Capítulo 5: ¿Trabajo duro? Apenas comienza…

Mi cuerpo estaba relajado, a al menos eso quería aparentar, con la gorra cubriéndome el rostro o… mitad de este, mis brazos semi colgados pero flojos dejándolos caer pesadamente con el micrófono en una mano, mientras el chico que estaba frente a mi gritaba porque no había ni una pizca de lo enseñado en lo único que nos dedicábamos hacer describía “como había sido una traga pitos para que me dejaran estar en donde estoy sin ningún tipo de talento” o como “había tenido el lugar ganado por el simple hecho de tener los ojos de color” o…

– ¡Sigue bailando como el maldito elefante que eres! –me relamí los labios con una sonrisilla falsa, pero al instante me dejé de ver seria de nuevo.

–No tengo mucho que decir –comencé tranquila, dejando que se burlara por mi primera línea –pero me gustaría enumerar las cosas, por las que detesto este tipo de prácticas, empezando por ti, hubiera querido alguien más competente, me hacen sentir como una maltita principiante que no ha practicado día tras día, para un imbécil que grita y no conoce de un buen Hip Hop o siquiera una buena rima de prescolar – camine al banco con el monto de hojas y las avente sin pensarlo a sus pies –primero aprende tus líneas antes de siquiera dirigirme la mirada, quieres hablar de defectos, primero lávate los siente antes de abrir la boca y si crees que me molesta que me compares con un elefante, déjame decirte que soy el puto elefante rosado que pisoteara tu sueño antes de que siquiera te den una esperanza.

Miré a los demás compañeros que miraban burlones y me encogí de hombros dándole el micrófono a quien sabe quién y sentándome en un lugar libre, para ser exactos a un lado con la chica que empezó a llamarme elefante… el resto fue aburrido, seguían con sus insultos inmaduros y groserías innecesarias y lo más molesto repetitivas, apenas había comenzado con mi mal vocabulario, pero creo que estaba usándolas adecuadamente o cuando lo creía necesario, pero lo de ellos era vergonzosamente repetitivo.

Salí temprano y me fui directo al trabajo, seguía normal… todo iba como se supone debería ir ¿No? a veces me llegaba el sentimiento de huir de nuevo a mi lugar o ir corriendo al pasado donde tenía una compañera, los regaños de Jong-in y un novio llamado Kyung-Soo, pero no lo haría simplemente porque esto ya estaba cociéndose más de lo que imaginaba. Tenía que salir de mi zona de confort y seguir a las tramas que me tenía la vida, hace poco tuvimos una reunión, los chicos hablaban de como extrañaban sus hogares y familias uno incluso lloro, cuando paso mi turno negué lentamente y pasaron a otro, muchos siempre me pasaban de largo, ni siquiera sabrían de mi existencia si no fuera porque se enteraron que tuve unos días de entrenamiento con los próximos debuts, pero no pasaba de ahí observándome ya sea por mis distintos rasgos o porque decían que era demasiado engreída y por eso no quería hablar con nadie  y estaba bien con eso, pero el sub director comenzaba con los comentarios de que debía ser más simpática extrovertida si quería llegar a Idol sólo asentí eh hice una reverencia. No era engreída, al menos yo no me sentía así, pero después de escucharlos hablar de todos mientras no se percataban de mi existencia y luego de mí, no me quedaban ganas de hablar con alguno de ellos…

- ¡Hey! Niña prodigio ­– apenas me salió una pequeña sonrisa al verlo sentado en la mesa tratando de llamar mi atención con su mano levantada, con los otros tres tipos, termine de anotar la orden de la mesa donde estaba y me dirijo hasta halla.

­– ¡Hey! Chicos debut ­­– supremboi y el chico baile y Yoongi ­–seré su servidora solo mientras están aquí ­–mostré mi libreta y lapicero.

­–Algo especial para los cuatro, escoge

­–Agregare de los precios altos y espero una buena propina ­–ellos rieron, pero señor serio me miro con una mirada que no sabría describir, pero me hacia entender que pensara sobre mi codicia y confianza tomada, le lance también una mirada de que hablaba enserio.

Me fui a la cocina y dejé las órdenes y comencé a lavar de inmediato los platos pues ya casi no había desocupados, estábamos teniendo una buena racha el día de hoy, así que teníamos que ser veloces para atender bien y que volvieran los clientes. Apenas estuvieron los platos salí con lo que podía y corrí de nuevo a dentro y solo me quemé una vez el día de hoy con el caldillo.

NamJoon y el chico baile me sonrieron desde su mesa mientras limpiaba las otras desocupadas.

­–ha este paso terminaremos sin nada, se supone que teníamos la fecha para septiembre y ahora la recorrieron para diciembre a sabiendas de que nadie debuta en esas fechas por los premios ­–no era mi intención escuchar, pero supremboi no era nada discreto por suerte solo quedaba en otra mesa una pareja de chicas que se me hacían conocidas de la empresa ­–te aseguro que la terminaran cambiando para junio y agregando a más personas ­–apenas toma una pausa mirando al chico baile ­–sin rencores amigo ­–y el antes solo mencionado solo bajo la mirada ­–tendremos suerte si no también nos cambian el género musical, no soportaría terminar como esos estúpidos idols ­–Ellos tampoco la tenían fácil y eso que ya tenían una unidad o “esperanza” apenas termine me sente en unas de las mesas antes de que alguna de las Ahjummas me llamase ­– ¿Niña prodigio? ­–apenas alce la mirada a este tipo ­­– ¿Que hace alguien de tu edad trabajando aquí?... ¡¡achu!!

­–Creo que ya está borracho ­–dijo el chico baile, apenas asentí no me daba mucha importancia, pero fue curioso haber visto que fue el pie YoonGi que reacciono por la indiscreción.

­–Hablo enserio, lo de la chica trainee lo entiendo, pero trabajar ni siquiera tiene dieciséis no es eso ilegal… ­–yo también me levante por la sorpresa, y mire discretamente a la cocina pero ellas no estaban y me lleve la mano al pecho suspirando de alivio y cuando les mire los tres le estaban tapando la boca, pero apenas le soltaron ­–los rumores corren rápido eres la comidilla de todos los que te ven aquí ­–y suspire de nuevo sin ánimos de contestar y yéndome a la cocina