Cap. 27

♡♡Capítulo 27♡♡

El día esta tan bello, Cristian se fue a la veterinaria, no quiso que fuera, dice que tengo que descansar, decido llamar a Williams.

—Vaya, a que debemos la llamada mi querida amiga—

—No seas tonto, oye que haces, estas ocupado mi adorado amigo—

—Claro que no, que deseas, puedo cumplir todos tus deseos— dice riéndose.

—No me hagas reír, podrías venir a buscarme, para que me lleves donde las chicas—

—Con mucho gusto su majestad—

—Tonto, seguimos hablando cuando vengas— termino de decirle riéndome.


Termino la conversación, Williams es un amor, siempre salta con sus payasadas, él y Rossy son tal para cual. A lo que llega Will, decido prepararme un emparedado con jugo de naranja.


Después de todo lo que me conto Cristian anoche, casi no pude dormir y no me lo he podido sacar de la cabeza, siento culpa, fui muy tonta, el sufrio mucho y eso me hace sentir mal, yo sufri, pero a él le dio más fuerte.


Yo me la pasaba llorando la mayor parte del tiempo, cuando no lloraba era porque mis amigas trataban de distraerme, oh las clases de la Universidad,  después de dos años decidí ya no llorar más, que no valía la pena.


El ruido de una bocina me saco de mis pensamientos, me paro para ver si es Williams, observo por la ventana pero no hay nadie, me estaré volviendo loca, me alejo y mi mirada cae al suelo, hay un sobre, que será, me agacho y lo recojo. Dice para Samantha lo abro y tiene una carta.

VEO QUE NO HAS ECHO CASO A MIS ADVERTENCIA, NIÑA TRAVIESA, TE LO DIJE QUE TE ALEJES DE CRISTIAN, NO HAGAS QUE YO TE DE OTRA VISITA SORPRESA, QUE TAL VEZ NO TE VAYA A GUSTAR QUERIDA.
 

TIENES HASTA EL SIGUIENTE LUNES PARA ALEJARTE Y NO VOLVER MAS. 

EN ESPERO QUE CAPTES, PORQUE ME GUSTAN LAS CHICAS OBEDIENTES.
 

Termino de leer, Oh por dios, esto ya es demasiado, tengo que parar esto, empiezo a llorar, mis manos tiemblan con la carta, tocan la puerta. 


—Sam, ya llegue, vamos— es Will.

No le respondo, me seco las lágrimas y voy al baño me miro al espejo, mis ojos se pusieron rojo de una vez, Will me vera así, me lavo la cara, duro unos minutos, y mi celular suena, es Will,  lo tomo.


—Estoy afuera, donde estas—

—En el baño, dame un minuto—

—Está bien, no tardes, es que me acorde que tengo que hacer unas cosas, te espero— cierra.


Maldito psicópata de Arturo, está loco, no entiendo su manía de que me aleje de Cristian, pero ya vera, no me voy alejar de nuevo, no me importa las consecuencias, solo quiero estar con él.


Donde guardo la carta, piensa Sam, no la voy a botar necesito pruebas. Voy a la habitación, busco mi maleta, en unos de los pantalones con bolsillo, la guardo bien doblada, pongo el pantalón en el fondo, creo que por el momento estaría seguro, salgo y abro, esta Will parado, le doy mi mejor sonrisa.


—Eres un sirviente muy puntual— le digo riéndome, tratando que no se me note lo afectada que estoy.


—Por supuesto su majestad siempre estamos para servirle— el hace una reverencia.


—Ya deja eso y vamos—


—Te noto rara, estas bien— me dice mirándome fijamente.


—Si no te preocupes, era que estaba leyendo un libro y me hizo llorar, soy muy sensible— le digo con una sonrisa, el asiente.


En el camino Will se la ha pasado hablando, yo la verdad no le preste mucha atención, estaba en otra cosa, nose si decirles a las chicas lo de la carta, que estoy segura que se alteraran, y van a querer que se lo diga a Cristian.


—Sam llegamos, que pasa, no te reíste a ninguno de mis chiste y siempre lo haces— me mira preocupado.


—Discúlpame Will, es que tengo la cabeza en otro lado, pensando en muchas cosas, gracias por traerme—


Me bajo del vehículo, me despido de él, las cosas con Rossy van muy bien y me alegro tanto, Alex al parecer si está enamorada y eso es bueno ya no tiene en mente al idiota de John.


Me dirijo a la casa, a paso lento aun, me duele el pie pero ya no mucho como antes.


