Capítulo 12 ✅

Agarro con fuerza mi cabeza, no pensaba bien anoche cuando me desperté, necesitaba algo que me hiciese olvidar la pesadilla y solo pude pensar en el trabajo, no quería ser brusco con ella, pero no podía preocuparme por Samantha. Mi cabeza anoche era un puto lío y nadie más que yo debe lidiar con ese problema.

Ahora si pensaba lo que le dije al llegar, solo no creí que fuese a tomarlo tan mal. Yo no so nadie para ella, solo su compañero de apartamento, así que no entiendo su enfado por lo último que le dije.

Oigo el timbre de mi casa, mierda, debe de ser Ana. Tengo miedo de abrirle la puerta, mi hermana es jodidamente aterradora o no me extrañaría que fuese a por mi jefe, osea, está lo suficientemente loca para hacerlo.

Abro la puerta para encontrarme a Brianna y al mismo tiempo veo a mi hermana salir del ascensor.

- Largate de mi vista Brianna.- dice mi hermana, ignorándome.

- ¿Por qué eres tan desagradable conmigo?

- Porque eres una estúpida rusa, la única rusa tonta que conozco, que lo único que siempre quiso de mi hermano fue su dinero, jamás te interesó ser una buena amiga o pareja y yo con personas falsas no me junto, si te toleré fue por él.- me hermana le sonríe sin emoción.

- Tu no puedes decirme que me vaya.

. ¿No? ¿Lo probamos?- su mirada azul se oscurece más y hasta yo siento miedo.- Te largas o te largas.- dice entre dientes.

- Yo he venido a hablar con Lukas y no contigo.

- ¿Qué te hace creer que mi hermano quiere hablar contigo?- se ríe.

- Yo lo entendida.

- Di una mentira que te creas.- chasquea los dedos.- Largate Brianna o juro que te quedas sin una puta extensión.- la rubia se lleva la manos a su pelo.- Largo Brianna.

La rusa mira a mi hermana, intenta sostenerle la mirada pero acaba cediendo ante ella como siempre, hasta mi abuelo y yo cedemos, y no porque sea nuestra niña, la mujer de nuestros ojos, no, sino porque ella da miedo de verdad y desafiarla nunca suele ser bueno.

Brianna sale corriendo, no sé si estará llorando pero feliz seguro que no está. No entiendo si es que ayer no le dejé las cosas muy claras o si ha visto salir enfurecida a Samantha y ha venido a aprovechar.

Ana entra al apartamento sin mi permiso, tampoco iba a detenerla con lo furiosa que va. Puede que mi hermana menor no tenga la misma fuerza que yo y que aún midiendo más de metro setenta sea considerablemente más baja que, le tengo miedo porque puede llegar a ser hiriente.

Su silencio me aterra, no sé lo que esté haciendo en su cabeza, que discurso se esté preparando pero tengo mucho miedo a que pueda enfadarse conmigo.

- ¿Por qué?- su voz tiembla.- ¿Por qué mierda pones tu vida en peligro? Yo entiendo que después de una pesadilla sobre el secuestro necesiten algo para relajarte, de verdad que te entiendo Lukas.- veo como intenta no llorar.

Me acerco para intentar calmarla pero ella se niega y se aparta, ella jamás me ha rechazado y hoy lo ha hecho, está furiosa, dolida y decepcionada, y eso es lo que más me duele con diferencia.

- No te me acerques hasta que termine de hablar.- dice cabreada.- ¿Te das cuenta de lo que estás haciendo?

- Solo fue un tabajo.

- No lo es Lukas, es tu forma de autolesionarte, es lo mismo que hacen las personas que se cortan solo que tú vas a hacer el bien.- su labio tiembla.- ¿Sabes por qué mierda te ha pasado esto?- niego.- Yo si lo sé, tienes miedo.

- ¿Miedo?

- Si, miedo de sentir algo más profundo que pena y lástima por tu compañera de piso.- intento negar.- Tienes miedo a querer y amar a una mujer más de lo que me amas a mí o a mis hijas.- ella intenta contener las lágrimas.- Tienes miedo de desplazarme, tienes miedo a que no te acepte por tu pasado, tienes miedo de que no acepte a tu hijo, pero sobre todo tienes miedo a que vuelva a pasar, tienes miedo de que te vuelvan a quitar a alguien que ames.- siento las lágrimas picar en mis ojos.- Todo viene del miedo de amar y no ser correspondido.

- Ana.

- ¿Sabes lo preocupada que estuve todo el día? No contestaste ni una puta llamada Lukas, doscientas diez veces te llamé esperando una puta respuesta, un “estoy bien”. Si necesitas esto, si necesitas trabajar simplemente hazlo pero no desaparezcas otra vez, porque igual que tu tienes miedo de perder a quien amas, yo también lo tengo Lukas.- lágrimas caen por sus mejillas.- Tengo miedo a perder a alguien más, perdí a mamá, perdí a papá, a mi abuelo.- ella respira con fuerza.- Casi te pierdo a ti y casi pierdo a mi hija.- intenta controlar sus lágrimas.- Si quieres volver, vuelve. Pero vuelve con todo el equipo, no vayas solo Lukas.- me suplica.

- Ana.- por fin me deja acercarme a ella.- Yo no..

- Ella, Lukas, Samantha estuvo toda la mañana llamándote, preocupada, histérica.- suspira.- Seguro no te has dado ni cuenta de sus ojeras o de lo pálida que se veía, ella de verdad estaba preocupada por ti, también siente cosas por ti, y ni niegues que tu no sientes nada por ella.- me regaña.- Te he visto mirarla con brillo en tus ojos azules, te he visto sonreír escuchándola hablar cuando crees que nadie te ve.- me mira con una sonrisa dulce.- Te he visto desear no tener tu tormentoso pasado para poder estar con ella, así que no niegues las cosas Lukas.

- No puedo Ana, le haré daño y nadie quiere estar con un asesino.- bajo la cabeza avergonzada.- Ana, llevo diez años sin mantener relaciones con una mujer por miedo, siento que me volverían a obligar.