Capítulo 19

El joven llevó sus acciones demasiado lejos.La policía fue llamada al lugar y, después de revisar las cámaras de seguridad y recopilar testimonios,aportaron pruebas en contra de Douglas.  Además de enfrentar cargos por agresión, también se le imputan otros delitos relacionados al sabotaje del centro comercial.

El juicio llegó rápidamente y el juez, conocido por su reputación de ser firme, se aseguró de que se hiciera justicia. Todos los cargos fueron presentados ante el tribunal, y las pruebas presentadas en su contra eran contundentes.

El juez miró fijamente a Douglas, con una expresión seria y desaprobadora en su rostro. Le recordó a Douglas las consecuencias de sus acciones y cómo había afectado la tranquilidad y seguridad del centro comercial. En voz alta, anunció la sentencia.

— Diez años de prisión.Caso cerrado.

El rostro de Douglas se desdibujó en un gesto de sorpresa y desesperación. Nunca esperó que las consecuencias de sus comportamientos  llegaran a ser tan graves. Mientras lo esposaban y lo llevaban fuera de la sala del tribunal, sus ojos se encontraron con los de Camila y Michael. Era evidente que había perdido y que ellos se habían convertido en las verdaderas víctimas de su odio y violencia.

¡Camila perdóname!,¡te amo!

La joven mira a su novio y no puede dejar de pensar—¿Qué sería de mi vida si Douglas hubiera matado a Michael?

—Amor,¿estás bien?

—Sí cariño solo pensaba en lo afortunada que soy de tenerte a mi lado. 

¡Te amo tanto Cami!

—Y yo no se diga.

El juicio había sido uno de los momentos más estresantes en la vida de Michael. Había estado angustiado, temiendo por su futuro y por el bienestar de su novia . Pero finalmente, había llegado la tan esperada respuesta a sus plegarias,Douglas pagaría sus delitos,ya no los molestaría más.

Michael no pudo contener las lágrimas de alivio y gratitud que llenaron sus ojos.

No pudo evitar pensar—¡casi muero a manos de ese desquiciado!

La madre de Michael, Juana, sabía que tenía que hacer algo especial para celebrar. Había preparado un delicioso almuerzo para su hijo y su novia, Camila. Quería que todos se sintieran felices y agradecidos por la suerte que habían tenido.

Mientras Camila y Michael se sentaban a la mesa, sus rostros brillaban de alegría. Se miraban el uno al otro, reconociendo todo lo que habían pasado juntos. Había sido un camino lleno de obstáculos, pero habían demostrado que el amor y la unión familiar podían superar cualquier adversidad.

—Mi amor— dijo Camila mientras sostenía la mano de Michael, —no puedo creer lo bien que ha salido todo. Este susto nos ha recordado lo valiosa que es la vida y lo afortunados que somos de estar aquí, juntos.

Michael asintió, sus ojos llenos de emoción. Había estado tan cerca de perder todo lo que amaba, pero ahora se sentía aún más decidido a aprovechar cada momento.

Juana los observaba con una sonrisa en su rostro, agradecida por tenerlos a ambos. Sabía que la vida podía ser injusta y despiadada, pero había algo maravilloso en la capacidad de superar las dificultades y encontrar la felicidad nuevamente.

Mientras comían, los tres compartieron risas y anécdotas divertidas. Era como si el peso del juicio se hubiera levantado de sus hombros, dejándolos livianos y libres para disfrutar el presente.

En medio de la comida, Juana se puso de pie y levantó su copa. —Brindo por  nuestra familia, por  la vida,  la gratitud y el  amor que siempre nos ha sostenido— dijo con voz temblorosa.

Michael y Camila se levantaron también, sosteniendo sus copas en alto. —Por  la vida y por todos los momentos felices que nos esperan— dijo Michael con emoción.

Después de brindar con jugo de naranja , cada uno volvió a la mesa y continuaron disfrutando del delicioso almuerzo preparado por Juana. Pero en el fondo de sus corazones, sabían que este momento de unión y felicidad sería recordado por siempre.

 Michael se repetía a sí mismo lo afortunado que era de tener a Camila y a Juana, su fortaleza y su amor incondicional. Camila, por su parte, agradeció por haber sido testigo de la resiliencia de Michael y se prometió a sí misma estar siempre a su lado. Y Juana, mientras cocinaba el almuerzo, sus pensamientos se llenaban de gratitud hacia la vida por permitirles seguir juntos, celebrando y amando.

Todo estaba en paz en ese momento, pero sabían que la vida podía ser un viaje complicado. Sin embargo, tenían la certeza de que mientras estuvieran juntos, podrían superar cualquier adversidad que se les presentara.

La madre de Michael fue a la iglesia del padre Lucas, le colocó flores a los santos,prendió una veladora y rezó,sentía gratitud por el bienestar de su hijo.

—Padre Lucas,  vine a la iglesia para rezar y agradecer a los santos por proteger a Michael. Ha pasado por momentos difíciles y me reconforta saber que están cuidando de él.

— Es una buena idea, Juana. Pero debes  tener en cuenta que no está bien mantener separado a su hijo de su padre. Es importante que ambos estén se conozcan.

— Lo sé, padre Lucas. Pero tengo que admitir que todavía guardo rencor hacia Jhon por su abandono. Aunque sé que necesito darle tiempo y espacio para demostrar que  ha cambiado.

El monaguillo espiaba la conversación — Parece que la señora es amiga del cura. Le ha invitado a almorzar, le dio su dirección —piensa  el monaguillo y memorizó la dirección. ¡Debo llamar a John Parker inmediatamente!

— Jhon, tengo información importante para usted . La señora, que usted busca,vino a ver al padre Lucas y  le acaba de invitar a almorzar en su casa. Me sé la dirección, ¿quieres que te la diga?

 ¡Sí, por favor! Necesito saber más de Juana y que me avise si vuelve por  allá. 

—Está bien, señor.

El muchacho le dio la dirección del apartamento de Juana  y Jhon fue de inmediato.