Capítulo 7

Parece han cambiado muchas cosas desde la última vez que salí con Archer.

Lo más importante es que alguien compartió mi Instagram y ahora todos saben quién soy, sus locas fans me mandan amenazas e insultos llamándome de mil maneras nada agradables ya que no me consideraban merecedora del su ídolo.

Ahora soy la gran conocida frijolera interesada, porque por ser mexicana soy un puta que utiliza a Archer por su dinero y visa.

Quien diría que el domingo tuvimos un excelente día con panqueques y helado, en contraste hoy un martes por la mañana me despierto con estos lindos mensajes y una gran masa de paparazis en la entrada de mi residencia que me impiden ir a clases.

¡Y hoy necesito entregar mi proyecto!

Me paseteo en la recepción de un lado a otro mordiéndome las uñas pensando cómo salir de esta.

¿No podían hacerlo ayer?

Aghhhh. Odio mi maldita mala suerte.

Solo tengo veinte minutos para llegar a mi clase.

Los maldigo paparazis.

Tomo una profunda respiración para darme valor antes de salir de la residencia con un intento de cara neutral para intentar ocultar mi mal humor.

Siento pares de brazos jalándome, intentando llamar mi atención a los cuales ignoro.

Trato de pasar entre ellos, pero me lo impiden devolviéndome a mi lugar, ahora estoy en el centro rodeada de cámaras y reporteros pidiéndome que conteste sus preguntas.

Ya hasta me dio dolor de cabeza con todos sus gritos y flashes.

-Por favor déjenme ir a mi clase. Realmente necesito entregar un trabajo – les digo casi rogándoles.

Me ignoran olímpicamente - ¿Es cierto que usted es novia de Kallias, el pianista de la banda Dark Instincts?

- ¿Solo sales con él por su dinero?

- ¿Qué te parecen esos rumores de que…?

- ¿Por ti terminaron Kallias y Melissa?

¿Archer tiene novia? Esquiusmi.

-No soy novia de Ar… Kallias, soy solo su amiga. Ahora déjenme ir a mi clase.

Me cansé de ser educada, ahora soy yo la que da los empujones logrando salir de la bola de retrasadores de clases. Sin permitir que me sigan salgo corriendo con todas mis fuerzas tratando de llegar a mi edificio.

Llegué justo a las nueve a mi clase. Toda sudada y sin ganas de vivir, pero llegué.

Agradecida con el de arriba.

Todos mis lindos compañeritos me están mirando. Chismosos.

Que incomodo…

Una ganas de decirles “Que me ven” entran en mí, pero elimino rápidamente el pensamiento.

Lo único que hicimos en la clase fue entregar el trabajo e irnos. En resumidas, nos corrió el maestro.

Trato de largarme, pero una chica con la que comparto esa clase se atraviesa en mi camino a la felicidad. Que no ve que tengo hambre.

-Hola… Se que casi no hablamos, me preguntaba si le podías dar este regalo a Kallias, es que soy muy fan de él y te lo agradecería mucho – dice tímidamente una rubia que creo se llama Kara.

¡Mierda! Me dio ternura, ya que. Lo haré.

-Mmm. ¿No te importa que lo vea hasta el domingo lo más probable? – pregunto sin estar segura de esto.

No puedo decirle que no. Y pues solo es entregárselo a Archer.

-No importa – contesta emocionada.

-Bueno…

Me da una gran caja de cartón con fotos de en el en ella. Que caja tan sexi.

Pero ahora como voy a llevar esto en todas mis clases.

En la próxima clase me había encontrado a una sorprendida Kir por el penoso aspecto que tenía, ambas tirábamos mierda entre nosotras a los reporteros metiches que nos traían harta. Un poco más y se iba a agarrar a putazos con los reporteros. Realmente me había alegrado chismosear con ella.

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Tres malditas clases tuve que aguantar para ya ser libre. Tengo que hacer un proyecto con Kir en clase de planeación y gestión financiera. Es nuestro ultima cosa que hacer en esa clase antes de salir de vacaciones y por las demás clases son exámenes restantes.

 -Te van a tener de recadera para darle regalos a Archer. Ahora que vieron que los aceptas te van a tener de estúpida – dice Kir divertida mientras maneja hacia su casa.

-No creo.

Hola, dios. Soy yo de nuevo…

Kir se rie al ver mi cara preocupada.

-¿Crees que no lo hicieron conmigo en primer año? Me dejan regalos para Elijah afuera de mi habitación. Después ya no hay vuelta atrás hasta que digas que no. Y considerando tu corazoncito sin poder decir que no, ya te jodiste.

-Si se decir que no – afirmo siendo una mentirosa total.

Se parte de la risa – Barbara te pidió un trabajo después de que se enfermara y se lo diste porque no sabes decir que no.

Es cierto, me trato de hacer la maldita, sin embargo, no puedo. Soy una estúpida.

-Es que se había roto la mano. No podía ser tan maldita.

-Cambiando de tema. ¿Sabes algo de ella?

Ahora pensándolo, no he visto a Barbara desde la pelea en la cafetería. Ni siquiera ha ido a las clases que comparte con nosotras. Jackson es violento, pero nunca con ella, o al menos que yo sepa. Siempre estuvo muy obsesionado con ella como para hacerle algo.

-No la he visto. Quizá se fue con Jackson.

-Estoy preocupada por ella.

Su rostro se contrae en una mueca de preocupación. Se empieza a morder los labios tratando de relajarse. Es un gesto típico que ella hace, siempre se sangra los labios por ello-

-No te muerdas, Kir.

-Perdón – dice instantáneamente dejandose de morder.

-No te disculpes, te digo porque luego se te inflama el labio y necesitas hielo.

Que hipócrita soy. Yo me sangro la cutícula de mis dedos por la ansiedad.

-Cierto. ¿Podemos ir a verla a su residencia?

Noto a Kirsten muy tensa y ansiosa con este tema. No es normal este estado en ella.

-Claro que podemos, pero… ¿Por qué estas tan intranquila?

-No es nada.

Pretendía seguir preguntando, pero sé que no quiere hablar de ello y pienso respetar su decisión. Ninguna vuelve a hablar en el trayecto, trato de entender su actitud y un horrible pensamiento que me da nauseas conquista todos mis pensamientos, olvidándome de Archer, trabajo y escuela. Solo puedo pensar si mi Kirsten fue… golpeada por Jackson.