CombustiÓn

JAKE IV

Jake: Buenas noches Helena. 9:56PM

Jake envía un mensaje a la mujer esperando una respuesta, pero sabe que en los próximos minutos no tendrá una. Aún es muy temprano para que Helen haya salido de su trabajo, pero no pude evitar escribirle. Durante estos días se ha vuelto una pequeña rutina nocturna que disfruta mucho.

Helen: Es HELEN, creo haberlo dejado claro. 10:38PM

En los pocos días de interacción Jake ha aprendido a presionar los botones justos que hacen saltar el genio de la chef y es una de las cosas que más disfruta. Llamarla Helena es uno de ellos.

Jake: Lo mismo da. ¿Qué haces? 10:40PM

Helen: Termino de preparar todo para el servicio de mañana. 10:43PM

Jake: ¿Cuál es el especial? 10:44PM

Es una pregunta táctica, pues está dispuesto a recorrer cada restaurant italiano de la ciudad hasta encontrar el indicado. Pero la mujer es más inteligente.

Helen: Comida Italiana. 10:52PM

Jake: Muy madura, Helen. 10:53PM

Helen: No miento. 10:53PM

Jake: Si lo haces, a cada momento. 10:54PM

Helen: Nunca lo hago. 10:54PM

Jake: Mientes por omisión. 10:54PM

Helen: Buen punto. Voy con Chip, te escribo al llegar a casa, hasta pronto ;-) 10:58PM

Jake: ¿Quién es Chip? 10:58PM

Helen: Mi auto. 10:59PM

¿Chip? ¿Qué persona le pone nombre a su automóvil? -piensa Jake.

Y así de pronto, ya tiene las mil y una maneras de molestarla esa noche.

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Hace un par de semanas que el bombero trata de tontear con Helen por texto, pero ella simplemente no termina de caer en sus trampas; aunque para él las llamadas son la mejor parte, solo así puede captar cuando sus palabras la afectan.

Él disfruta mucho su forma de ser, dando pelea por cada cosa y saltando con facilidad. Pero apostaría todo su sueldo que es la persona más bondadosa del mundo, su personalidad la delata. Si hasta podría jurar que su reticencia en solo con él, como si no termina de superar su primera impresión de él. Aún a estas alturas se niega a aceptar un almuerzo o algo parecido, ni que decir de su apellido o de donde trabaja. Un día, hasta se tomó la molestia de hacer una lista de cada restaurante italiano de la ciudad y sus alrededores. Pero el chico es muy consciente de que no podría visitarlos todos en un corto periodo de tiempo. Seria buscar una aguja en un pajar.

Se supone que son amigos y no tiene mucho más que su nombre, pero hay ciertos momentos, en los que la toma con la guardia baja y captura cosas de ella. Cosas que se le escapan sin querer, cosas como que es chef en un restaurante italiano, que viene de Atlanta, y que además vive con su tío que es una especie de adolescente en el cuerpo de un hombre de treinta. Y justo anoche cuando hablaban sobre duchas, supo que su cabello era largo y castaño.

Para Jake esas son las mejores pláticas. Aquellas en las que no hay involucrado nada personal. En las que pueden bromear sobre todo y reír como idiotas; porque es en esas conversaciones donde realmente puede verla tal como es. Sin máscaras, sin palabras forzadas por miedo a soltar más información de la que es capaz de darle.

Aun no puede entender el porqué de su actitud tan evasiva. ¿A que le teme? ¿De qué se esconde? A veces quisiera hablarle de él, que sepa quién es, que hace o donde trabaja y vive. Se supone que en algún momento eso hacen los amigos ¿No?

Pero ella solo no le deja.

Por eso, cuando hablan de cosas tan simples como el agua, él está más atento a sus palabras; para seguir los pequeños hilos de información que se sueltan de su madeja, y estar ahí justo a tiempo para tomarlos y enredarlos en sus dedos.

Pero siempre termina dándose cuenta de que está hablando de más, entonces ocurre lo de siempre; se cierra como una almeja y comienza a inventar excusas para dar por terminado el tema.

Es obvio que no debería dejarla habitar en su mente por tanto tiempo. Jake tiene responsabilidades, cosas más apremiantes. Pero son tan placenteras las conversaciones con Helen que se le hace natural pensarla. Se preocupa, es dulce, atenta y simple a la vez, para ella todo tiene un punto central; su lema es "nada es bueno o es malo, todo depende de la actitud hacia la vida". Para ella, si alguien es negativo, todo lo veremos mal y si otro alguien es positivo, lo que sale mal es porque así tenía que ser. Su personalidad es adorable, pero no indefensa. Si Jake tuviese que darle una descripción, sería como un pequeño gatito que saca las garras cuando alguien la ataca. Cosa que él hace de forma amistosa cada vez que tiene la oportunidad. Disfruto el oírla rebatir y lanzarle toda clase de insultos ocurrentes.




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