Me despierto porque mi celular no deja de vibrar, miro a un costado y está a punto de caerse de la mesita de luz.
[Último año]
+82 10-9323-6507 ~ 소피아
Disculpen que los esté molestando a esta hora con mi mensaje pero acaban de avisarme que debemos ir para arreglar las cosas del baile.
Los siguientes mensajes son de mis compañeros quejándose, claro, ¿quién se levantaría a las nueve para ir hasta el instituto y ayudar con la ornamentación de un baile que, se supone, es para nosotros?
En nuestro grupo también están quejándose y comentando que se cambiarán e irán porque no les queda de otra.
Dejo el celular a un costado y bajo para ver si llegó alguna carta, hoy el suelo se de sobres con estampillas de todo tipo. Tomo cada uno, la mayoría son de propuestas de la universidad pero ya tengo muy claro lo que voy a estudiar.
Las sobrantes son de mi padre...
«¿Existirá otro ser humano tan descarado como él?»
Díganme lo que quieran, pero lo único bueno que tienen esos sobres es el dinero. Sus cartas solo son mentiras acumuladas y sacadas de internet.
Coloco el dinero en mi alcancía de ahorros y desecho lo demás.
«Espero algún día irme de aquí y no depender de su dinero sucio»
Vuelvo a subir y entro directo al baño.
Mientras cepillo mis dientes, en mi oído derecho siento un largo y molesto "Piii" que parece no tener fin.
Me tambaleo un poco y por un momento creo ver en el espejo como ¿¡desaparezco!?
El sonido para de golpe y todo parece volver a la normalidad.
El lunes iré a primera hora a hacerme un chequeo completo.
Busco mi uniforme para colocármelo, pero siento que algo anda mal.
—¿Hoy no es sábado? —pregunto como si alguien fuera a responderme y menos mal que nadie lo hizo o saldría corriendo de esta casa.
Busco mi celular para ver la fecha.
—Sí, si es —Me respondo.
Menos mal que me di cuenta o sino estaría con el uniforme un día sábado, qué vergüenza.
Abro mi placard, elijo cuidadosamente qué me pondré y gracias a las ideas de Pinterest pero termino arrepintiéndome por como me queda.
Al final mi outfit es un jean claro, una remera holgada y zapatillas, tampoco iré muy bien vestida para organizar.
Tomo una mochila pequeña y meto en ella todo lo necesario, envío un mensaje a los chicos y salgo de mi casa mientras como una manzana.
El camino se hace corto y veo a los chicos esperándome en la entrada, corro hasta ellos.
—Buenos días, compañeros. —Se acerca una compañera con una planilla—. Los voy a dividir en grupos de tres y dos. ¿Está bien?
Nosotros asentimos y empieza a nombrar los grupos y de lo que nos tendríamos que encargar.
Ni-ki, Jake y yo tenemos que decorar los baños.
—Una pregunta y va con todo respeto. ¿Quién se fijaría en la decoración de un baño?
—Pregunté lo mismo y me dijeron que es para que se tomen fotos estéticas.
—Bueno... —Alarga la palabra—. Eso tiene sentido. Vamos. —Ni-ki es el primero en retirarse para buscar las cajas con decoraciones.
Jake y yo vamos detrás de él no sin antes despedirnos de los cinco y dejar nuestras mochilas en el salón.
Tomo las dos cajas que me corresponden y comenzamos a caminar hasta los baños.
—¿Vas a hacerlo sola? —pregunta Jake.
—Sí, cualquier cosa, les avisaré. —Sonrío y me percato que Ni-ki no está—. ¿Y Ni-ki?
Aparece a lo lejos corriendo con dos escaleras pequeñas, es una imagen bastante graciosa.
Deja una de las escaleras en la entrada del baño de mujeres.
«¿Pinterest será mi salvador esta vez?» pregunto mientras busco "Decoraciones para baño - Graduación"
Y sí, definitivamente me ayudó. Además de encontrar unas ideas geniales tengo casi todos los elementos.
No tardo más tiempo y comienzo con mi labor, los chicos de vez en cuando vienen a ver si necesito ayuda.
—Qué vergüenza nuestro baño comparado al tuyo —comenta Jake recargado sobre el marco de la puerta y Ni-ki asiente.
-Me sobresalto por la voz de Jake y se acercan a sostener la escalera—. Termino y los ayudo, ¿qué les parece?
—Gracias, gracias. —Jake me extiende su mano para que baje, la acepto y bajo cuidadosamente.
Ambos se van, solo me faltan colocar unas pegatinas en el borde del espejo.
Vuelve el sonido tan molesto en mi oído, poso mi mano sobre mi oreja para intentar que pare. Me apoya en un lavamanos y esta vez si noto como estoy desapareciendo. La puerta que está atrás mío se ve perfectamente a través de lo que sería mi cuerpo.
Pensando que todo es producto de mi imaginación, intento abrir el caño para echarme agua, pero mi mano traspasa. Lo único que puedo hacer es gritar para que los chicos vengan a ayudarme.
Jake y Ni-ki aparecen rápidamente, el último mencionado se queda paralizado y Jake lo empuja para tomar mi mano.
«¿Por qué él me puede tocar?»
Para el sonido molesto y me miro en el espejo, todo vuelve a la normalidad. Como si la mano de Jake fuera mi cable a tierra.
—¿Estás bien? —Ni-ki por fin reacciona y se acerca para tomar mi ambas manos.
—¿Qué fue lo que me pasó? ¿Por qué estaba desapareciendo?
—¿Desaparecer? Tuviste un ataque de pánico —responde Jake mientras le quita las manos a Ni-ki.
—¿Ataque de pánico? Hay algo que me están ocultando, ¿verdad?