Capítulo catorce

Ya no más reglas

Estoy completamente cansada y frustrada con esta miserable vida controladora que tengo. Siempre soy castigada y sometida a absurdas reglas con tal de ser la "niñita de casa" de mis padres. Ser la hija ejemplar de la familia y la jovencita perfecta que debe mantenerse sumisa ante los adultos sin importar sus opiniones o creencias propias. Olvidándose de sí misma y enfocándose solamente en la ideología creada por sus progenitores. Pero esto es suficiente, se acabó, ya no más cadenas y reglas absurdas que seguir. Simplemente todo esto se terminó desde ahora, porque he decido romper estos hijos de ataduras.

ꟷ ¡Ya no más, papá! ꟷmi voz se formó tajante y firme, mientras que mi mirada estaba en altoꟷ ¡Ya no seré la tonta niña manipulada por sus padres!

ꟷ ¡¿Pero quién mierda te crees que eres para hablarme así?! ꟷcierra los puños y me mira enfurecidoꟷ ¡Dilo!

ꟷ ¡SOY TU HIJA! ꟷgrite eufóricaꟷ ¡Pero eso no te da el derecho de controlarme como a un animal!

ꟷ ¡Fernanda! ꟷmi madre se metió en la discusiónꟷ ¡¿Cómo te atreves a gritarle a tu padre?!

ꟷ No te metas, mujer ꟷmi padre le da un ligero empujón y la corre a un ladoꟷ Luego, tu y yo hablaremos a solas.

Trago saliva y contengo las lágrimas que amenazan en salir de mis ojos, mientras observo como mi padre se acerca desafiante hacia mi dirección. Se detiene a unos cuantos centímetros, aterrorizándome con su intimidante altura, pero aun así sigo con la cabeza en alto.

ꟷ Eres mi hija, tienes razón y por ende puedo controlarte todo lo que me plazca ꟷme observa fijamenteꟷ Yo te cree y tengo todo el derecho del mundo de decidir todo por ti hasta que seas mayor de edad. 

…

ꟷ Además, gracias a mi tienes comida y un techo en donde puedes estar cómodamente, mientras yo me rompo el maldito lomo todos los días ꟷtraga saliva y continuaꟷ Y así es como me lo pagas, mocosa malcriada.

ꟷ No soy malcriada…

ꟷ Lo eres y aparte una contestona de mierda ꟷme muerdo el labio aguantando la ira que me carcomeꟷ Ahora iras a tu habitación te encerraras ahí sin cenar y mañana mismo le dirás a tu profesora que te cambie con una mujer.

ꟷ …. ꟷcierro los ojos por un segundo y los abro nuevamente para observar desafiantemente a mi padreꟷ No, papá…

ꟷ ¿Qué dijiste?

ꟷ Dije que no, papá, no lo hare ꟷno sé de donde salió toda esta valentía ni a donde se fue el temor, pero lo único que sé es que me sentía fuerte en este momentoꟷ A partir de ahora, ya no cumpliré sus tontas reglas, su pequeña niña se ha ido.

Mi padre al escuchar aquella revelación se inmovilizo completamente quedando perplejo y atónito. Pasaron unos segundos hasta que volvió a la realidad, él prosiguió a observarme fijamente con desaprobación. Para luego juntar su mano en puño y acercarlo a mi rostro, mientras que por mi parte cerré los ojos en acto reflejo esperando el golpe. Un golpe que nunca llego gracias que a mi madre lo detuvo poniéndose enfrente de ambos.

ꟷ ¡Rodolfo, detente! ꟷmi madre agarro en el aire el puño de mi padre, mientras lo miraba horrorizadaꟷ ¡Mira en que te estas convirtiendo!

Mi padre se inmuto en observarla en silencio, mientras ella aun sostenía fuertemente su brazo. La escena era tétrica y desgarradora, provocando que me salieran unas cuantas lágrimas de impotencia. Odiaba ver a mis padres discutir y mucho más si la causante de sus conflictos era yo, pero esta vez no podía hacer nada, no debía hacer nada. Porque esta era la etapa en donde debes enfrentar tus miedos para poder ser libre, es algo que involuntariamente debe pasar para salir al mundo exterior. Es una etapa a la que estoy enfrentando y debo ser fuerte sin mirar atrás.

ꟷ Tu no eras así… ꟷmi madre acaricia suavemente el brazo de mi padre, mientras unas cuantas lagrimas resbalan de sus mejillasꟷ ¿Qué sucedió con el hombre del cual me enamore?

Un silencio desorbitante e incómodo reina el lugar por unos minutos, mientras todos los presentes en la habitación nos mantenemos totalmente mudos sin soltar ni una sola palabra. Mi madre observa detalladamente a mi padre, esperando una respuesta de su parte. Los minutos transcurren y lo único que sucede es que mi madre tenga los ojos rojos e hinchados de tanto llorar. Por parte de mi padre él sigue como antes, quieto e inmóvil sin ni siquiera dirigirle la mirada a su esposa. 

ꟷ Respóndeme, Rodolfo ꟷmi madre continuaꟷ ¿Qué sucedió con el caballero del cual me enamore? Del hombre del cual no sería capaz ni de matar a una mosca…

ꟷ Ese hombre murió… ꟷmi padre se digna a responderꟷ Murió el día en que su familia se revelo contra él y decidió ocultarle cosas, como si no valiera nada. 

Trago saliva.

ꟷ Eso no es cierto, sabes bien que siempre te apoye en todo a pesar de que no me gustaba que controlaras y golpearas a nuestra hija… ꟷmi madre me observa tristementeꟷ No toleraba la idea de criarla en un mundo donde tendríamos que protegerla como si se tratase de una muñeca frágil de cristal, pero aun así me mantenía fiel a ti.

ꟷ ¡Ella lo es, Cecilia! ꟷmi padre le responde eufóricoꟷ Nuestra hija es frágil e inocente, como una muñeca, ¿No lo entiendes?

ꟷ ¡No, ella no lo es, compréndelo! ꟷmi madre suelta el brazo de mi padre y lo mira a los ojosꟷ Fernanda es una jovencita grande e inteligente, ella debe aprender a valerse por sí misma ¿Qué pasara el día que no podremos protegerla y estar con ella?

ꟷ ¡Ese día nunca llegara!

ꟷ Lo hará, por supuesto que llegará ꟷmi madre se toma de las cienes, tratando de tranquilizarseꟷ El día en cual Sofía tendrá que dejar el nido y formar su propia familia.

ꟷ ¡BASTA! ꟷmi padre comienza a gritar completamente irritadoꟷ ¿POR QUÉ SOLO QUIEREN ALEJARME DE MI NIÑA? ¿POR QUÉ?

ꟷ Cálmate, Rodol-…

ꟷ ¡¿POR QUÉ INTENTAN QUITARMELA DE NUEVO?! ꟷobservo sorprendida como mi padre se pone pálido y comienza a llorarꟷ ¿NO LES BASTA CON HABERME QUITADO A TODAS LAS ANTERIORES?