CAPÍTULO 9. Dejar cantar a René "All too well" de Taylor Swift debería de ser ilegal.

Thiago y René apenas se habían visto desde hace dos semanas, solamente se reunían para estudiar, pero inmediatamente después de eso, el chico se marchaba sin explicarla nada, en su parte sabía que era su culpa por que había dicho cosas que lo hirieron.

René estaba en videollamada con Enea cuando tiene que bajar para despedirse de sus padres, estos irían la ciudad de Harper a revisar las cosas, la chica quería ir con ellos, pero su padre se negó rotundamente debido a que tenía escuela. Esta se despide de beso de ambos.

—Cuídate — Le sentencia la madre, con el pesar de dejarla sola.

Esta se queda sentada en la sala un rato odiando como se sentía la soledad, pone de fondo orgullo y prejuicio, combinando perfecto con el clima húmedo de afuera, estaba preparándose para hacer galletas cuando un ruido la alarmo.

Se queda en silencio esperando que haya sido su mal juicio, más sin embargo vuelve a escuchar pasos. Esta detiene todo, llevando por uno de los palos de Hockey de su hermano, lo toma con fuerza subiendo las escaleras, para abrir la puerta de su cuarto con cuidado viendo un hombre de espaldas que trata de esconderse, esta estuvo a punto de darle con el palo sin embargo reconoció el pelo naranja.

—¿Qué demonios te pasa? — Le dice notando como este tenía sangre en su labio, pero este se acerca tapándole la boca con miedo de ser descubierto por los padres de ella. Sentía su mano mojada, y lo morado de los golpes, con cuidado aparta la mano —. Estoy sola en mi casa… ¿Qué te paso?

—Perdón, no tuve a donde ir — Esta lo toma del rostro mirando que debajo de su ceja tenía golpes, sin duda le habían hecho mucho daño —. ¿Dónde están tus papás?

—Fueron con Harper, estarán fuera de la ciudad una semana.

—Fue mala idea, perdón — Ella lo detiene de la mano, sosteniéndosela con fuerza.

—Ven abajo — Esta sin siquiera soltarlo, camina con él a la cocina, dándose cuenta del desastre que tenía en su cocina. Debajo del lavaplatos tenía el botiquín de emergencia, esta se abre paso en su desastre para empezar a desglosar las cosas.

Se acerca tomando su rostro limpiando con una gasa la sangre, este sentía dolor.

—¿Quieres contarme que paso?

—Yo no sé de mi papá hace muchos años, y ahora busca tener contacto conmigo como si nada y mi madre dijo que debería de darle una oportunidad — Este siente un dolor al hablar —. Yo grite, y mi padrastro no lo permitió, así que resulto en esto.

René no se atrevió a decir algo, mientras que le pone un curita en el rostro.

—Puta madre… Fue mi culpa.

—No, no lo fue. El decide como actuar, como afrontar las cosas. Tu no pediste ser lastimado — Los ojos de Thiago comenzaron a ponerse rojos, no sabía si era por el dolor o porque, pero sentía sus ojos acuosos —. Mi papá también tiende perder el control de sí mismo, pero jamás me atreveré a justificar la violencia que vivimos.

—¿Te ha hecho algo?

—Creo que en los hogares es más común de lo que parece — Una luz reluce en toda la habitación para después un ruido ensordecedor que la termina asustando pues toma con demasiada fuerza las manos de Thiago.

—¿Le tienes miedo a los truenos? — Ella asiente soltando a Thiago. Decide rejuntar un poco las cosas creando un ambiente incomodo entre ambos —. Hable con Dome.

Esta se voltea interesada en lo que dice.

—Ella no me platico de lo que hablaron, ¿Podrías hacerlo tu?

—No fue nada, solo una estupidez de chicas — Se ríe pasándose la mano por el cabello.

—Y si solo es una estupidez de chicas ¿Por qué en este momento no eres capaz de mirarme a los ojos? — Este se levanta acorralándola contra el refrigerador.

—Me dijo que tú y ella estaban saliendo antes y que me habías usado como una excusa para dejarla. Que no soy más que una chica más en tu lista — Este levanta su cara mirando los ojos de él —. Se que esto solo es un trato, pero enserio odio todo lo que tiene que ver contigo.

Thiago sintió como si un puñal le atravesará el pecho al escuchar las palabras de René eliminando cualquier oportunidad de que su trato se convierta en algo real, después de todo ella jamás le iba a poder perdonar lo cretino que fue en el pasado.

—Dome y yo éramos cercanos, es poco éramos íntimos, pero nunca fue nada serio. Hubo un tiempo en el que pensé que podía haber algo más entre nosotros, pero eventualmente me di cuenta de que nuestras personalidades simplemente no encajaban — Explica este buscando las palabras —. Yo… no sabía cómo terminarlo de una manera correcta y cometí el error de alejarme sin darle una explicación clara.

—¿Entonces fui la excusa perfecta?

Este asiente con la cabeza, tratando de tomar las manos de René, pero ella sentía una mezcla de ira y dolor en su interior. No quería escuchar más excusas, ella había iniciado el juego, pero no entendía las reglas.

—Yo hablare con ella.

—Lo que sea que haya entre tú y Dome no me importa. Mi único interés es que el acuerdo funcione.

Enea tenía razón al decirle a esta que tuviera cuidado o saldría herida. Este estornuda, dándose cuenta de que estaba empapado de agua.