Capitulo 7

Capítulo 7. La verdad de los Vikram. 

JADE.

 Ellie se apresura al refrigerador de donde saca cuatro cervezas y las pone en el mesón, Aren suspira y toma una, se ve tenso, su novia se apresura a su lado y también toma una, Ellie me hace una seña invitandome a sentarme con ellos, dudando un poco me acerco y me siento al lado de ella. Miro con indecisión la bebida enfrente de mi, la última vez que tomé una se me inflamaron los labios y me salieron muchas ronchas en los brazos y piernas. 

— Anda Jade, dale un sorbo. No me digas que eres una mojigata que le tiene miedo al alcohol.—me molesta la chica Vikram. 

— No es eso, es que creo que soy alérgica.-le hago saber. 

— Oh, te traeré jugo entonces.—exclama poniéndose de pie y yendo nuevamente al refrigerador.

 Suspiro pasando mi mano por mi cabello, quiero y necesito irme ya. La situación sigue siendo muy incomoda, puedo sentir la mala vibra que me lanza Tamara, puedo sentir la tension en Aren y sus ojos grises mirándome de vez en cuando. 

Mis ojos se van directo a él cuando pienso en su nombre y justo lo atrapo mirandome, trago saliva sintiendo mi respiracion cortarse. 

No es normal, no es normal lo que provoca en mi. Anteriormente me han gustado muchos chicos, incluso llegué a sentir cosas mas allá de la atracción por alguno de ellos pero jamas ninguno me hizo querer saltar sobre el, decirle lo que siento y refugiarme en sus brazos. El me mira y me mira como si supiera exactamente lo que me está pasando pero se abstiene de acercarse a mi y lo comprendo, tiene una prometida hermosa que lo mira con amor todo el tiempo, justo como él la mira a ella. 

— ¿Jade?.

 Me sobresalto al escuchar la voz de Ellie llamándome, volteo a verla cortando la conexión de mis ojos con los de su hermano y ella me mira alzando una ceja.

 — ¿Qué?.—pregunto desorientada, ella me mira incrédula.

 — Te he preguntado si quieres jugo de naranja o de manzana.

 Me levanto del taburete lentamente. 

— Eh, yo... Creo que debo irme, ya es muy tarde y mi madre se enojará conmigo si no llego a mi hora. 

Aren y Tamara me miran en silencio mientras yo me apresuro a tomar mi mochila para colgarla en mi espalda. 

— ¿Qué? ¡no! ¡vamos Jade!. Trabajamos sin parar durante tres horas, merecemos un descansito mientras tomamos algo refrescante, anda. Di que si, quedate un rato mas.

 Niego con la cabeza y la miro apenada, ella mira a su hermano quien mira su lata de cerveza como si fuera lo mas interesante en el planeta. 

— Aren dile que se quede. 

El rubio alza la mirada y la fija en mi, lo miro rogándole que simplemente la ignore para asi poder irme a mi casa pero él me regala una hermosa sonrisa ladina. 

— Quedate un rato más, por favor. Ellie no tiene muchas amigas, eres la primera chica a la que parece no odiar, esa es una buena señal. 

Tamara le lanza una mirada incrédula y su hermana le sonríe agradecida. Los miro a todos y no puedo soportar la mirada envenenada de la morena. Suspiro haciendo una mueca y niego. 

— Lo siento, me tengo que ir.—susurro—. Nos vemos el lunes. 

Me marcho antes de que puedan protestar, no soporto estar en un lugar donde me siento incomoda, mal vista e indeseada. 

~~♦~~ 

El parque luce lleno de vida, el pasto luce tan verde a pesar del frio, los niños corretean de un lado a otro y algunos juegan como siempre. Tomo asiento en una banca y respiro hondo, este dia ha sido una montaña rusa que me ha dejado sin saber como sentirme. 

— Hola, Jade. Volteo hacia la izquierda solo para encontrarme a Finn Trainer sentándose a mi lado en la banca.

 — Hola.—le sonrio de lado. 

— Llevas un mes evitándome, ¿sabes? Al principio me ofendió pero luego pensé; "nadie te evita solo porque si, debe haber una razón por la que esa linda chica huya de ti como si fueras una peste sin cura".—comenta mirando a los niños jugar frente a nosotros—. ¿Los Vikram te ordenaron alejarte de mi?. 

— No, claro que no, de hecho los he estado evitando a ellos también.

 Aparto la mirada avergonzada cuando él me mira intrigado.

 — ¿Por qué?.

 — Al princio fue porque una chica rara de la universidad me metió ideas estúpidas acerca de todos ustedes perteneciendo a sectas satanicas, luego mamá me hizo ver lo estupida que fui al creerle. Pero después decidí tomar distancia de ustedes porque parecen estar divididos y tener problemas constantemente entre ustedes. Lo siento, solo... era muy pronto para meterme en problemas. 

Volteo a verlo, Finn me mira con diversión haciendo mis mejillas sonrojar de la vergüenza. 

— Admito que en lo último tienes razón, vivimos peleando con la... el grupito de los Vikram, siempre ha sido asi, pero lo primero es realmente tonto, ¡vamos! ¿sectas satánicas?.—el castaño se echa a reir a carcajadas, su risa es tan contagiosa que termino riendo con él.

 — ¡Lo sé, qué tonta soy!. Finn trata de calmarse y me mira confundido.

 — ¿Quién te dijo esa idiotez?. 

— Una chica rubia y pálida, me dijo que se llamaba...—intento recordar el nombre—. Iza... Trizabelle... ¡Tezabelle Grim!. 

La expresión de Finn se transforma en verdadera confusión.

 — Jade...—murmura. 

— ¿Qué?. 

— No hay nadie en la universidad que se llame así, creeme, conozco a todos en el edificio, no hay ninguna chica llamada así. Y estoy casi seguro de que ni siquiera hay alguien llamado así en el pueblo.

 Me quedo helada, ¿Tezabelle no existe? ¿me la he imaginado?. 

— Por Dios, estoy quedando loca. Te juro que la vi, ella me habló de las manadas, dijo que los de la manada Blue Night la molestan y ella prefiere a los de Blood Moon. 

El chico me mira serio un rato hasta que suspira.

 — Bueno... Quizás sea una loquita de las afueras del pueblo que se metió a la escuela ese día, no te preocupes. Seguramente solo quería molestarte y meterte miedo. Olvida lo que te dijo, solo son inventos, no hay sectas en Darkwood y si... nos llevamos muy mal con los Vikram pero somos buena gente. En cambio ellos son la escoria.