Capitulo 58

Capitulo 58. Vencedora.

 JADE. 

— Así que resultaste ser una vil y asquerosa bruja.—me burlo mirándola de pies a cabeza con sarcasmo—. No me sorprende para nada, admito que al principio lograste convencerme, pero desde el momento en el que sentí tu oscuridad supe que algo no iba bien contigo. Pero aún así decidí callarmelo pensando que quizás era solo algo que imaginaba debido a los celos. 

Trisha suelta una risita estúpida que no hace nada más que incrementar mi furia. 

— Lo que sea que escuchaste, puedo asegurarte de que no fue nada más que un malentendido Jade, sé que quieres encontrar cualquier defecto en mi para ponerme en mal enfrente de mi compañero, pero te recomiendo que te calmes un poco...

 — Aren no es tu compañero.—la interrumpo y rápidamente pongo la grabación que acabo de tomar en el teléfono, su cara de inocencia cambia a una sorpresa al escucharse a si misma admitiendo que todo ha sido una farsa.

 Ella toma una profunda respiración y parece aceptar que ha metido la pata. Guardo mi teléfono cuando la grabación acaba y cruzo mis brazos, ella se levanta de su escritorio y se acerca a paso lento hacia mi, mirándome con odio. 

— De acuerdo, parece que me descubriste.—murmura deteniéndose frente a mi—. Fue muy fácil engañarlos, ¿sabes?. Con el hechizo de Nastia mi olor se convirtió en un néctar para Reece, lo atrajo de inmediato, así como pasa siempre cuando los compañeros se encuentran.

 — ¿Con qué fin lo hicieron?.—me acerco a ella apretando mis manos en puños. 

Ella da un paso atrás. 

— Bueno, logramos debilitarte, estuviste tan vulnerable y patética cuando viste que el amor de tu vida estaba destinado a otra, que incluso logramos matarte.—ella suelta una risita—. Ese era el objetivo, debilitarte para que en tu transformación no pudieras defenderte. 

— Pero cometieron un grave error, ¿sabes por qué?. 

Doy un paso más hacia ella, Trisha retrocede y su sonrisa triunfante flaquea. 

— Porque volví mucho más fuerte que antes.

 Su sonrisa se borra por completo y entonces grito con todas mis fuerzas provocando una enorme onda expansiva que la lanza en el aire provocando que se estrelle contra una repisa de hierro llena de libros. 

Ella suelta un grito de dolor al sentir el duro golpe. 

Me acerco a ella nuevamente apretando la mandíbula y pateo su costado derecho haciéndola retorcerse de dolor, alzo mi mano envuelta en una esfera cristalina, puedo sentir la electricidad recorrer mi cuerpo entero; siento tanta rabia que el poder solo incrementa.

 Trisha alza la mirada y su expresión cambia a una de miedo, en el reflejo de un florero veo que mis ojos han cambiado a un color azul intenso.

 El color de la ira brilla en ellos.

 La carcajada de la perra rubia me hace voltear a verla nuevamente, ella se pone de pie con dificultad mientras se carcajea como una maldita psicópata. 

— No sabes lo mucho que disfruté mandar a alguien para masacralos a ti y a tus estúpidos amigos.—gruñe riendo—. Disfruté ver tu cara cuando él estuvo a punto de marcarme, disfruté ver tu dolor aquella noche. No sabes lo mucho que disfruto de tu dolor Jade Castleland. 

Sonrío levemente.

 — Me alegra que lo hayas disfrutado, pero ha llegado mi turno.—susurro altanera—. Voy a hacerte pagar todo lo que hiciste desde que llegaste, vas a arrepentirte de haber entrado en mi vida. 

— Tú no eres nadie.—escupe.

 — Te equivocas, otra vez. 

Extiendo mis brazos a cada lado de mi cuerpo a la vez que de éstas se empiezan a desprender rayos violetas.

 — Yo soy la hija de una diosa. 

Alzo mis manos rápidamente y dejo que mi poder salga disparado hacia ella, ella se estampa de nuevo contra el mueble de hierro pero ésta vez ella también responde y en un abrir y cerrar de ojos su poder se estampa en mi abdomen y me manda a volar lejos, mi espalda se impacta contra la ventana atravesándola y caigo sobre el suelo del pasillo con fuerza a la vez que miles de cristales caen sobre mi. Me levanto de un salto y apenas puedo esquivar un golpe de su puño que iba directo a mi mejilla. Ella se agacha e intenta hacerme caer con sus piernas pero nuevamente esquivo su ataque y respondo a sus golpes. Nunca antes en mi vida había luchado con alguien más, pero ahora es como si lo hubiera hecho desde siempre, cada golpe, cada salto, todo me sale completamente natural. Luchamos cuerpo a cuerpo durante varios minutos, ella es hábil y rápida pero aún así no se salva de algunos golpes que yo le lanzo. Un golpe en mi mejilla me saca de balance durante un segundo, ella logra derribarme y se sube encima mío para darme otro puñetazo, ésta vez en mi boca.

 Gruño por el dolor e intento esquivar sus puñetazos, pataleo y lanzo uno que otro puñetazo hacia ella pero apenas logro tocarla.

 — ¿Qué no te das cuenta mocosa de mierda?.—gruñe tomando mi mentón con sus dedos, me quejo al sentir la fuerza que ejerse sobre él—. A mi lado solo eres una bebé de pecho. 

Mi sangre hierve y siento como la energía se va acumulando en mi pecho.

 — ¿Qué crees que pase si te mato ahora mismo?.—susurra sonriendo con alegría—. Yo creo que podré tomar tu lugar a la perfección; Aren va a amarme con el paso del tiempo, me ganaré el cariño de tus amigos, me convertiré en la luna de Blood Moon y daré a luz a los herederos del Lobo Ancestral, me convertiré en la nueva señora Vikram. 

Mis dientes rechinan al escuchar sus palabras, y entonces lo que pasó en el Abismo de los Lamentos vuelve a suceder pero mucho más intenso. 

Mi cuerpo se envuelve en una luz tan fuerte que la figura de Trisha desaparece de mi vista, el suelo comienza a estremecerse y todo se vuelve un caos a mi alrededor. Mis manos caen suavemente sobre el frío piso y todo explota. 

Cierro mis ojos con fuerza mientras todo lo que me rodea explota y se destruye, el grito de Trisha es agonizante y aterrador.