Desiciones Que Matan

Capítulo 9

Santiago

Veo como se aleja el auto y en ella los hermanos Baltodano, a fuera solo quedamos la familia González, Yariela, Antonio, José y yo, estamos en un silencio que nos rodea a cada uno… William le pone su saco a Yariela y observo a mi primo el cual tiene las manos apretadas en puños, apuesto a que debe de estar respirando por la boca y recordando que Yariela no sabe nada con respecto al matrimonio en que están involucrados los dos.

-Los tres conocen muy bien a Cárdenas…-dirijo mi vista al señor Alonso ya que nos está hablando a los tres…-y con lo que pude ver esta noche, los tres saben de lo que es capaz este chico…-asiento con la cabeza, dándole una respuesta positiva, presiento que algo tiene en mente…-Santiago, tú eres el líder de los tres, como debes de saber nosotros podemos ayudarte a encontrar a tu hermana, así que ¿te parece si hacemos a un lado los prejuicios que tienes de nosotros y nos unimos en un solo equipo? Pero antes que nada ya he hablado con tu tío y me ha garantizado en que no habrá problema en ello ¿o sí?

 Lo observo con entendimiento y proceso cada una de sus palabras, todos los presentes están esperando una respuesta de mi parte, estoy seguro que José y Antonio esperan que acepte porque encontrar a Lily y tenerla otra vez con nosotros, sería un peso menos, así que ya se cual es la respuesta que le daré.

-Desde hoy seremos el equipo que mi tío le garantizo, pero de igual manera pienso que hay algo más de lo que está diciendo o ¿me equivoco?

El señor González levanta una de sus cejas al escuchar mis palabras y luego esboza una sonrisa, escucho como mi primo y mi amigo respiran aliviados al escuchar mi respuestas, y a decir verdad, espero no equivocarme pero si mi tío dio su palabra entonces tengo que confiar a ciegas de lo que haga.

-Chico listo, es cierto hay algo más, pero la pregunta clave en todo esto es ¿Cómo se tomaran las verdades que saldrán a la luz? O ¿Cómo lo llegaran a digerir?

-Eso solo el tiempo lo dirá Señor…-no puedo estar más de acuerdo con Antonio.

-Muy bien, pero recuerden…-se detiene un momento antes de continuar y observa a cada uno de los presentes…-las decisiones que llegamos a tomar pueden tener salidas alternativas pero siempre serán las definitivas, ahora volvamos a dentro para que esta noche termine de una buena vez.

Los primeros al entrar a la casa son William y Yariela, después los señores González, detrás de ellos entran Antonio y José, por ultimo yo… cuando regresamos al comedor lo primero que veo es que mis padres, mi tío y el señor Baltodano no han tocado ni un solo vacado de la comida, a excepción de la señora Baltodano y de Mario.

Volvemos a tomar asientos pero esta vez Will conduce a Yariela a que se siente en la silla, donde anteriormente estaba Leila, José y yo tomamos nuestros asientos correspondientes. Todo es un completo silencio, mi tío me da una segunda mirada y comprendo que después quiere hablar conmigo, mi cuerpo está muy tenso en estos momentos y a como puedo ver también lo están Antonio, José, Will, mis padres, en pocas palabras todos pero menos Mario e Irene… están disfrutando este momento pero lo que no me cabe en la cabeza es ¿Cómo una madre está bien, después de haber visto como le ha destrozado el corazón de su hija?

-Perdonen los comportamientos de mis hijos, pero Axel y Fernando no se comportan de esa manera pero Leila, esa niña siempre nos ha dado problemas.

Ahora si estoy convencido que esta mujer odia a su propia hija, pero que pasara por la mente del señor Octavio.

-Por eso no te preocupes Irene, cuando Leila y yo estemos casado esos problemas desaparecerán…-de verdad como odio a este tipo, estaba a punto de hablar pero mi tío me dio una mirada de advertencia.

-Yo que tú, Mario no estaría muy convencido…-mi tío me devuelve la mirada para hacerme entender que Alonso hablara por todos…- tu más que nadie, eres el menos indicado para mi pequeña, y si, Leila para mí y para Esmeralda es como nuestra hija porque en el momento en que Irene y Octavio le quitaron toda su atención de ella, paso a hacer responsabilidad de Axel y Fernando, por lo tanto en el momento en que los dos conocieron a Rogelio, pasaron hacer nuestros hijos al igual que Leila y hasta donde sé, Mario tienes serios problemas con Rogelio, ya que no solo mandates a matar o secuestrar a su hermana, sino que también está al tanto de esta boda absurda, sin mencionar los maltratos físicos y psicológicos que le has causado a Lily Molina.

Todos estamos callados ante el discurso del señor Alonso, observo la postura que tiene Mario esta tenso, por lo que puedo ver no se esperaba todo lo que Alonso le soltó, a Irene tampoco le cayó tan bien y el señor Octavio esta cohibido, esta vez es mi padre quien se levanta de su asiento acto que imitamos mi madre, mi tío, mi primo, mi amigo y yo, al igual que los González y la señorita Arce.

-Nosotros nos vamos, esto nunca me lo esperaba de ustedes dos, pero de ti Irene me espero esto y mucho más.

-Al igual que nosotros nos vamos y tú, Mario te quiero alejado de mis hijos, incluyendo a los Baltodano y a Yariela, recuerden Octavio e Irene tienen una semana es el plazo que les ha dejado mi pequeña.

Después de eso todos salimos de la casa, y siento nuevamente como el aire frio golpea mi rostro; todos nos detenemos al estar cerca del auto de mis padres.



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En el texto hay: decisiones, reencuentro, amor desamor

Editado: 04.05.2021

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