Debe ser una broma

Problemas

—Todo fue culpa de Joey, no fue mi culpa, yo estaba lista para mi entrevista.

—No es cierto, deja de inventar historias, yo no soy quien domina el destino, así que cállate.

Mientras ambos seguíamos discutiendo la culpabilidad, el señor Miller, habló fuerte,
—Dejen de discutir, veo que no quieren decirme por qué ambos llegaron tarde y puedo notar que no se soportan el uno al otro, haré una cosa.

Ambos guardamos silencio, lo vemos apenados, él continúa
—Leí sus currículos, puedo notar que son personas muy talentosas, así que los aceptaré a los dos.

Ambos le agradecemos muy emocionados, pero él nos hace guardar silencio una vez más,
—Aún no he terminado.—Lo observamos con duda, pero no decimos nada,
—Con la única condición, que ambos trabajarán juntos.

Mi boca se abre y se cierra con sorpresa y no soy capaz de decir palabra alguna, la chica de cabello castaño y ojos verdes me ve furiosa, levantó una ceja y ella decide hablar,
—Señor Miller, si ambos trabajamos juntos, no sería bueno para la empresa.

El la observa con una mirada fría,
—Vi sus currículos, ambos son excelentes para mi empresa, ¿qué mejor forma de crecer, si no es con los mejores trabajadores juntos?.—El dice de forma fuerte,
—No se preocupe señorita Weber, si no quiere trabajar con el joven Wagner, puede llevar su currículum a otra empresa.

Ella se queda callada, ve al señor Miller y dice con su voz ahogada por la vergüenza,
—Lo siento, muchas gracias por la oportunidad, daré lo mejor de mi.

El señor Miller sonríe, estrecha nuestras manos y nos pide que salgamos, Adeline, me ve furiosa, ambos subimos al ascensor, se cruza de brazos y dice,
—Todo esto es tu culpa Joey.

Pongo mis ojos en blanco mientras aflojo el nudo de mi corbata y desabotono el primer botón de mi camisa,
—Cállate Adeline, fue bastante difícil pasar tres horas contigo, no me imagino la tortura que será pasar todos los días contigo.

Ella ríe de manera sarcástica,
—¿Para ti fue difícil, pasar tres horas conmigo?—Ella frunce el ceño y me ve a los ojos,
—Dime que estás bromeando idiota.—me apunta con el dedo índice y dice muy molesta,
—No fuiste tú el que tuvo que pasar por varios tipos con la camisa transparente por el refresco que tú arrojaste encima de mi, tampoco fuiste tú, el que tuvo que caminar bajo la mirada lasciva de muchos chicos, cuando tu falda se rompió, porque no quisiste darme la oportunidad de bajar primero del tren, no fuiste tú el que llego tarde a su entrevista, porque tuvo que regresar a cambiarse de ropa.

Ahora soy yo el que empiezo a reír de forma sarcástica,
—Fui yo el que llegó tarde a mi entrevista y como castigo tiene que trabajar con una chica malcriada, porque ella se atravesó en mi camino mientras yo bebía un refresco, fui yo el que tuve que recibir insultos de un idiota en el tren, porque tú querías bajar primero.—La veo confundido,
—Sabes, aún no comprendo, ¿cómo se rompió tu falda?

Ella se sonroja por la vergüenza,
—Eso no te importa,...—antes de que ella diga algo, el ascensor se detiene inesperada, ella me observa sorprendida y dice,
—¿Qué está sucediendo?

—¿Cómo voy a saberlo?

Ella frunce el ceño,
—El ascensor se detuvo.

—Wow, deberían darte un premio, porque si no me dices que el ascensor se detuvo, jamás lo hubiera descubierto.—Digo de forma sarcástica.

Ella me da una sonrisa aterradora,
—Wow Joey, tu estupidez no tiene límites.

—Por amor de Dios, que inmadura eres.

Ella decide sacar su teléfono,
—Sabes que, no desperdíciate la felicidad que ahora tengo por conseguir el trabajo, con tus estúpidos comentarios.

Suspiro y tomo mi celular y noto que no tiene servicio,
—Debe ser una broma.

Adeline me ve confundida, pero decide no preguntar nada, quiero preguntarle si ella tiene servicio, pero no quiero hablarle.

Ella frunce el ceño, dice de manera apenada,
—¿Tienes...?

La veo serio,
—No

Ella pone sus ojos en blanco,
—Ni siquiera he preguntado qué.

Río sarcástico,
—Ok, ¿qué quieres?

Ella suspira,
—Joey, no quiero discutir, no te soporto, no me soportas, podemos dejar nuestras diferencias por un momento.

Cierro los ojos de manera fuerte, tratando de calmar mis emociones,
—Esta bien.

Ella se acerca a mi,
—Debemos buscar una forma de salir de aquí, no tengo servicio y parece que nadie ha notado que estamos encerrados aquí.

Lo que Adeline acaba de decir tiene sentido, veo los botones del ascensor a ver si alguno de ellos tiene algún botón de emergencia, pero no logro encontrar nada, comienzo a golpear las puertas para ver si alguien nos escucha, pero no hay respuesta

Adeline comienza a preocuparse, camina de un lugar a otro y dice,
—Moriré en un ascensor con un idiota como tú.

Trato de no decir algo de lo que después me arrepentiré pero esta chica no me lo hace fácil,
—No moriremos aquí, alguien vendrá y nos sacarán de aquí.

Ella comienza a hiperventilar,
—Joey, ¿cómo estás tan seguro? No veo que nadie aparezca y nos rescate.—veo sus ojos y comienzan a cristalizarse.

—Adeline, por favor cálmate, todo estará bien.—Digo con voz suave, tratando de calmar sus nervios,
—Siéntate, alguien vendrá por nosotros estoy seguro.

Ella se sienta en el suelo y me ve preocupada,
—¿Todo estará bien?

Le sonrió cálidamente, hasta podría jurar que se ve linda preocupada,
—Así es Adeline, todo estará bien.

—Sabes, soy claustrofóbica, es por eso que estoy muy asustada.—Me dice Adeline, con su vos nerviosa por el miedo.

—Carajo.—Se me escapa, de los labios.

Por alguna razón eso le causa gracia a Adeline,
—Lo siento, fue graciosa tu reacción.

Río con ella,
—No te preocupes, me alegra que tus nervios se calmaran.



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En el texto hay: comedia, drama, malasuerte

Editado: 24.05.2022

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