Capítulo 008

Savannah

Me estaba haciendo la dormida, habíamos decidido dormir juntos en la cama, estoy totalmente nerviosa y temo quedar en ridículo. Trato de regularizar mi respiración para que no se dé cuenta de que estoy despierta.

— ¿Cuanto más tiempo te harás la dormida? — me dice Nicolás a lo que yo me asusto.

No porque me hable sino por su roce en mi mejilla. Sé que se siente incómodo por el compartir la cama conmigo y por el hecho de que mis pijamas no son nada recatadas ¿En que estaba pensando yo? Resopló mientras trato de controlar las emociones en mí.

—Algunas veces el silencio es bueno

—Lo creo de todos menos de ti, siempre hablas de nuevos proyectos o debatiendo proyectos en proceso

Me sonrojo inmediatamente sé que tiene razón, detesto el hecho de que me conozca tan bien y me encanta por la misma razón.

— ¿Porque nunca me has dicho el motivo por el que nunca volviste a tu pueblo?

Nos volteando a la ves y puedo ver su rostro lleno de tristeza. Me pongo a analizar si lo que dije no me afectara, él no tiene la obligación de contarme sus problemas y yo tal vez estoy presionando una herida muy dolorosa. Pero no puedo evitar preguntarme si realmente fui muy malo lo que él hizo ¿Es normal? Creo que sí.

—Si no deseas hablar no te sientas presionado.

El niega con la cabeza

—Creo que si es necesario porque te he traído aquí y ni siquiera te he explicado el motivo de mi exilio.

—Lamento ponerte en una situación algo incómoda

El suspira mientras sonríe

—Era un adolescente hormonal, tenía todo lo que un adolescente desea. Fama, familia con buen nivel económico e inteligente. Sin embargo, creo que las drogas eran la solución para triunfar. Yo caí en ellas

No puedo evitar jadear. Me está hablando de alguien totalmente diferente a lo que es actualmente. No digo que no sea guapo es solo que es tan introvertido que cuesta creerlo.

—Pertenece a tu pasado

—Aunque quieras decir ello, ambos sabemos que lo que fuiste siempre te perseguirá.

—El paso para seguir adelante es recordar lo que fuiste a, mejorar en el presente, y superarte en el futuro. No puedes seguir atormentar te por algo que ya pasó.

—Eres una persona con gran corazón, pero no todos son así.

Abro la boca para debatir decido cerrarla. Él tiene la razón no todos son iguales.

—Gracias por decirme tus temores.

Le acarició suavemente la mejilla mientras le regaló una sonrisa. Debió ser duro para él y la sociedad en muchos casos es demasiado cruel. Los traidores atacan y el ingenuo sigue las masas sin importar lo que dañan.

—Gracias a ti por ayudarme en esta situación tan incómoda. Sé que es duro para ti el tener que estar en un lugar así...

—No lo es —le aseguró —todos tenemos algo que otro no tiene y eso es lo que nos hace únicos

Él tiene unos padres que lo quiere y velan por él. Yo solo tengo dinero y una casa vacía

—Mi mamá tiene ganas de engordar te un poquito más que hoy —Dice con diversión a lo que no puedo evitar reírme

—Valdrá la pena. Estaré viviendo una vida de ricos.

Él se ríe. Me imagino que conoce el lema que la mayor riqueza que puedes tener son: un hogar, buena comida y noches cálidas.

— Tendrás que comprar ropa nueva cuando vuelvas a la ciudad

Ruedo los ojos mientras me río demasiado. El extiende el brazo y me jala a su lado. Su calor me reconforta y hace que el sueño venga inmediatamente.

—Buenas noches —Me susurra suavemente haciéndome erizar por el tono de voz.

—Buenas noches —Digo con una gran sonrisa.

Me quedo allí entre sus brazos encontrando algo de paz. Por primera vez no tengo pesadillas y puedo descansar adecuadamente