El día empezó aburridísimo, solo nos dieron horarios y lo que cada profesor solicitó para cada materia, definitivamente estoy empezando a reconsiderar la idea de solicitar una plaza en la universidad a escondidas... Pero eso me traería un gran problema y no quiero morir tan joven, así que mejor voy sacando la idea de mi cabeza...
Llego la hora milagrosa, el recreó... ¡Ahhh! Como amo esta hora, aunque sea la primera vez de hoy, Beth y yo salimos juntas del salón, las dos traemos comida, así que no es difícil buscar un lugar donde comer.
Nos sentamos en una banca del patio y Beth comenta con voz emocionada
— ¡He conocido a una chica genial Em, debería presentártela! — Veo en sus ojos la alegría pero como ya dije, no soy buena relacionándome con gente nueva pero solo porque Beth está emocionada
Solo por eso lo hacemos…
Vaya gracias conciencia…
—Claro, ¿dónde está esa chica? — Beth gira el cuello tan rápido que por un momento pensé que se le iba a romper y se me queda viendo estupefacta como si fuera un marciano y digo — ¡No me veas así! ¡Sabes que no me gusta que me vean como si me juzgarán! ¿Tiene algo de malo lo que dije? — sí, si ya lo sé tengo 15 y sigo teniendo un complejo hacia ser juzgada, déjenme ¿si?
Beth niega con la cabeza y una sonrisa burlona sale a relucir, —Nunca pensé que dirías que si Em, es tan raro escucharte decir que quieres conocer a alguien, ¿acabas de escucharte? ¡Qué emoción! ¿Dónde quedó mi Em? — Simplemente me encogí de hombros y me paro, Beth pone una cara de confusión sin entender que hago.
— ¿Me vas a llevar o no? Estoy así de arrepentí... — no me dejo acabar la frase y me toma la mano y sale corriendo hacia el primer patio, busca alguien entre la gente y tan rápido como salió, la encontró...
Beth se acercó a un grupo de 3 chicas y le tocó el hombro a una, suponiendo que era su nueva conocida, se volteo y nos sonrió con sorpresa y amabilidad, la analice un poco, era morenita como si hubiera estado mucho tiempo en el sol, ojos negros muy lindos, cabello lacio y muy largo, parecía alta de estatura y se veía bien en el uniforme.
A comparación mía, yo estaba nadando en él, mi uniforme me quedaba grande porque el suéter y la falda eran de mi hermana, mi hermana asistió al mismo colegio que yo, es 3 años mayor pero pasó por aquí y me heredó su uniforme, tristemente a comparación suya yo soy un palo, pero bueno mi intelecto es más valioso...
— ¡Hola Ada! — saludo emocionada Beth, — Esta es la amiga que te mencione — se volvió hacia mí y me jalo enfrente de ella, — Emma, ella es Adelina, Adelina ella es Emma. — Extendí mi mano hacia ella y la tomó
— ¡Hola Emma! Puedes decirme Ada, solo Ada, no me gusta Adelina. —sonreí ante la petición, a mí tampoco me gustaba que me llamaran por mis nombres completos.
Asentí sonriendo— Esta bien Ada, solo dime Em, me gusta más que Emma. — sonrió ante lo irónico de la situación y soltó mi mano y nos invitó a sentarnos con ella y sus amigas.
Al sentarnos nos presentó con ellas, — chicas, ellas son Beth y Emma. — las dos chicas nos observaron unos segundos y sonrieron, hicieron un gesto de saludo con la mano, la primera en hablar fue la de cabello rubio.
— Hola, me llamo Casandra. —hizo un gesto con la mano y le devolví una sonrisa forzada, no me agrado en ese instante por querer hacerse notar antes que la otra chica.
La castaña sonrió agradablemente, alzó la mano para quitar un mechón de cabello de su cara y dijo —Mucho gusto chicas, yo soy Jane. — le correspondí con un gesto cortes, no tengo idea pero ella desprendió ese tipo de energía que me gustaba.
[...]
De regreso en el Salón entre con mis nuevas ¿amigas? No lo sé, son más como compañeras pero entramos juntas, nos sentamos en nuestros lugares y entró una pelirroja, parecía de unos 45 años y tenía una sonrisa en su rostro.
—Buen día alumnos, Soy Miss Susana y tengo el placer de darles ética, empezaremos con una actividad les daré un número del 1 al 5 y formarán grupos — todos nos quedamos viendo con cara de "no gracias, no queremos" pero la señora empezó a enumerar a cada uno y al finalizar nos levantamos a la fuerza.
Trágicamente y para mí sufrir total me tocó con 6 diferentes personas y entre ellas Casandra, no quería hablar con ella, no me agradaba tanto.
Casandra sonrió ante mi presencia — ¡Hey! Qué bueno que estás conmigo, no conozco a estos y no sé si me agraden... — dejo la frase al aire visualizando a los demás del pequeño grupo y solo asentí, me sentí mal por ella, por como pensaba sobre socializar con las demás personas de ahí pero no podía dar mi opinión porque no era un tema que me involucrará.
Comenzó la actividad y está involucraba hablar de algo trivial con los demás, todos aportamos cosas básicas como nuestro color favorito, comida, hobbies, unos momentos después quedamos en total silencio y Casandra inicio una conversación conmigo, me contó que tiene una hermana gemela que iba en el B, se llama Carmín y al parecer la gemela es muy grosera con Casandra pero la quiere aun así. También me contó que su papá murió cuando eran apenas unos bebés y solo lo conocía por fotos, después me contó que ella conocía varias personas de grupos mayores y eran buenos amigos y que no se veían tan malos como parecían...
Esa conversación me dejó atónita, nunca creí que una chica como ella pudiera tener una vida así, parecía perfecta, tanto por dentro como por fuera, cambie mi opinión sobre ella y quería conocerla, sus sentimientos eran puros y sinceros, te daba una careta de niña pija pero no lo era... Era una chica sincera, por la forma en la que hablaba cualquier opinión que se le pasaba por la cabeza lo decía, era una persona sin filtros.
Era una chica que deseaba conocer y presentía que sería una gran amiga…
Ada se acercó a nosotras cuando acabo la actividad
—Hey, veo que ya se amigaron, ¿o me equivoco? — Cass y yo nos volteamos a ver y nos sonreímos.