelo- miro hacia el como en las peliculas, ¡girando su silla! y dijo
-¡hola que bueno que vinieras!, pasenlo a vestuario y maquillaje le haremos su prueba ahora-
-sì señorita-
-¿que van a hacerme?- pregunto intrigado
-nada malo, solo espera- los nervios lo traicionaban todo el tiempo, lo invadian y temblaba solo de pensar que ella lo observaria
-¡tranquilo, ella no es mala solo es estricta-
-ok- miraba hacia todos lados y solo sentia como su estomago se encogía y una sensación de mareo
-listo, ahora ve y muestra lo que puedes hacer-
-cla...claro, pero ¿que debo hacer?-
-solo posa de diferentes formas, es una prueba, asì que no necesitamos un perfil especifico- con todo y sus nervios comenzo la sesiòn de fotos, un flash por quì y otro por aca, se sentia tan incomodo ademàs de aturdido por la camara, pero todo iva bien, hasta que una voz firme se hizo escuchar al fondo del estudio
-¡no...no, asì no es es completamente inutil, inservible, nefasto- decia la mirar las fotos y pasarlas una por una, si bien era cierto que era cruel cuando trabajaba -¡señor drago, me esta desepcionando!- el la miraba molesto, ella lo invito y ahora lo trataba asì, en ese momento no pudo evitar decir lo que pensaba, sin miedo a nada.
-¡OYE!, ¡yo no soy un modelo, te lo dije, no te lo dije, ahora no me vengas con un simple inutil, que esto fue tu eleciòn desde el comienzo!- sorprendida miri su rostro, peto lejos de molestarse sintio un inexplicable alivio