—Sam hija, como estas, tanto tiempo sin verte— es Carlos llega a mí y me abraza.


—Estoy bien, cojeando todavía, pero excelente—  le digo con una sonrisa.

—Si, supe de ese pequeño accidente, discúlpame no pude visitarte, tuve mucho trabajo, pero me alegro que estes bien, bueno, te tengo que dejar-..


—No te preocupes, gracias por todo— le doy un abrazo y se va.


Entro a la casa y no veo a nadie, donde estara Ana, subo a la habitación, y Rossy no está, donde se metió, bajo y salgo, me dirijo a la casa de Alex, cuando algo me llama la atención, es cristal y Harry están discutiendo. Me escondo y trato de que no me vean.


—Prima, prometiste que ya no estarías más con ese hombre, que paso— dice Harry molesto.


Prima?? Wow nunca me lo imagine.


—Porfavor Harry, entiéndeme, no puedo— dice Cristal a punto de llorar pero se contiene.


—Porque no puedes y no me vegas con la excusa de que lo ama o algo así, porque, no te creo—


—Tengo mis razones Harry, dijiste que no se lo dirías a nadie, espero que cumplas, porfavor—


—Ya no lo sé, ese hombre no me da buena espina, además es casado, como puedes meterte con un hombre casado— ella agacha la cabeza y la levanta de repente mirando a todos lados, yo me escondo mejor.


—Habla bajito porfavor, te prometo que terminare con eso, pero dame tiempo si, te lo pido primo, Arturo no es fácil y quiero que las cosas quede en paz— Harry se queda un rato viéndola al parecer analizando.


Lo sabía, son amantes, como ella pudo caer tan bajo, siento lastima por Sofia y ella, con ese hombre pervertido y loco.


—Esta bien, pero termina eso, no hay futuro y no quiero que sufras, te quiero mucho prima— le dice dándole un abrazo.  —Otra cosa quiero saber, porque no quieres que conquiste a Sam, ella me agrada y es linda, me gustaría intentarlo con ella— 


Como?, ella le prohibió eso, que no me conquiste, porque, si a ella le conviene, así me alejaría de Cristian y ella se quedaría con él, la verdad no entiendo nada.


—Ya te lo dije, no quiero que hagas nada con ella, no puedes—


—Pero porque, si es porque sale con el idiota de Cristian, no es problema, la conquisto y hago que se olvide del el—


—No es eso, no lo vas a entender, mejor no preguntes—


—Deberías de responderle no crees, a la familia no se le deja con la pregunta en la boca— digo saliendo de mi escondite, la cara de ellos es de asombro, me le acerco cojeando, podría asegurar que vi preocupación en Cristal, pero seguro es mi imaginación.  —Entonces, porque no quieres que Harry me "conquiste"— 


—No es de tu incumbencia Sam, mejor vete— dice Cristal, no se ve molesta, su pelo ya no es verde, tiene su color rubio.


—Eso no será posible, primero porque estoy en la propiedad de mis amigas, segundo porque ustedes estaban hablando muy alto y escuche todo, absolutamente todo— le digo.


Ninguno dice nada, veo la cara de Cristal y esta sorprendida, se puso nerviosa, se despide de Harry y se va, sin decir nada.


Decido irme, por lo menos supe que si son amantes, Harry me detiene.


—Espera, que escuchaste exactamente—


—Todo, quieres que tambien lo repita en voz alta— 


—No, por favor no digas nada, no quiero ver a mi prima sufrir, la quiero mucho sabes, yo he estado con ella mientras llora en mis hombros, no me gusta verla así— me dice, preocupado.


Me le quedo viendo por un momento, no me había dado cuenta, pero si él tiene un pequeño parecido a cristal. 


—Mira, no es de mi incumbencia si es amante de ese hombre o no, pero te voy a pedir que le digas a ella, que me deje en paz—


El asiente dándome las gracias, él me quiere ayudar, pero le digo que no, voy a la casa de Alex, entro, escucho voces por la cocina.


—Vaya, vaya, con que están aquí y no invitan-— les digo con una sonrisa.


Ellos voltean y me ven, me dan una sonrisa, me acerco a Rebeca la abrazo, luego a la abuela, el cual la veo más pálida, que la última vez, saludo a Roberto, y las chicas tambien.


—Y como llegaste, no estabas en la casa— dice Rossy.


—Si, tu adorado novio me hizo el favor de traerme— le digo mientras me siento. 


—Oh ese desgraciado se fue y no se quedó, deja que lo vea— dice Rossy, un poco molesta.