De La Luz A La Oscuridad

Capítulo 10

—Sí, Neor vive aquí. Veré que puedo hacer para que puedan hablar con él.

—Mujer —interrumpieron unos hombres al ver a los jóvenes entrando a la aldea  —¿Quiénes son ellos y que hacen aquí?

—Ellos me han pedido que de favor los lleve con Neor, son dos jóvenes que han perdido a su gente, parece que tienen que hablar algo seriamente con él.

—Sabes que no puede entrar nadie solo porque sí.

—Pero mira el estado que traen ambos, este joven —dijo la mujer señalando a Kael —es de la tribu del hermano de Neor, y el otro es de la tribu Benkali.

Los hombres los miraron con sospecha pero viendo el estado en que se encontraban no les pareció que eran tipos peligrosos.

—¿Qué es lo que quieren hablar con Neor? —pregunto el hombre a los jóvenes.

—Unos soldados tienen atrapado a mi gente y mis amigos, quisiera pedirle a lucio que nos ayude a liberarlos.

—¿Soldados dijiste? ¿Soldados de dónde?

—Creo que la región se llama Nalazar, es del reino de los hombres.

Los hombres soltaron una corta risa burlonamente.

—¿Por qué se ríen? —pregunto Regedy evidenciando su malestar.

—Lo siento jovenes, no me malinterpreten no me rio de lo que les sucedió. Solo que por lo que cuentas quieres que Neor vaya a luchar contra esos soldados para liberar a tus amigos. Estamos hablando de un reino, Neor no podrá hacer nada contra ellos.

—De todas formas, por favor les pido que me dejen hablar con él.

—Está bien —dijo el hombre —puede que esté en su tienda, continúen.

Al adentrarse al campamento, varios sujetos los miraban confundidos y murmuraban quienes eran, Kael los miraba con alivio y sentía una leve sensación de esperanza mientras que Regedy solo observa con curiosidad su alrededor.

—Es aquí —dijo deteniéndose la mujer. —Neor, Neor —llamo varias veces.

De la tienda salió un hombre que tenía el cabello largo y enredado que le llegaba hasta el cuello, parecía tener entre 40 a 50 años, la vestimenta que traía era similar a la de los jóvenes Kael y Regedy. Vestido con cuero, la parte superior solo cubría el tronco y en la parte baja traía una prenda del mismo material que le llegaba hasta las rodillas y en su cintura, en la parte derecha, traía un puñal colgando.

Neor vio con reojo a los jóvenes mientras la mujer les hablaba de ellos.

<<Se parece mucho a Lucio. Sí,  es su hermano>> pensaba Kael mientras lo observaba fijamente.

—Neor —dijo la mujer —estos dos jóvenes quieren hablar contigo, por lo que dicen, han sufrido un ataque y se han llevado a su gente.

—¿Cuáles son sus nombres y de donde provienen? —pregunto Neor mirandolos de pies a cabeza.

La mujer les dejo para que conversaran.

—Hola —saludaron ambos —Es usted Neor ¿cierto? ¿Hermano de Lucio de Nideri? —pregunto Kael en seguida.

—¿Lucio dijiste? —replico Neor.

—Sí, yo soy de la tribu Nideri, y él de la tribu Benkali. Vera su hermano y su gente están en problemas y necesitan su ayuda.

—¿Qué ha pasado con Lucio? — pregunto Neor con más interés.

Kael pasó a explicarle con detalle todo lo ocurrido desde  el encuentro con los soldados hasta su huida y llegada con él.

—Entiendo… que lamentable —dijo Neor suspirando y con decepcion. —¿quieres que vaya a ese lugar llamado Nalazar para rescatar a mi hermano junto a los demás? pero lo siento. No es posible.

—Pero ¡¿Por qué?!  —respondió Kael sorprendido y angustiado —Es su hermano, debe ayudarlo.

—No es hace mucho que nos asentamos en este lugar. Ha sido un largo viaje y no podemos regresar. Esa región que mencionas está muy alejada, además no podríamos hacer mucho luchando contra esos soldados, nos derrotarían y capturarían al igual que ustedes. Cuanto lo siento por mi hermano y su gente pero yo no puedo arriesgar a los míos en una misión tan peligrosa.

—¡¿Entonces dejara ahí a su hermano?! Quien sabe que más les espera. —le reclamo.

—Si ustedes pudieron escapar, entonces ellos también pueden ¿por qué no lo hicieron?

—Fue complicado para nosotros. Tienen secuestrados a los niños en otro lugar, no saben dónde. Intente convencerlo para huir pero Lucio teme por los demás. Solo usted puede ayudarnos, por favor.

—Escuchen, por el estado que traen les dejare a ustedes que puedan quedarse un par de días, Hay una tienda vacía por aquel lado —les señalo.

—¿ y qué hay de su hermano? —insistió Kael

—No. lo siento —finalizo Neor y se dio vuelta para volver a su tienda sin más.

—¡Rayos! —dijo Kael enfadado mientras apretaba sus puños por la frustración que sentía.

El rostro de Regedy evidenciaba su desilusión mientras pensaba en algo que decir.

—Creo que podemos buscar otra solución.

—¿Cómo cuál? No hay otra, nadie más nos ayudara.

Los jóvenes resignados se fueron a la tienda a descansar pues estaba atardeciendo. En la noche seguían conversando en que es lo que podrían hacer, Kael seguía pensando en insistir a Neor hasta que accediera a ayudarlos, mientras Regedy dudaba de eso por la determinación de Neor mostrada cuando los rechazo.

En la mañana siguiente Regedy se despertó más tarde de lo habitual y noto que Kael no estaba, así que salió a divisar afuera. Tenía un poco de sed así que caminaba mientras buscaba a alguien a quien pedirle que le invite agua. De pronto observo a un extraño hombre joven que estaba parado conversando con algunos niños, lo miro fijamente y llamo su atención de que era diferente a todos los hombres que conocía, pues este llevaba un traje muy distinto a los demás de la aldea, tenía una blusa holgada blanca y un pantalón, y no solo eso mientras más se acercaba notaba que además, tenía una contextura más delgada que la mayoría y el cabello largo totalmente lacio y fino, algo muy raro de ver en su gente. Pero este extraño hombre mientras hablaba se dio cuenta de que Regedy lo observaba, así que cuando su mirada se topó con la de él, lo saludo amablemente.



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En el texto hay: angeles, reinos, batallas

Editado: 15.07.2022

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