Capítulo 2: Embarazada.

Hailey.

Capítulo 2: Embarazada.

Cuando recibí el mensaje de Norma pidiendo vernos pensé que quizás descubrió alguna fortuna de nuestros padres y que ahora éramos mágicamente ricas y no una caja de terciopelo mediana con una ropita blanca de bebé adentro bordadas con las siguientes palabras: “¡Hola tía, Hailey, soy un niño!” debí notarlo ese abultado vientre no era por comer, es por tener a un bebé crecer dentro de ella.

—Joder, Norma, ¿No te da miedo la idea de tener a alguien dentro de ti? —. Estaba horrorizada con esa panza y no es personal, me pasa siempre que veo a una embarazada.

—Hailey, ya te veré con tu enorme vientre abultado, nena. —. Entorné mis ojos y por decencia controlé mis náuseas.

—En tus más descabellados sueños, eso no es para mí.

—Es lo mismo que yo decía antes de conocer a mi esposo.

Tenía grandes aspiraciones para mí futuro y les aseguro que no era ser madre, ni en este año y mucho menos en los próximos que vendrán.

—¿Y como sabías que querías ser madre? Estás loca.

Ella ahora se veía más risueña mucho más armoniosa y he de suponer que es por la alegre noticia de que tenía una vida dentro de ella que necesitaba de su buena ánimo y salud. Norma es tan alta como yo, si piel es un poco más bronceada que la mía y su cabello del color del chocolate era similar al mío solo que ahora el de ella se ha vuelto mas ondulado.

—Un día desperté y simplemente supe que quería ser madre, Hailey. He tratado con mis problemas emocionales durante años, he sanado emocionalmente que ya me siento preparada para darle una buena vida a mi hijo.

Norma no es una cuarta parte de lo que era después de la muerte de nuestra abuela y me alegra mucho por ella, supo cómo resolver el dolor de su corazón con terapia.

—Entonces felicidades, para Kevin y para ti. —. Mi cuñado no me agrada pero ella realmente lo ama así que toca aceptarlo.

—Quiero que estés presente en la vida de Thiago, Hailey. ¿Podrás hacerlo?

Es mi único sobrino después de todo, cuidarlo me haría agarrar experiencia para cuando decida finalmente tener a uno propio… aunque para eso faltan muchísimos años.

—Thiago me tendrá presente, no lo dudes… hermana. —. Era raro conversar civilizadamente con ella puesto que siempre habían gritos y reclamos de por medio pero ahora no, ahora éramos Hailey y Norma Williams, las hermanas.

—Te lo agradezco mucho. —. Ella toma mi mano por encima de la mesa y yo sonrío.

No era fanática del contacto físico, repelo todo aquello pero es mi hermana de quién hablamos. Luego de salir de terapia se volvió mucho más dulce, comprensible y amable, no puedo venir de buenas a primeras a rechazarla.

—¿Y Piper? Creí que vendría contigo. —. El mesero deja frente a ella un volcán de chocolate, es su más grande antojo del momento según ella.

—Le tocaba estar en el bufet temprano, ya sabes cómo son los abogados de ahora.

—Lo sé, Kevin es igual.

Kevin Carson es esposo de mi hermana y al igual que Piper Wolf es abogado, ambos trabajan en el mismo bufet pero en diferentes oficinas y secciones. La verdad no sé cómo funciona el mundo desde la perspectiva del abogado, yo solo lo explico como mejor Dios me dio a entender.

—Lo saludas de mi parte. —. Mi incomodidad con él es porque gracias a su culpa Norma decidió dejarme bajo el cuidado de aquel que hace años rompió mi corazón y a quien abandoné drásticamente de la noche a la mañana. Kevin no era santo de mi devoción pero él amaba a Norma y como yo no lo aceptaba vio la oportunidad de dejarme con su buen amigo para así no estorbarles.

—Siento lo que te hizo, lo hemos hablado entre los dos y lo he convencido para que te pida perdón.

✈️✈️✈️

1 semana después.

Correr me ayuda con mis problemas, con mi soledad y a distraer mi atareada cabezota.

Piper venía a mi lado hiperventilando de lo cansado que estaba, eran quejas tras quejas mientras que a mí no me afectaba en lo mínimo continuar con mi rutina.

—Mierda, Hailey, me estoy muriendo.

Piper nos hizo detenernos bajo la sombra del árbol más cercano, dónde cayó al suelo y como un mismo desesperado comenzó a tomar de la botella de agua. Las personas de los alrededores nos veían como si fuéramos unos raros y probablemente si lo seamos. Reí muy bajo del dramatismo de mi mejor amigo y lo acompañe bajo la sombra.

—Descansa, querido Piper.

Él parece agradecerle a Dios por mi comentario porque nomás se lo dije y ya estaba viendo en dirección al cielo juntando sus manos y persignándose. Él recuperaba energías mientras que yo veía mi teléfono el cual sonó hace no mucho.

Y vaya sorpresa la que me encuentro.

James_Anderson te ha enviado un mensaje:

Quizás no me lo vayas a creer pero mi hijo Samuel dejó caer mi teléfono en la piscina de nuestra casa, hasta ahora pude adquirir uno.

¿Todo bien en el sótano, Gloria?

Tienes dinero pero no puedes adquirir un teléfono de inmediato… es bastante raro.

Gloria_Williams ha respondido:

Supongo que todo en la vida es posible pero… no creíble. Y todo genial en el sótano, ya me he secuestrado a varias chicas para sacarles los órganos.

Leí la respuesta a mi mensaje y tuve que morder mi mejilla interna para no reírme a carcajadas y que Piper se de cuenta con quién estoy hablando.

James_Anderson te ha enviado un mensaje:

Oh querida, Gloria, ¿Qué tengo que hacer o a dónde tengo que firmar para ser el próximo en tu extensa lista de extracción de órganos para venta ilegal?

Me había sonrojado solo un poquito, inflé mis mejillas y tecleé mi respuesta.

Gloria_Williams te ha respondido:

Oh, James… ni aunque lo pidas y supliques puedes entrar en mi extensa lista.