Mi Segunda Mentira. Parte. – 1.

Isabella caminaba hacia el colegio pérdida entre sus pensamientos, aún no podía creer lo que había pasado ayer, se sentía avergonzada y confundida, muchas preguntas invadían sin permiso su mente, la imagen de ella y Joaquín se reacreaba sin ningun tipo de censura en su mente, por mas pelea que le daba para borrar ese recuerdo más importancia daba, vuelve en si cuando Rocío la abraza de atrás.

—¡Buenos​ días!.

Isabella se asusta alejandose de ella, pero al ver de qué se trataba de Rocío su corazón se logra calmar poniendo toda emoción en su lugar.

—¿Que pasa? ¿Porque estás alterada?.

Isabella la toma del brazo y se la lleva hacia un costado apartado de los demás alumnos, así podría hablarle con la seguridad que solo ella fuera testigo de sus palabras.

—A-Ayer me b-b-bese con Joaquín.

Rocío larga una carcajada en forma automática, un reflejo basado en el conocimiento que tenia sobre Isabella, no podía creer lo que le estaba diciendo, pero se calla al ver lo seria que estaba, la toma del brazo con fuerza y se la acerca a ella.

—¿Es enserio? ¿Como? ¿Por qué? ¿Que pasó? ¿Cuando? ¿Para que?.

—No lo se, él me besó, el estúpido me robo el beso.

Su humor cambia bruscamente al recordar lo que le había hecho.

—Ese miserable, como se atreve a quitármelo y a reírse de mi.

Rocío la abraza de felicidad, haciendo que Isabla pierda aquel personaje enojada y retome su personalidad.

—¿Se pueede saber por que estás tan feliz? Esto es serio.

—Por que te besaste con él, me pone de muy buen humor.

—Ese idiota me quitó mi primer beso, ¿quien se cree que es ese maldito? Piensa que solo por ser él, todas las chicas van a caer rendidas a sus pies, se cree que puede hacer esto como si nada y seguir con su estúpida vida aburrida y dejarme atrás como si nada.

Ellas siguen su camino, Isabella estaba de muy mal humor por lo sucedido, su cara reflejaba ese malestar.

Al entrar al colegio ella comienza a sentirse observada, todas las personas susurraban sobre ella, no podía evitar escucharlos, las miradas de maldad de las chicas la hacían sentirse incómoda, era evidente que Joaquín la dejó en el ojo de la tormenta, era el centro de las críticas, pero estaba lejos de pensar que era sobre ese tema, ya que estaba acostumbrada a estos episodios, debido a su fuerte personalidad.

Al llegar al curso toman asiento bajo las miradas de sus compañeros que algo ocultaban.

—¿Isa, es cierto?.

—¿Que cosa Carla?.

El tono de voz de Isabella era bajo e irónico, ya que podía hacerse una idea de cual era su duda.

—¿Que te besaste con Joaquín?.

—¡¿Por que no puedes ocultar nada Rocío?!.

—Ella no me dijo nada, todo el colegio esta hablando sobre eso.

—¿Que? ¿Quien fue?.

Ahora entendió porque se sentía tan observada y esa sensación de que hablaban de ella, al hacerse esa pregunta se dio cuenta de quién pudo haber sido quien comenzó esos rumores, no había nadie más en ese momento más que ellos dos.

En el curso de Joaquín.
Alma lo estaba samarreando llenándole de preguntas la cabeza, él trataba de pensar en alguna respuesta a las dudas que surgían, pero eran opacada por otra pregunta, agregando que el movimiento que ella aplicaba no lo ayudaba a pensar con claridad.

—¿Por que? ¿Como fue que llegaste a besarte con mi prima?.

—¿Podrías dejar de moverme?.

—Si, perdón.

Ella se queda quieta y vuelve a preguntar para aliviar su inquietud, su mirada era fría y trataba de poner toda la capacidad de su mente en él, para que no se le pasara nada por alto.

—¿Acaso no es lo que querías de mi?.

Joaquín desde su posición apoya si dedo índice en la frente de Alma y la empuja ligeramente hacia atrás.

—Rechazaste a muchas chicas, las ignoraste, no dejas que nadie se te acerque y de repente te besas con Isabella, ¿Osea por que? ¿Que estás tramando? ¿Acaso le cobraste a mi prima?.

—Es de mala educación que un caballero presuma sus batallas.

—No me vengas con esas estupideces Joaquín, quiero saber.

Él se queda en silencio mientras ella lucha para que hablara, trató de muchas formas de que él dijera algo pero no lo logró, debia cargar con su duda minimo por resto del día.

Al terminar las clases Isabella sale rápido del salón enfurecida hacia el curso de Joaquín, al llegar no lo encuentra y sale al patio para ver si por lo menos lo podía tener alguna pista de su paradero, luego de caminar por unos minutos por el colegio lo encuentra sentado abajo de un arbol, al verlo tan tranquilo acelera sus pasos para aprovechar cada segundo e invertirlo en su descargo.

—¿Por que tuviste que hablar de eso maldito estúpido?.

Le pregunta mientras le pisa los pies, su mirada reflejaba toda la ira que estuvo acumulando a lo largo de la mañana.

—Hola Isabel.

Con una sonrisa enorme pronuncia su nombre con la mayordelicadeza, esto hace que ella se enoje aún más al sentir que se estaba tomando la situación demasiado a la ligera, no podía explicarse su tranquilidad bajo el ataque que estaba viviendo.

—Es Isabella, ¿Por que le dijiste a todos que me besaste?.

—¿No puedo presumir que nos besamos?.

—No, ademas tu me besaste idiota, ahora todo el colegio habla de mi, que yo te presioné a besarme, que te amenacé, hasta dicen que te pague, ni si quiera puedo pagarme un maldito jugo.

—No quiero que otro chico más se te acerque, tienes que ser solo mía.

Su mirada cambia al decir esta corta oración, quería que sus palabras se entendieran a la perfección y saciar cualquier duda dque pueda surgir, mantenía su mirada fija sobre ella para trasmitir todas las emociones que yacían en el fondo de su corazón.

—¿De que mierda estas hablando? Que asco por dios, ¿Que te pasó?. Basta con tus juegos estúpidos, no quiero que te me acerques más y está me la vas a pagar, no te vas a salir con la tuya.