1) Momento incorrecto

Era un día soleado cuando el taxi se detuvo frente a la imponente casa de mi tía en el pintoresco barrio. Bajé del vehículo junto a mi madre y mi hermana, con la mirada perdida en el paisaje desconocido que se extendía ante mí. Mi tía nos recibió con una sonrisa afectuosa y nos ayudó con las maletas hasta la entrada.

- ¡Bienvenidas, mis queridas! Qué alegría tenerlas aquí conmigo.– nos dice mi tía, con una sonrisa en la cara.

- Gracias por recibirnos, Tia. Necesitábamos este cambio de aires.–responde mi madre, ya que mi tia es su tía por parte de su madre.

- ¡Qué bonita es esta casa, mamá! ¿Podemos explorar juntas?–le pregunta mi hermana a mi madre.

Mi madre le responde un asentimiento de cabeza.

La casa era moderna y minimalista, con muebles elegantes y líneas limpias que reflejaban un estilo contemporáneo. Mi madre y mi hermana se instalaron en habitaciones separadas, mientras que mi tía ocupaba un espacio junto a su marido. Yo compartiría cuarto con mi hermana, sumergiéndonos en la intimidad de la nueva rutina familiar.

- Este cuarto será perfecto para uetedes, hijas descansen un poco que el viaje fue muy largo y agotador– nos dice.

– creo que me iré a dar una caminata luego de desempacar, por el lugar, el viaje me estreso.– informó.

- yo me quedaré acá a usar mi celu- informa mi hermana.

‐Esta bien Tatiana, pero más te vale no llegar tarde.– me oderna–, por que apesar de que no estemos  en nuestra casa, yo te puedo pegar y castigar, haci que no te agas la boluda.– y hay es cuando saca sus garras.

–esta bien ma.

Y yo que pensaba que hacer este cambio, me iva a librar de sus malos tratos. Luego de que mi Madre salga de nuestra habitación, entra mi tía.

- Si necesitan algo más, no duden en decírmelo. Estoy aquí para ustedes.

Mi hermana y yo respondemos con un "esta bien tia", al uniso. Y nos ponemos a desempacar.

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Hora más tarde 

Después de desempacar mis pertenencias y ordenar mis  cosas, decidí salir a explorar los alrededores. Caminé por las calles empedradas, sintiendo el peso de mis recuerdos desgarrados por los malos tratos de mi madre.

  Flashback:

 - ¡No tienes derecho a llegar tarde! ¡Estás castigada!"‐ me dijo mi madre una tarde luego de que yo salga de la escuela, ella no me dejó explicarle el por qué de mi tardanza, y cuando llegue ella ya me esperaba con el cinturón en la mano para castigarme.

 Las lágrimas brotaban sin control mientras recordaba aquella noche oscura

- Tranquila, todo estará bien. Estoy aquí para ti.– me dijo mi hermana esa noche, luego de lo sucedido.

Fin del Flashback 

sentí un leve tropezón que me hizo levantar la vista. Se ve que estuve tan sumergida en mis recuerdos que no me di cuenta que alguien venia caminando, frente a mí  me encuentro con un joven de ojos azules me miraba con sorpresa, interrumpiendo mi trance emocional. La colisión fue fuerte,  suficiente para hacerme retroceder unos pasos y encontrarme con la mirada despectiva del desconocido.

‐ perdón  no me...

- ¡Mira por dónde vas, Piccola!– me interrumpe, quien se cree que es para tratarme haci, y que sicnifica piccola.

- ¿Qué te pasa, acaso no puedes caminar derecho?- le respondo de la misma manera.

Las palabras ásperas del desconocido y su tono condescendiente encendieron la chispa de la ira en mi interior. La frustración y el dolor acumulados durante el día estallaron en una respuesta igualmente cortante y despectiva.

- ¿No puedes prestar atención a lo que haces?

- ¡Tú eres el que debería mirar por dónde va, pedazo de...!

El era alto, muy alto y tenía que alzar mi cabeza para poder ver su cara, sus Facciones son definidas, esos ojos, que transmiten algo que no puedo descifrar y...

- ¿Qué te pasa, te comió la lengua el Gato?– qué yo sepa haci la frase no era, pero bueno.

-  ¡No me hables así, no te conozco!- le respondo luego de estar analizandolo.

- ¡Más te vale tener cuidado la próxima vez!- me amenaza.

– O sino que.– le digo, pero no dejo que responda, me canse de escucharlo.-¡Vete al infierno, idiota!- le deje hay con la palabra en la boca y me fui directo a la casa de mi tía, antes de que me rreten por llegar tarde. 

Esto fue un Momento incorrecto, para toparme con este idiota.