Contigo, hasta la luna

EMILY

Luego de clase con el señor Hunter, Alexander y yo decidimos ir a caminar y aprovechar nuestra última hora libre antes de salir.

 

–Oye...estaba pensando y bueno...llevamos un mes saliendo, pero aún no sé nada sobre tu familia.– dije y Alex hizo una mueca.– Lo siento, es solo que conozco a Niall de toda la vida y jamás había salido con alguien, hasta que llegó tu mamá y tú no te ves muy feliz con ellos y bueno...– intentó interrumpirme, pero seguí– me preguntaba si tal vez podrías contarme el porqué o al menos invitarme a estar con ellos algún día, porque algo que sí sé es que tu hermana me odia.– él sonrió.

 

–Eres terca y sé que si digo que no insistirás.– dijo y yo asentí.– vale, mi mamá y Niall saldrán a una comida hoy, entonces si vienes conmigo luego de la escuela puedes ayudarme a cuidar a mi hermana.– sonreí y lo abracé.

 

–Por supuesto, quizá por fin vea que no soy tan mala como ella piensa.

 

–Tienes razón linda, créeme que eres peor– dijo y le di un golpe en el hombro.– Auch, me equivoqué, quise decir que eres un ángel.

 

–No lo quieras arreglar tonto, no puedes.– contesté y me di media vuelta. Estaba caminando por el pasillo en dirección opuesta a él y de repente sentí dos brazos rodearme.– ¡suéltame!– grité riendo.

 

–¿Acaso crees que puedes hacerme un berrinche así y luego irte? Claro que no gremlin, ahora vienes conmigo.– dijo y me tomó de la mano.

 

–Estaba a punto de ganar.–

 

–Tú y yo sabemos que eso no es cierto.– declaró sonriente y se acercó, pero en vez de besar mis labios besó mi mejilla.

 

–Tonto.

 

–Terca.

 

Empezamos a reír y lo abracé mientras caminábamos por los pasillos, esperando el timbre de salida.




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