Capitulo 16

Linda

—¿Felipe?—digo cuando veo al chico familiar que me saluda desde la distancia. Corto la llamada con Edward,  y me acerco hacia él. 

Luce demasiado diferente a la última vez que lo vi. Ha cortado su cabello y no luce esa vestimenta tan relajada con la que lo conoci. Tiene un pantalón negro ajustado, parecido a los que usa Edward, y una camisa mangas cortas. Sé ve muy bien a decir verdad. Él me recibe con un cálido abrazo que me deja un tanto sorprendida, pero aún así me alegra verlo. Es bueno ver a gente conocida, además de Todd y Bea, no conozco a nadie aquí. 

—¿Estudias aquí?—decimos al unisono a lo que ambos reímos. 

—Si—volvemos adecir al mismo tiempo, a lo que esta vez reventamos en una carcajada. Por ultimo, Felipe hace un gesto con su mano para darme la palabra y sonrio mientras asiento. 

—¡No puedo creerlo! ¿Que estudias?—pregunto con interes. 

—Leyes—dice como si nada y luego se rie cuando ve la cara que puse. 

—¡¿Que?! ¿Como es posible que note haya visto?—pregunto. Él sonrie y agacha algo avergonzado la cabeza mientras se toca el lobulo de su oreja que tiene una pequeña expansion. 

—Digamos que llegue tarde y tuve que sentarme al fondo...nunca te habria imaginado en la escuela de leyes—admite agachando la cabeza y esta vez yo soy la que rie. Me encojo de hombros y miro hacia otra direccion donde a lo lejos diviso a Bea. Alzo mi brazo para darle que me vea y Felipe voltea a ver. 

—En realidad, la que deberia sorprenderse de verte aqui soy yo...pensé que te dedicarias a la musica o algo asi—le digo. Él rie bajo, niega alzando la vista y clava sus ojos cafes en los mios. 

—Mi padre me mataria—dice serio pero luego vuelve a sonreir. Niego con la cabeza sonriendo y en eso Bea llega a nuestro lado. 

No paso por alto como mi amiga escanea a Felipe de pies a cabeza y se sonroja cuando él le sonrie. Los presento como es debido y Bea se emociona sin poder ocultarlo, cuando Felipe le dice que es nuestro compañero. Le cuento a mi amiga como fue que nos conocimos y nos quedamos varios minutos hablando los tres. Tal y como me sucedio a mi, Felipe atrajo a Bea en una burbuja agradable y de confianza, con la diferencia que a mi amiga le llegó de una manera diferente a la mia. Luego me burlaria de ella, es claro que ahi hubo una atraccion, no se si me atrevo a decir que fue mutuo, pero supongo que todo es cuestion de tiempo. Ahora que lo pienso, Bea es la unica de nosotros que está sola, y si mi mision es juntarla con Felipe, entonces eso haré. Se verian muy lindos juntos. 

En fin, dejo esta fantasia loca en mi cabeza de lado y me despido de los dos. Ellos se despiden y permanecen hablando mientras me alejo. Quizas, no sea falta mi ayuda. Saco las llaves de mi bolso y aprieto el boton para desactivar la alarma y subirme. Muero de hambre y aun me queda poco mas de una hora de clases. El primer dia no fue distinto a otro cualquier primero dia de clases que haya vivido, me recordó a mi primer dia en el instituto cuando conoci a Bea, con la diferencia que ahora no estaba sola y ambas nos tenemos la una a la otra. Es simplemente genial. Pese a todo eso, me agradó muchisimo. Recorrimos el campus y nos instalamos una hora en la biblioteca antes de empezar las clases, todo era tal y como siempre imagine. Recordaba algunas cosas de cuando era niña y acompañaba a mi padre a dar clases, pero ahora todo es distinto. Me gustaria dar clases aqui algun dia, tal y como Karin lo hace. 

Lo mejor de todo esto, es que casi ni he pensado en la anciana del muelle. Y ahora que la recuerdo, sus palabras ya no me atormentan tanto. ¿Por que deberia creerle? 

Llego a la casa de mi padre alrededor de las dos de la tarde. Estaciono el auto y al abrir la puerta Molly es quien me recibe primero. Aun esta con su uniforme escolar y algo me dice que no hace mucho que caba de llegar. Karin está en la cocina y veo la mesa puesta para almorzar. Decido dejar mis cosas en el sillon para ayudarla, y ella me recibe con un tierno y amoroso abrazo cuando me ve. Me pregunta sobre mi dia y le cuento todo mientras la ayuda a preparar la ensalada. Ella me escucha atenta y con una gran sonrisa. Me gustaria que mi madre estuviera aqui para contarle sobre mi primer dia, pero supongo que aun me esperan tres meses para verla nuevamente, sin embargo, me recuerdo mentalmente llamarla mas tarde para contarle, por el contrario se moelstará y empezará a especular que prefiero a Karin. Tipico celos de madre. 

—¿Has hablado con Edward?—me pregunta cuando las tres nos sentamos en la mesa. Mi padre llamó para avisar que no llegaria almorzar y que lo esperemos para la cena. 

—Si—digo luego de darle el primer bocado a la carne—Lo llamé cuando sali de clases—digo y tomo algo de jugo bajo la mirada curiosa de Molly. Le guiño un ojo a lo que la niña sonrie y continua comiendo. 

—Yo tambien lo llamé, no hace mucho...estaba algo...molesto parece—dice y dejo de comer para mirarla. —...pero supongo que es normal, sabes que él aun no se acostumbra a mi...—asiento estando medianamente de acuerdo. 

—Seguro lo atrapaste en su momento de idiotez—digo a lo que Molly rie—...¿Y a ti como te fue hoy?—le pregunto a la niña. Ella deja los cubiertos de lado y comienza a parlotear como siempre.