De La Luz A La Oscuridad

Capítulo 1

—¡Hola Regedy! Ya estás aquí —dijo un padre al ver a su hijo acercándose.

—¡Hola papá! —respondió el hijo quien llevaba una carga a sus espaldas.

—Conseguiste mucha leña por lo que veo, eso es bueno.

—Sí, mamá ya no tenía más para cocinar y tampoco había para la fogata, así que saliendo de mi trabajo fui a buscar leña.

—Ya veo, será mejor que entremos a abrigarnos... tu mamá ya tiene casi la cena lista.

El padre y su hijo entraron a la cocina donde se encontraba su madre, el hijo acomodo toda la leña y ambos tomaron asiento.

—¡Hola mamá! —Saludo Regedy— vi que ya no había leña y aprovechando mi tiempo libre fui a buscar un poco.

—¡Hola hijo! gracias, así es ya solo nos quedaba unos pares —respondió su madre—, estaba preocupada por ti.

—¿paso algo mamá?

—Los cazadores dijeron que por la zona donde fuiste a trabajar hoy vieron un oso gigante y eso me tenía preocupada.

—Yo no vi a ningún oso mamá.

—Pensé que algo podría haberte ocurrido, pero felizmente ya estás aquí —dijo la madre aliviada—. Tienes que tener mucho cuidado por estas tierras hijo.

—Si mamá, no te preocupes.

—Escuchen familia, tengo que decirles algo —dijo el padre con preocupación en su rostro.

—¿Si padre? —preguntó Regedy.

—Por la zona donde trabajo, yo y nuestros compañeros observamos un pequeño grupo de soldados a lo lejos que estaban deambulando al parecer. Llevaban el estandarte de uno de los reinos de los hombres.

—Eso es preocupante —dijo la madre.

—¿Los vieron a ustedes?

—No, creo que no, porque estábamos a una distancia considerable y los arboles impedían que pudieran notarnos. Esto podría ser un gran problema para nuestra tribu.

—Padre ¿Crees que podrían encontrar este lugar? —pregunto Regedy.

—No estoy seguro, pero me pregunto qué hacían por esta zona, está muy alejado del reino de los hombres.

— ¿Sera que están buscando algo? —preguntó la madre.

—Seguramente —respondió el padre—. Tenemos poco tiempo viviendo en este lugar y aún no hemos juntado los recursos necesarios para trasladarnos a Bigras y si los soldados descubrieran este lugar no sé qué harían pero estaríamos obligado a irnos. El líder de la tribu ya lo sabe y mañana tendremos una reunión sobre esto.

—Eso está bien —respondió la madre.

—No quería preocuparlos pero es mejor que sepan esto y estén precavidos.

—Está bien padre —respondió Regedy—, confió en que todo estará bien.

La familia termino de cenar y pronto se fueron a dormir.

Era la medianoche y toda la tribu se encontraba durmiendo a excepción de unos hombres que vigilaban que todo ande bien por los alrededores, cuando uno de ellos observo a lo lejos en el cielo una extraña figura acercándose.

—¿Qué es eso que viene allí? ¿Parece la figura de un hombre con alas? —pregunto uno de los hombres asombrado.

Todos los hombres voltearon a ver e igualmente se sorprendieron, entonces uno de ellos fue a llamar al líder para contarle lo que estaban viendo.

—¿Qué pasa? ¿Por qué estas tocando tan fuerte a estas horas de la noche? —pregunto el líder que acababa de despertar.

—Mire allá arriba señor —respondió el hombre señalando el cielo.

El líder se quedó pensando en lo que estaba viendo, y se fue al lugar donde estaban los demás hombres para observar mejor la figura misteriosa.

—Tiene la figura de un hombre o eso creo por lo que se puede notar y además está volando... —dijo sorprendido el líder.

La figura de este hombre con alas cada vez se hacía notar más ya que parecía que se dirigiese a la zona donde se encontraban ellos. El ser se detuvo cuando llego a la tribu y se quedó observando el lugar desde el cielo para luego comenzar a descender lentamente.

—¿otro grupo de humanos? —dijo el ser con una leve sonrisa— tienen mala suerte.

— ¿Quién eres tú? —dijo intimidado el líder por la presencia del individuo— ¿y qué es lo que haces aquí?

—¿Dónde se encuentra el elfo? —preguntó el ser— se dirigía hacia este lugar.

—¿Un elfo? —respondió extrañado el líder— No hay ningún elfo por aquí, todos somos humanos.

—¿Están seguros?

—¡Ya te lo he dicho no hemos visto a ningún elfo por aquí! Los elfos viven a millas de kilómetros de este lugar ¿Qué haría uno de ellos por estos lugares? —respondió el líder mientras le invadía un mal presentimiento.

—¿Crees que puedes hablarme en esa forma? Insignificante criatura— respondió irónicamente el ser. Después ascendió unos metros y levanto su brazo izquierdo, creando una esfera de fuego en su mano.

—¿Qué piensas hacer? —pregunto temeroso el líder.

Ante el mal presentimiento que este ser causaba en los hombres, uno de ellos quiso tocar la corneta para alertar a toda su tribu pero este lo vio e inmediatamente lo ataco con la esfera de fuego. Los gritos del hombre en llamas hicieron que los otros humanos que estaban durmiendo en las chozas aledañas despertaran, Regedy fue uno de los que despertó y confundido por los gritos salió a ver qué pasaba, al salir vio la figura de este ser con alas volando y quedo impactando.

«¿Quién es él?», se preguntó Regedy.

El líder y los demás hombres atacaron al individuo, lanzaron flechas pero este logro esquivarlas todas con facilidad. —¡Mueran! —exclamo el ser. Quien lanzo una llamarada intensa de fuego por la zona en donde se encontraba también la choza de Regedy, afortunadamente para él, el fuego no logro alanzarlo pero su choza y sus padres quienes se encontraban adentro no contaron con la misma suerte. Su choza estaba envuelta en llamas, dentro de ella se escuchaban los gritos y llantos de sus padres; Regedy estremecido por lo que veía y oía quiso entrar para ayudarlos pero el abrumador fuego le impedía.

—¡No! ¡papá! ¡mamá! —exclamó Ragedy llorando y observando como el fuego consumía su hogar.



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En el texto hay: angeles, reinos, batallas

Editado: 15.07.2022

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