Las luces de la ciudad centelleaban como estrellas en el cielo. La tranquilidad reinaba en todos los lugares.
O eso parecía
Por los callejones más oscuros de la ciudad caminaba rápidamente una chica. Vestía de negro y parecían que tenía prisa.
¿Y como no, si en los lugares más recónditos de la ciudad acechaban cosas dignas de pesadillas?
Cosas que nadie querría encontar.
Divisó un callejón oscuro, un atajo. Entró. Caminó un poco y luego suspiró.
No había salida.
Sintió sus pasos antes de dar la vuelta. La chica se encontró con sus ojos y su expresión, deleitada como cazador que había encontrado a su presa. La chica sonrió.
La atmósfera se sintió más pesada, una luz tilitó.
Ingenuo __pensó la chica__se encontró con un depredador mejor que él, o peor, según como se mire.
Pronto sabría que la presa es él, pero ya será demasiado tarde.