Capítulo 1

No tengo ni idea de qué hora es, cuando estoy de vacaciones tengo 0 intenciones de configurar la alarma para empezar el día, aunque no hay mucho que empezar si te acuestas a las 9:00 AM, por una vez me despierto tranquila, hay bastante silencio en la casa asique deduzco que estoy sola. Finalicé la secundaria hace pocos días y se podría decir que comencé mi periodo de relax, aunque este periodo no tiene nada de relajante, en vez de ponerme a perder el tiempo se supone que tengo que ponerme a investigar sobre universidades, casas de alojamiento para estudiantes, becas, etc. Claramente mi búsqueda no me está llevando a nada, esto se debe a que es un poco difícil elegir una universidad cuando no sabes qué carajo hacer con tu vida.

Me levanto para prepararme algo de comer, mi rutina es bastante básica la verdad, se basa en dormir, comer, existir, quedarme despierta y finalmente repetir todo eso otra vez. Voy a la cocina y que sorpresa, no hay nada, voy a buscar mi teléfono para averiguar dónde está mi señora madre y para saber si puede conseguir algo abierto y traerme comida.

SMS: ¿Dónde estás? ¿Crees poder conseguir algo abierto para traerme lo que va a ser mi desayuno-almuerzo-merienda?

No responde, no es usual en ella, pasa cada minuto con el celular en la mano asique se creería que me respondería en segundos. Espere por lo que fue una hora y todavía nada, en el transcurso de esa hora le marqué tres veces, todas me mandaron al buzón de voz. Ya no falta mucho para que abra el negocio de aquí a la vuelta, me doy una larga ducha para que el tiempo pase más rápido, me cambio, agarro mi billetera y salgo para el negocio. Cuando salgo afuera, quedo un poco desconcertada, en un día normal, a la hora que es y en la época del año en la que estamos, usualmente las calles están llenas de gente caminando y más considerando que esto es una zona céntrica. No le doy mucha importancia y sigo caminando hacia el negocio, cuando llego, me encuentro con las puertas abiertas, lo que tomo como que ya están atendiendo en el negocio, entro y me quedo en plan "¿Esta gente está loca o qué?" literalmente el lugar está vacío, esperé unos minutos a que alguien saliera y me atendiera pero eso nunca pasó, agarré lo que necesitaba, sumé el precio de las cosas en la calculadora del mostrador, dejé la plata abajo de la calculadora y me fui esperando que no me persiguieran los dueños creyendo que les robé.

Al llegar a mi casa encuentro una carta arriba de la mesa que sin dudas no estaba ahí cuando salí.

-Vaya, es un poco tarde para recibir mi carta de Hogwarts- digo en voz alta hasta que me doy cuenta de la enorme estupidez que acabo de hacer, esta carta no estaba acá y el auto de mi madre no estaba en la entrada cuando llegué asique si no fue ella y no fui yo, claramente hay alguien en la casa.

Agarro unas tijeras del cajón tratando de hacer el menor ruido posible y como me enseñó Chicago P.D, me pongo a registrar la casa, comedor, cocina, habitaciones, baño y finalmente el patio. No hay nadie, todavía con la tijera en mano vuelvo al comedor para abrir esa pequeña carta.

"Seguramente ya te habrás dado cuenta de que algo raro está pasando, si quieres averiguar donde están todos dirígete a la dirección que esta al final de esta carta"

-Black.

Ninguna obra de arte le haría justicia a la cara que tengo en este momento, no sé quien se cree este imbécil, pero si piensa que voy a ir a ese lugar solo porque lo misterioso que sonó llamó mi atención, tiene razón, o sea, lo más divertido de mi día iba a ser ver una película, pero sin dudas esta carta le gana a ese plan.