Continent of the Mutants

Capítulo 1: Amenaza

A lo lejos del planeta, se podía distinguir un asteroide, un peligro inminente para la humanidad. Esa fue la imagen que millones de personas vieron tras el anuncio de la NASA, junto con su alarmante pronóstico: el asteroide impactaría en algún punto de América. Su tamaño era tan colosal que representaba una amenaza capaz de destruir gran parte del continente y acabar con la vida de millones.

La preocupación se propagó. En cuestión de horas, Estados Unidos convocó una reunión secreta y urgente con los presidentes y gobiernos de todo el continente, buscando desesperadamente una solución a la crisis que se avecinaba.

En un lugar de Estados Unidos dentro de la casa blanca.

Los presidentes de los paises de America habían asistido sin excepcion, para evitar mas preocupacion en la gente y evitar castratofes civiles la reunion se habia realizado en un sotano elegante, sin ventanas con dos puertas a los costados y una pantalla grande adelante de unas sillas y mesas cómodas donde se ubicaban presidentes, delante Edgar Ford, el presidente de Estados Unidos, un hombre alto de 60 años que bestia un traje azul con una corbata de rojo, se presentaba mientras sostenía unos documentos en varias carpetas.

-Buenos días, espero que hayan tenido un buen viaje hasta aquí, como ya sabrán, les he reunido aquí para discutir este tema.- Dijo Edgar, intentando no sonar nervioso.

Edgar prendió la pantalla en la que se vio una imagen clara del asteroide dejando a la mayoría perplejos.

-Este asteroide, que fue llamado "Chaos_35", es el mayor peligro que tenemos, por las noticias han de saber que se a calculado que su impacto va a ser en América, podemos decir que por Sudamérica entre Brasil y Colombia aunque no es exacta esta información. - Dijo mientras cambiaba de fotos del asteroide.

-¿Y ya han visto alguna solucion posible?- Dijo Manuel Andrade, presidente del Perú, mientras alzaba la mano.

-Con lo que sabemos, no podemos desviarlo solo con cohetes como en alguna ocasión se planeó debido a su tamaño y velocidad en la que se aproxima- Comentó Lázaro Diaz, presidente de México, un hombre de altura media de 46 años que venía con un traje negro.

-Y tampoco podemos destruirlo con cualquier proyectil- Decía Orlando Ortega, presidente de Panamá, un señor de 56 años con un traje gris,

-además son demasiado costosos-

-Los costos no son un problema en una situación así, el problema sería que si no sale bien quizás el asteroide caiga a cientos de pedazos causando un daño similar o siga intacto que seria lo mismo.- Comentaba el presidente de Chile, Sebastián Pérez, mirando atentamente la pantalla.

-¿Cuánto va a tardar en llegar hasta la tierra?, si sabemos eso podremos idear algo mejor que esas ideas.- Dijo Julio Sosa quien era el presidente de Argentina.

-También debemos dar una noticia lo mas rápido posible, si no lo hacemos la gente dirá que es el fin del mundo y antes de que nos termine de matar ese asteroide nos mataremos a nosotros mismos por dejarnos llevar por la desesperación- Alzó la voz Noah Reynolds, presidente de Canadá

-Siendo sinceros, no hay ninguna solución para esto- Dijo con voz cansada Gabriel Olivera, presidente de Brasil -Podemos decir que es el fin-

-Eso no es cierto

Ford se levantó de su cómoda silla, mostrando una pantalla con varios datos

-Nuestros expertos ya han estudiado el caso, por alguna razón nunca supimos sobre este asteroide, es como... si hubiera salido de la nada- dijo con confusión y nerviosismo -aunque no tenga explicación, por mi parte he intentado buscar una solución y en eso encontré a un hombre.-

La pantalla cambio, en ella se veían datos de universidades, carreras, estudios y fotos de una persona de cabello rubio, alto y con una apariencia que daba desconfianza.

-¿Quién es ese hombre?

-¿Es nuestra solución?

-Espero que el sepa algo que nosotros no.

Los líderes del continente estaban hablando, dónde no se podían distinguir todas las preguntas por completo, hasta que se fueron callando de poco a poco esperando una respuesta o explicación de Ford

-El es la mente más brillante que hay, sus logros, sus hazañas, y aunque ha estado en el anónimato eso no quita que sea el hombre más listo del mundo, el Dr. Fernández.

De pronto Reynolds habló

-¿El no viene de la familia de Científicos?

-Si, el Dr. Fernández viene de esa familia que ayudo mucho a este país tanto en la medicina, como en avances científicos en la Biología, por lo que hizo que crezca en un ambiente de ciencia- Respondió Ford

-¿Qué tiene que ver la medicina y la Biología con Astrología? ¿Nos va a dar la tecnología suficiente para detener a un asteroide?- preguntaba ya el histérico Julio Sosa -Espero que esto....

-Ya te escuché, cállate

Una voz salía de las puertas que llevaban a la sala de reunión, mientras se escuchaban unos pasos que iban lentamente a entrar, cada paso se escuchaba más fuerte como unas botas de cuero y la misma voz se hizo escuchar.

-Buenos días, es un honor estar frente a ustedes, el presidente de los Estados Unidos ya me presento aunque no de la mejor manera- Dijo el Dr. Fernández.

Su voz era profunda, algo grave y con peso, un acento elegante que iba a la par de su vestimenta, pantalones de cuero, unas botas y un Mandil blanco, y unas gafas negras, tenía una aura que reflejaba tensión en los demás, con su presencia los demás ya lo respetaban.

-Lo que yo propongo es una solución que no va de mano con misiles y tecnología como se imaginan- El Dr. Fernández sonrió -Desde hace mucho tiempo mi familia ha trabajado en varios proyectos pero en uno en especial, la evolución humana-

Al escuchar esas palabras, todos quedaron aún más confundidos, nadie sabía de que hablaba o cual era su intención en realidad, excepto Ford quien cerraba los ojos mientras apretaba sus manos, como si estuviera rezando aunque no era así.



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En el texto hay: drama, ficcion, acción ciencia ficción

Editado: 06.08.2025

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