IX

Han pasado dos semanas desde que soy novia de Clark, debo decir que es más que fantástico es.. Como si el hubiera salido de un libro. No es para nada como una relación con Cooper.

Tan sólo si quisieras compararlos, no hay como. Porque simplemente no existe comparación, no se si Clark sea así con todas pero... Me encanta la manera en como me trata.

Clark se ah convertido más que mi novio, mi mejor amigo, mi confidente, muchas cosas en una. Jamás pensé que amaría estar con una persona sin importar donde o como.

—¿Entonces Amber te cae mal?—pregunte mientras le acariciaba su cabello.

—Más que eso, la odio, no la soportó, ella es como una piedra preciosa falsa deseando ser real. Un perfume barato, una película barata, un producto de mala calidad.

—Amor, ya entendí.—sonreí divertida.

—Ese apodo no me gusta pero cuando suena de ti, me encanta.—cerró sus ojos mientras salía una linda sonrisa en su rostro.

También sonreí sin que se diera cuenta y seguí acariciando su cabello mientras veía aquel atardecer convirtiéndose en la noche cálida y profunda.

Mientras seguía acariciando el cabello de clark el abrió los ojos y se levantó mirándome a los ojos que brillaban bastante y una cálida sonrisa.

—Te tengo una sorpresa. Se que ya es noche... Y... —dudo un momento en decir lo que iba a decir para después mirar la puerta de mi casa nervioso y al final mirarme—Tengo que pedirle permiso a tus papás, porque no pienso secuestrarte.

Solo sonreí y lo mire de manera curiosa ya que no sabía en que estaba pensando, ni que era lo que me quería enseñar aunque admito que me daba mucha curiosidad, además me ponía nerviosa saber que mis padres se enteraran lo de clark.

Clark se puso de pie y me ofreció su mano a la cual acepte y agarrados de la mano fuimos a la puerta de mi casa mientras me sudaba la mano y tocó la puerta.

Abrieron la puerta y afortunadamente era Jett que nos había abierto con una bonita y cálida sonrisa.

—Hola mis enamorados favoritos.—siguió con esa sonrisa y se hizo aún lado para que entraramos.

Cuando dimos los primeros pasos a mi casa, mis padres desafortunadamente estaban en la cocina, papá estaba comiendo unas frituras y mamá una ensalada de manzana.

Algo que me impresionaba de mis padres es que a pesar de ser tan diferentes hacen una de las mejores parejas que he presenciado en mi vida. Uno siempre está para el otro, son cariñosos, no se gritan solo hablan y lo arreglan juntos.

En algún momento mis padres fueron mi expectativa en el amor. Su manera de amarse era tan pura y sincera que yo quería algo así.

Lo mejor es que ya lo estaba teniendo con clark y eso me ponía muy feliz, aun metida entre mis pensamientos yo pase a la cocina a lado de clark que cuando lo mire no vi ni una pizca de nerviosismo mientras tanto yo si. Mi madre se dio cuenta de nuestra presencia y al mirarnos solo saco una cálida y amable sonrisa.

—Hola mi amor y... —mirando a clark con confusión y era obvio ya que nunca se presentaron oficialmente.

—Clark, es un gusto señora.—dijo amablemente dedicándole una linda sonrisa a mi mamá y luego miro a mi papá que lo estaba mirando igual que mamá.—Y un gusto a usted también señor.

Mamá solo sonrió amablemente y mamá al mirarme dedujo que quería pedirle algo, ya que mi mamá me conocía más que nadie, bueno al menos gran parte de mi la conocía. Claramente no sabe nada de cooper ni de Alicia si lo supiera hubiera matado a Alicia y a Cooper lo hubiera mandado a la cárcel sin importarle nada.

—Conozco esa sonrisa nerviosa mi amor ¿Que es lo que quieres?.—pregunto cruzándose de brazos e inmediatamente contesto papá.

—No hay permisos a estas horas de la noche si eso querias pedir.

Bueno... Se intentó.

De la nada Clark que estaba junto a mi, agarro mi mano enfrenté de mis padres y sonrió con una gran confíanza encima de él.

—Señor y señora quería yo pedirles el permiso de salir con su hija el día de hoy, prometo regresarla temprano, denme una hora y su hija estará acá cinco minutos antes.—dijo mirando a mis padres de manera respetuosa.

—Admiro que nos pidas permiso jovencito pero ya es muy noche y honestamente no sabemos ni quien eres y podría ser peligroso.—dijo papá mirando directamente a los ojos verdes y azules de clark.

—Papá, el es mi novio.—dije nerviosa mientras apretaba fuertemente la mano de Clark ya que me moría de nervios.

Mamá abrió los ojos como platos y papá solo abrió un poco la boca haciendo que su expresión cambiará un poco viendo a clark de manera diferente un poco más intimidante.

—¿Tu novio? Pero ¿Y Cooper?.—pregunto mi madre sorprendida.

Mientras que clark al escuchar el nombre de Cooper pude notar que se tensó era claro que Cooper no le caía nada bien y tenía sus razones.
Mientras que yo solo mire a mi mamá para poder explicarle y suplicarle un permiso.

—Hace tiempo que cortamos mamá, ahora ando con clark hace dos semanas. Pero sacando ese tema... Por favor ¿me dan permiso?.—Dije haciendo un poco de puchero, esa cara solo la hacia para que me compraran un libro solo que en esta situación era diferente.

Papá solo pensó y mamá seguía sorprendida mientras que los observaba y había un gran silencio hablo Jett de la nada.

—Yo voy con ellos papá, no te preocupes. Soy el hermano mayor es mi deber, yo te avisó de todo pero déjalos, andale. —Dijo Jett enseguida con cierta emoción en sus ojos.

Papá nos miro a clark y a mi para luego pasar su mirada a Jett y solo asintió con la cabeza y mamá hizo lo mismo. Entre los tres sonreímos y nos dirigimos para la puerta y salir de ahí.

No se para donde íbamos a ir pero si era junto a clark no me importaba ya que con el a mi lado me sentía segura.
Cuando salimos de mi casa, Jett solo sonrió y nos miro orgullosos mientras que yo dejaba de sonreír porque tendríamos que llevar a Jett, era mi hermano pero no quería convivir con el ahora.