Capítulo 2

Sebastián 

Papá se fue a trabajar en un caso confidencial, por lo tanto, me termino dejando sólo en el apartamento. Aproveche en acomodar mi ropa, mientras escucho la canción de Fantastic Baby de BigBang. No tarde mucho en hacerlo porque la mayoría son camisas y pantalones.

Al terminar me dedico a coger varias fotografías del dormitorio para enviárselas a mamá. Ella, me pidió el favor de llamarle al estar en casa de papá, lo cual no he hecho, por cierto. He estado ocupado en desempacar mi ropa que venía arrugada por haberla acomodado mal en la maleta en mi mente podía casi escuchar a mamá diciéndome "te lo dije" dado que, antes de abordar el viaje en California me ayudó a empacar y dio Tips de viaje.

Le escribí un mensaje de whatsapp puedo decir que no es una manera correcta de hablar con mi mamá por el respeto que le tenía, pero al encontrarme en otro país es necesario utilizar este medio.

De Sebastián a mamá:

¿Qué te parece mi habitación?

De Mamá a Sebastián:

Perfecta y ordenada. Por favor no vayas a tener un desorden como en casa.

De Sebastián a mamá:

No mamá

De Mamá a Sebastián:

Entre a tu habitación y no veo que llevaras la ropa sucia al cesto

De Sebastián a mamá:

Tengo que irme, Emma ha llegado al apartamento para ver una película de terror

De Mamá a Sebastián:

Evadiendo ese tema. Cuando regreses vas a encontrar tu cuarto sin nada porque lo voy acomodar yo y no me hago responsable.

Sí. Solía ser desordenado con mis cosas personales y no lleve la ropa sucia al cesto porque me levante tarde para ir al aeropuerto. Oh, Santa Ramona ayúdame a que mamá no encuentre mis revistas gais en mi armario lo había olvidado por completo ese hecho. Mamá no sabe sobre mi preferencia sexual aún debido a que no he encontrado el momento indicado para hacerlo; la única persona que me comprendía era Emma porque le he confiado mi secreto durante mi adolescencia.

Joder, espero no meterme en un gran lío porque tendré un interrogatorio a mi regreso. ¿Cómo pude ser tan descuidado? No debía aceptarlas como regalo por parte de Logan.

Salí de mis pensamientos al escuchar el toquido de la puerta. Dejé atrás mi drama y confiare en que mi mamá no las hallará en todo el desmadre que hay en ese cuarto.

— ¡VOY! —grite.

Busque el juego de llaves que dejó papá antes de partir al trabajo. Al encontrarlas abro la puerta para ver a Emma con una bolsa y una caja de pizza en sus manos.

— ¿Listo para la noche de chicas? — pregunta Emma.

Ella no se cansa de torturarme por el simple hecho de creer que soy afeminado. De hecho, ser gay no implica sinónimo de femenino, hay personas que asocian a los gais con la feminidad, pero es un estereotipo creado por una sociedad de mente cerrando no todos los gais son así. No hay que generalizar.

—Entra porque se va enfriar la pizza—dije.

Emma asintió. No le hice la corrección sobre su concepto de gay, he aprendido a que es mejor guardar silencio sobre esos comentarios para evitar entrar en conflicto; no debíamos de hablar de religión, política y orientación secuela con las personas porque son temas delicados cada uno podía pensar de manera distinta.

— ¿Dónde está Ana? — cuestionó.

Falta la castaña que suele acompañar a mi prima en sus locuras de noche de chicas. Es extraño no verla a su lado después del todo.

—Ella, está de vacaciones con sus padres—respondió Emma—. La desgraciada no quiso llevarme a Inglaterra para casarme con el príncipe.

Solté una carcajada.

Emma tiene la esperanza aún de hallar a su príncipe como en los cuentos de hadas, la triste realidad es que no existen no es como no lo han pintado. Si, en verdad pasara mi crush me hubiera coqueteado desde el primer instante y todos sabemos que eso no ocurrirá.

—Ahora entiendo porque no me respondió ayer—dije.

Emma mueve la cabeza.

—Buscaré en Netflix que películas hay—dijo la pelirroja.