Cumpliremos Nuestros Sueños

Capítulo Tres/ Del menor al mayor.

Dale vida a los sueños que alimentan el alma,

no los confundas nunca con realidades vanas.

Y aunque tu mente sienta necesidad, humana,

de conseguir las metas y de escalar montañas,

nunca rompas tus sueños, porque matas el alma.

-Mario Benedetti.

Isabella.

—Bien ¿Cómo se supone que haremos esto? — pregunta Ivy.

Nos encontramos en el parque que se encuentra cerca del salón donde nos reunimos con "El grupo". Cuando decidimos que era momento, acordamos de no decir nada a nadie hasta que tuviéramos todo organizado y me pareció perfecto, pero necesito que esto sea rápido, se supone que hoy comenzaba con el tratamiento y le metí cientos de excusas a mis padres hasta convencerlos de comenzar la próxima semana; aunque sé que no podré extender esto por mucho tiempo.

—Y ver cuáles son los más fáciles de hacer, ¿no? — dice Cameron comiendo unas papitas fritas.

—¿Tú dices de primero cumplir las más fáciles y luego más complicadas? — pregunta Emma.

—Exacto.

—Por mi está bien, yo creo que es mejor así. — opina Ivy.

—Okey — Dylan da un aplauso —. Saquen sus listas.

Todos comenzamos a desdoblar las hojas y las extendemos en el césped. Hay mucha variedad de sueños y muy distintos. Está claro que en este grupo no se repiten personalidades.

—¡¿Cosechar?! — Ivy creo que está sufriendo un ataque de pánico.

—¡Síí! Como en las películas — dice Emma bien alegre.

Tomo su hoja para comprobar y... quiero reírme, ¡es verdad! Además, su lista está lleno de corazoncitos rosas.

Mis sueños:

Ir a un parque de atracciones.

Ir a un campo y cosechar fruta.

Tirarme en paracaídas.

Bailar en pleno centro.

Hacerme un tatuaje.

Aprender a bailar ballet.

—Bueno lo del tatuaje es más lo tuyo —le digo a Ivy riendo.

—No me pienso poner un vestido con flores para hacer esa cosa.

—Oye, que los tuyos son bastantes raros —dice Cameron.

—Claro que no — se defiende Ivy.

—Ir a un recital de rock, decirles "brujas" a las enfermeras — comienza a leer su lista — ¿adoptar un hurón?, protestar, ver las linternas flotantes y tirar una. ¿Por qué adoptar un hurón?

—Porque son bonitos, no como tú — le muestra el dedo corazón.

—Muy madura.

—Ya, no discutan más. Todos saben que mis sueños son los mejores — canturrea Dylan.

—A ver — dice Jake y toma su lista —. Besar a una bibliotecaria, ir a una fiesta, cantar a todo pulmón mientras viajo en un auto sin techo, esquiar y... — se detiene para sonreírle a Ivy —... Besar a Ivy.

—Oye, que ni por lastima voy a hacer eso — Ivy le frunce el ceño Dylan.

—Cariño, veo en tus ojos el deseo por besarme — ella voltea los ojos, sin embargo, no le responde y creo notar que se sonroja. Ayy, Ivy.

—¿Eso es todo? ¿No decías que iban a ser los mejores? — le reprocha Cameron.

—Y lo son.

—No.

—Por lo menos los míos no son comunes como los tuyos — Dylan le arrebata la lista a Cameron—. Conducir en una cerrera de autos, saltar en bungee, hacer surf, viajar en avión. Emborracharme y... — Dylan acerca la lista más a su cara para ver mejor —. ¿Por qué tachaste lo que sigue?

—Por nada — responde y le arrebata la hoja. Sonrío por la cara de que puso Dylan.

—Bieenn, Jake, cuáles son los tuyos — pregunta Emma.

Jake toma su hoja y se aclara la garganta antes de hablar.

—Viajar en motorhome, acampar y hacer una fogata, ver una cascada, aprender a tocar la guitarra y... — se detiene para mirar a Ivy y a Cameron y luego se centra en su hoja — y asar an ybra da trato — susurra.

—¿Qué? — preguntamos todos a la vez.

—Amtur en ina ova she trato.

—Tal vez si modulas bien... —sugiere Dylan.

—Atuar en una oba de trato — lo dice tan despacio que solo yo pude oírlo y comienzo a reírme porque ya lo entendí. Ivy y Cameron van a querer matarlo.

—Esto sí que va a ser bueno de ver — digo.

—Jake, será mejor...

—¡Actuar en una obra de teatro! — grita interrumpiendo a Emma.

Todos lo miran a él y yo estoy muy atenta a las reacciones de los más ácidos del grupo. ¡Me encanta! Primero, sus caras son de no entender nada; luego caen en lo que dijo y sus caras son de: "¿Qué mierda?" y, por último, sus caras son de "NO, ni muertos hacemos eso".

—Ni muerto hago eso—Cameron ya está haciendo su berrinche.

—Acordamos que cumpliríamos nuestros sueños — callo a Ivy antes de que diga algo —, juntos.

—Genial, ¿cuáles son los tuyos? Seguro que disfrazarnos de unicornio y mientras tiramos brillantina.

—En realidad, de Tiker Bell mientras tiramos polvillo de hadas — digo y ella me fulmina con la mirada — es chiste, es chiste — digo riendo y tomo mi hoja. La leo antes de decírselos.

Sueños por cumplir:

Conocer la playa y ver el amanecer en ella.

Ir a un museo de arte.

Gritar sin que nadie me vea.

Comer la hamburguesa más grande del mundo.

Ver todas las estrellas (sin contaminación lumínica).

Escribir una carta y dejarla en el hospital.

—Bueno, es bastante simple — dice Cameron cuando termino de leerla.

—Vaya, gracias.

—Estoy ansiosa — dice Emma — ¿Cuándo comenzamos?



#3117 en Novela romántica

En el texto hay: viajes, amor, amistad

Editado: 16.09.2024

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