Capítulo 2

Después de casi cinco horas, por fin pude encontrar el lugar, como el auto no estaba, tuve que ir caminando, y si a eso le  sumamos mi pésimo sentido de la orientación, pues, el resultado solo podría ser una caminata que me dejo las piernas adoloridas. Camino hacia la entrada, con paso decidido, si vas a presentarte a un lugar desconocido porque una persona sospechosa te dijo que vayas, será mejor que vayas con la cabeza en alto y camines con toda la seguridad del mundo.

La fachada del edificio es de un color gris ceniza lo que podría dar mala espina a cualquiera pero a mí, en particular, me gusta mucho ese color, al entrar, lo primero que se ve es un pasillo largo de hermosas columnas romanas de estilo toscano, el final del pasillo se abre hacia una sala que aparte de tener una enorme pantalla empotrada, no tiene ningún otro elemento. En la pared del frente, hay dos puertas, una a cada lado de la pantalla, en la pared a mi izquierda hay otra puerta y a mi derecha hay una última puerta. El interior es completamente opuesto a la fachada del exterior, puesto que las paredes interiores, las puertas y las columnas son de un color blanco opaco. Justo en el momento en el momento en que iba a acercarme a la pantalla, la misma puerta por la que ingresé se abrió.

Cuando me giré para ver quien había ingresado, vi que eran un chico y una chica, tal vez de la misma edad que yo o incluso un poco mayores, cuando escuche la puerta abrirse pensé que quizá era la persona que me había citado en este lugar, pero cuando vi que eran dos personas asumí que no podría tratarse de "Black". Cuando terminaron de caminar por el pasillo y llegaron hacia donde yo estaba, ambos se me quedaron viendo, un rato después, la chica aparto la mirada y siguió inspeccionando el lugar, mientras que el chico, por su parte, no apartaba la mirada.

- Eh, hola... - le digo un poco incomoda porque no deja de mirarme.

- Hola, disculpa - se dirige a mí la chica - ¿Tu eres la persona que nos dijo que iba a explicarnos que estaba pasando?

- No, lo siento, yo vine porque un tal "Black" me dijo que si quería saber que pasaba debía venir aquí.

- ¿Tienes la carta? - ahora es el chico quien me está preguntando.

Saco la carta de mi mochila y se las enseño, la chica me tiene una carta que es idéntica a la mía. Ambos abrimos la carta del otro y comprendemos que ambas cartas dicen casi lo mismo, la única diferencia es que la mía se refiere a una persona y la de ellos, como son dos, se refiere a dos personas.

- Perdona si fui muy brusca, no me parecía buena idea venir aquí pero mi hermano insistió asique estaba un poco tensa por no saber que me esperaba. - dice la chica tendiéndome la mano - me llamo Mía y este es mi hermano Aarón, es un gusto.

-Yo me llamo Lucia, es un placer. - le respondo mientras le tomo la mano para saludarla.

La puerta se abre nuevamente y esta vez, quien ingresa, es un chico, otra vez creímos que se trataba de "Black" pero resulto ser un chico llamado Sky quien había llegado aquí por la misma razón que nosotros, en la siguiente hora la puerta se abrió cuatro veces mas, la primera vez ingresaron dos mellizos de nombre Nathan y Erika, la segunda vez ingresaron otro par de hermanos llamados Megan y Julián, la tercera una chica llamada Lola y la cuarta vez, un chico llamado Peter. Todos tenían en sus manos la misma carta, escrita por la misma persona. Esperamos otra hora mirando hacia la puerta por la que ingresamos, nos sentíamos a salvo puesto que éramos muchas personas, estábamos pensando en irnos cuando una de las puertas que se encontraba a los lados de la pantalla se abrió y de ahí salieron dos personas, un hombre con un semblante serio que le hacía aparentar más edad de la que probablemente tenia y una chica que parecía amable a simple vista.

- Ya todos están aquí - el hombre fue el primero en romper el silencio - asique supongo que ya podemos empezar.