CAPÍTULO 21

Llevaba puesto un vestido color negro con brillos que la daba el toque que tanto deseaba, era largo y tenía una abertura en la pierna, eso había sido lo que más me había fascinado del vestido, era algo escotado así que dejaba ver mis pechos pero no de una forma descarada, hice mi cabello un moño dejando unos mechones sueltos y mi maquillaje me hacía ver más adulta, pero no exagerado, eso se lo debía a adelina ya que yo no sabia maquillarme salvo con lo básico, y tampoco me gustaba.

Me di un repaso en el espejo que estaba en habitación y tenía los labios rosados, mi piel demasiado blanca y mis ojos azules tenían ese brillo de malicia.

Diego y dylan se habían ido hace casi una hora en el carro de dickson para recorrer el lugar y familiarizarse con este según ellos, teníamos el plan memorizado y ya cada quien sabía lo que tenía que hacer una vez que llegara, dylan nos dio un arma a cada uno por si el plan A fallaba recurrir al plan B.

La verdad esperaba no tener que recurrir al plan B, de ser así todo sería disparo y sangre, eso sin contar el escándalo que se formaría después, Derek estará muy protegido y eso nadie lo ponía en duda, por lo tanto teníamos que ser cuidadosos en que nadie se diera cuenta que sus tres hijos estarían presentes.

Ahora imagínate correr y matar con unos tacones tan altos como los que llevaba puestos.

Alguien tocó la puerta despacio y después entró dickson el cual me miró estupefacto.

_Joder...

Di una vuelta feliz como una niña pequeña en navidad para que dickson pudiera apreciar el vestido.

La verdad es que a mi me gustaba, había quedado enamorada de este desde que lo había visto.

_Lo tomaré como un cumplido _fui hasta la cama para ponerme mi collar.

_Te vez.... Dios.. te vez..

_¿Me veo?

_Preciosa _suspiro pasando una mano por su cara _estas preciosa.

Di la vuelta para verlo.

_Gracias dickson.

Me senté en la cama al lado de la máscara negra la cual usaría en la fiesta y dickson hizo lo mismo.

_Vine porque quize hablar contigo antes de que te vayas, quiero aprovechar que no tienes a david encima como casi siempre.

No me gustó el tono de voz que había usado.

_¿Es sobre lo que hablamos la ultima vez? _no tenía que responder lo que yo ya sabía, me estaba mirando pero yo a el no, mi atención la tenía la máscara que llevaba entre mis dedos.

_Si, me doy cuenta que hay cosas que estas aceptando, de ser así tu decides si quieres irte o no conmigo.. Tu decides abby.

Quizás eran idea mías, pero sentía como si me estuviera presionando, fuera de esta conversación también tuve otras con dickson una vez que me dijo su plan, me dejaba mensajes o me llamaba, incluso se cruzaba conmigo en la universidad y pasaba más tiempo en cada los danger, mas que su propio hermano.

_¿Contigo?

_Conmigo abby _asintió con detenimiento _Te ofrecí una nueva vida porque te la mereces, y porque yo también quería comenzar de nuevo.

Claro, a quien no le gustaría crear un arcoíris propio después de solo ver tantas tormentas. Pero dickson buscaba paz en la persona incorrecta.

_Dickson, no tengo nada de especial para que tu quieras comenzar una nueva vida conmigo. Solo.. mira todo el desarrollo en que estoy metida.

Apretó sus labios con fuerza sin saber que decirme, lo pensó unos segundos y en su rostro se podía ver como estaba debatiendo consigo mismo, sacudió la cabeza y después suspiro, dándose por vencido.

_Abby _me llamo después de un largo silencio _estoy cuidando de ti desde hace dos años, se muchas cosas de tu vida, y de más pocas personas que te rodean.

Lleve mi mirada tan rápido hacia el que sentí como mi cuello dolió por la brusquedad.

_¿Que?

Suspiro.

_Estuve allí cuando te graduaste del instituto _miro hacia el suelo _en cada fiesta que ibas obligada por el castaño, las veces que se quedaba a dormir en tu casa lo cual sucedía casi siempre.

Lo último lo había dicho con tanto desagrado hacia axel. Todos, todos me estaban hartando con sus malas caras en referencia a axel verin.

Pero tenía otro problema.. quizás este no era un problema pero si una nueva duda que está sembrando.

Cada danger iba a apaciguar todas mis dudas muy pronto, aunque eso me deje  una mala pasada o experiencia, ya no importaba correr el riesgo, pero ahora debía encargarme de saber porque dickson me estaba confesando esto y que lo llevo a hacerlo, sobre todo porque tanta insistencia.

Me estaba hartando.

Era la desconfianza que me perseguía lo que me hacía dudar de sus buenas intenciones.

_Eso... eso es imposible. ¡Yo te hubiera visto! ¡Lo hubiera sabido!

_Quizás no estuve en todo momento contigo porque esa no era mi ciudad, solo iba de visita o en tus momentos especiales, como tu graduación... entiendeme abby.

_Nadie fue a mi graduación dickson, solo fue axel _le hable con desagrado _no quieras meterme ideas equivocadas en la cabeza para aprovecharte de eso.

_Yo también fui abby _apretó su mandíbula _Vi lo triste que estabas y como te saliste de la fiesta porque según tu te sentías mal, pero en vez de eso llegaste a tu cuarto a llorar. Yo estuve contigo Abigail, nunca estuviste sola.

Que turbio.

Fruncí mi ceño con mucha rabia viéndolo, lo apunté con mi dedo hasta dar toque en su pecho.

_¿Y quien eres, dickson meeser? ¿Que carajos quieres?

Se levantó aún con mi dedo tocándolo y sin apartar su mirada de mi. Solo que el me veía con dolor y nostalgia.

No parpadeo, apretó su mandíbula y sus ojos se oscurecieron un poco.

_El hombre que está enamorado de ti desde que tenías diecisiete años, el hombre que.. a su manera.. te cuido y te protegió.

Le lance una bofetada con todas mi fuerzas y dickson ni siquiera se movió de su lugar.

_¡Eres un malnacido! _golpee sus pecho con mis palmas y llena de rabia, o quizás de dolor _¡No me cuidaste! ¡Solo me viste ser infeliz!