52. Nina

Publicado Originalmente: 3 de abril de 2022

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«Sentía que no avanzaba nada»

Junio, 2018

—Todo está listo para la fiesta de este sábado, Nina. Recuerda que puedes invitar a quien desees y que no tengas miedo. Solamente deberás bajar las escaleras cuando se te indique y tu abuelo te presentará entre los invitados. Luego podrás hacer lo que te guste. Aunque, por supuesto que no puedes marcharte rápido. Al menos debes permanecer la gran mayoría del tiempo.

Nina asentía con cada palabra que escuchaba. Aún no podía creer que el día estaba tan cerca. Se había concentrado tanto en la investigación, que olvidó lo más importante. Su fiesta de presentación que la tenía de los nervios. Si bien, como decía su madre, era solo una fiesta. Para ella sentía que era mucho más que eso.

El anonimato que hasta ahora había logrado mantener, pronto se iría. En Woodville las familias pertenecientes a la clase social real eran muy comunes. Habían de todo tipo: condes, duques, príncipes, lord y todos ellos vivían cómodamente con los paparazis. Lo que significaba que estarían detrás de ella aun si era un familiar lejano del actual rey de Woodville.

Se pasó una mano por el hombro sintiéndose tensa. Le sonrió a su madre para dejarle saber que ella estaba metida en eso y que estaba bien. Lo último que necesitaba es que su madre se preocupara.

»Walden estará contigo la mayor parte del tiempo. Así que no te preocupes mucho por lo que debas decir en caso de que te aborden sin que estemos presente. Los Moore han sido parte de esta familia durante generaciones. Te ayudará si lo necesitas y ahora que son pareja, es bueno que esté ahí para ti.

Nina sonrió tensa. Aun si su familia se había tomado bien el noviazgo cuando lo anunciaron. Podía notar que su madre no estaba del todo cómoda.

«Ella realmente quería a Walden y a Lina juntos» le había mencionado Mina cuando se habían quedado a solas luego de una cena. Por supuesto que luego de ese comentario se le había quedado un mal sabor de boca. ¿Pero qué podía hacer para mantener feliz a su madre? No iba a terminar con Walden y este no iba a regresar con Lina. Además, a su madre se le olvidaba que Lina mantiene una relación con Spencer y que está muy feliz en ella.

»¡Nina! —dio un brinco dándose cuenta que se había perdido en sus pensamientos.

—Lo siento, mamá. Solo estaba pensando en el trabajo. Tienes razón, es solo una fiesta y he estado en muchas de ellas. Así que no te preocupes por ese punto. Lo que me tiene un poco preocupada es la posibilidad de que el hermano de mi abuelo esté ese día. Con eso de que lo ayudan los de la interpol. No dejo de pensar en todas las ventajas que tiene en sus manos gracias a su nieta.

—Ya te he dicho que dejes de pensar en eso —le reclamó Katherine mientras dejaba el vestido que ella usaría el día de la fiesta sobre la cama. Estaba en el cuarto de su madre luego de haberla acompañado a sus actividades diarias. En la tarde saldría con Walden. Tendrían una cita real, en semanas.

—Lo siento, es inevitable no hacerlo cuando todo parece estar pisando nuestras cabezas. Soy curiosa y me gusta estar al día. No me culpes.

—Y no lo hago, cariño. Es solo que has salido tan perjudicada en esto. Que no sé cómo es que quieres seguir manteniéndote en el mismo medio. Deja que el detective Dixon se encargue. No sé cómo dio con la información de George. Pero es una bendición que fuera así.

Nina sonrió. Si tan solo supiera su madre que ella fue la que consiguió la información. Para eso tuvo que pedirle ayuda a su exnovio. El cual luego la insultó por simplemente decirle que era feliz con su novio.

Recordar lo que pasó con Fabrizio le daba rabia. Porque ahora sentía como si le debiera un favor. Y no se merecía que ella se disculpara o tratara de recompensarlo.

«Dices que no das segundas oportunidades, pero siempre intentas darle una segunda oportunidad a los que te lastiman.» Walden tenía razón cuando le dijo eso.

—Lo es —confirmó mientras sonreía—. Intentaré no meterme en esos asuntos.

Era una mentira, pero de las piadosas. De esa que no hacían daño.

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—Tengo curiosidad por saber cómo son nuestros primos lejanos. Dijiste que te llevabas bien con los tres herederos del rey. Pero, ¿qué hay de los otros? Se que son unos cuantos los que quedan.

Vio a Mina poner los ojos en blanco y luego se encogió de hombros, restándole importancia.

—La familia real Hiltmoose es muy grande. Nuestro bisabuelo, el Rey Thomas, no se anda con rodeos. Tuvo 5 hijos, del cual el heredero terminó siendo el último. Tuvo dos hijas y una de ellas no se casó. Como tampoco sabemos nada de ella.

—Cuidao si termina siendo cómplice de su hermano malo.

Mina la golpeó en el brazo. Su trilliza #2 no le gustaban mucho las bromas. Eso ya lo sabía. Sonrió a modo de disculpa.

—No lo creo. Según me comentó abuelo Garret. Su hermana era diferente.

—¿Diferente en qué sentido? —preguntó. Aunque obtuvo su respuesta rápidamente—. Oh, ya comprendo. Tenía otro tipo de gustos y por eso no la querían.

Mina volvió a encogerse de hombros.

—Era mucho más complicado que eso, Nina. Si solo hubiera sido por su orientación, nuestro bisabuelo no hubiera tenido tanto lío. Pero abuelo Garret dijo que su hermana era un chico trans, ¿entiendes ahora? Cuando se le negó el apoyo a su transición, se marchó. Y nuestro abuelo, ni nadie volvió a saber de ella.

—Significa que tenemos otro tío abuelo perdido por el mundo. Siendo George como es, no creo que alguien como Isabella se hubiera prestado a esto. ¿Qué hay de los otros?

—La princesa Anabelle tuvo 2 hijos y tiene tres nietos. Ella se mudó a Lakeville. Va a eventos ocasionales de la familia. Y se muy poco ellos. Se que nuestra prima lejana, Anelise Harris es una bailarina de ballet muy famosa. Y luego están los hijos del Rey Arthur. Como ya te dije, el rey y nuestro abuelo están unidos y por ende nuestra familia es cercana.