Capitulo 3

Estoy en la cocina terminando de preparar el desayuno, me costó un poco quedarme dormida pero cuando lo hice no deje de soñar con esos hermosos ojos.

La puerta se abre y mi madre entra, se acerca y me da un beso en mi cabeza y antes de salir de la cocina me da una fuerte nalgada.

—¡Oye!— Susurré para no despertar a Jeremy.

—¿Qué?— Imita mi madre y yo ruedo los ojos. —¿El bello durmiente ya despertó?— Niego con mi cabeza y mi madre sale hacia su habitación.

Voy hasta mi cuarto y toco despacio, escucho la voz de Jeremy y abro la puerta.

—¿Cómo te encuentras?— Preguntó entrando a mi habitación y de nuevo me deja sin aliento al ver su pecho descubierto.

— Un poco mejor — Susurra con voz ronca y se sienta apoyándose con el cabecero de la cama.

— Es mejor que desayunes antes de tomar algún medicamento, mi madre dice que siempre hay que hacerlo con el estómago lleno — Me da una pequeña sonrisa.

—Gracias por lo que hiciste — Dice — Y no dejarme morir en ese callejón —

— ¿Y quién te dijo que no te vas a morir?— Digo y Jeremy me mira expectante — Bueno, algún día nos tenemos que morir— Muevo mis hombros restando importancia. Jeremy se queda mirándome como si me estudiara.

— Niña que te he dicho de traer vagabundos a casa — Mi madre entra a mi habitación y Jeremy se sonroja.

—Es que lo vi abandonado y bien sabes que me gusta recoger animales de la calle— Respondo.

Mi madre se acerca a Jeremy y este trata de retroceder, observa a mi madre y a mi entre asustado y molesto.

— No te preocupes querido no te haré daño — Dice mi madre y se sienta a un lado de su cuerpo, me hace señas y le paso la maleta de primeros auxilios — Soy médica y voy a revisarte — Jeremy me mira de nuevo nervioso y yo asiento con mi cabeza y él mira a mi madre y asiente — Vaya, eres igual a él — Susurra mi madre más para si misma pero ambos la hemos escuchado.

— No soy igual a él — Dice molesto Jeremy y desvía su mirada hacia el otro lado.

— Puede que no tengan la misma personalidad pero si son iguales físicamente — dice mi madre y empieza a tocar los costados del cuerpo de Jeremy — Ambos son la misma imagen de su padre — De inmediato mira a mi madre.

—¿Qué sabes tú de eso?— Pregunto y veo su mandíbula tensa.

— Lo sé porque los conocí — Dice sin mirarlo y él contrae su rostro y gime cuando mi mamá lo toca en el lado izquierdo — Tus padres fueron y serán las mejores personas que he conocido en mi vida — Los ojos de Jeremy se iluminan y cambia su expresión.

— ¿Acaso... tú los conocías?— Miró a mi madre curiosa, ya que suponía que mi madre conocía a su familia.

— Claro — Susurra y sus ojos se llenan de lágrimas — Tu padre era un hombre apuesto, caballeroso y respetuoso — Su voz se apaga — Tu madre era la mujer más hermosa y buena. Todo un Ángel — Abro los ojos y me doy cuenta de quien es familia, no puedo creer que este mundo sea tan pequeño.

Salgo de la habitación dándoles privacidad. Con razón mi madre no se mostró violenta con el ataque o si no ya habría apuñalado a Jeremy.

Los escucho conversar y la curiosidad me mata así que doy unos pequeños pasos y medio me asomo y observo como mi madre abraza a Jeremy y le susurra al oído. Mi corazón se oprime al ver unas pequeñas lágrimas en su rostro. Ahora entiendo su personalidad agresiva, yo también me enloquecería si mi madre le sucediera algo.

Mi madre sale de la habitación limpiándose las lágrimas, me mira y sonríe y sale hacia su cuarto. 

Entro de nuevo y observo que Jeremy tiene la mirada perdida.

— Ya tengo el desayuno listo ¿Quieres desayunar en la cama o en el comedor con nosotros?— Preguntó.

— Con ustedes si se puede — Dice sin mirarme.

Me acerco y lo ayudo a levantarse y ambos salimos de la habitación. Mi madre nos dice desde la cocina que nos sentemos que ella sirve y ambos nos sentamos uno al lado del otro.

—Se ve que tu hermana sí es buena— Lo miro intrigada ¿Acaso no se lleva bien con su hermano?

—No es mi hermana — Susurro y lo veo arrugar sus cejas — Es mi madre — Jeremy me mira sorprendido, abre y cierra su boca como si quisiera decir algo, pero las palabras no salen, mi madre sale de la cocina y sirve los huevos y toma el cuchillo para partir el pan, pero se detiene y señala a Jeremy con el cuchillo.

— La próxima vez que te atrevas a hacerle daño a mi hija recuerda que se manejar un bisturí y puedo darte una muerte lenta y dolorosa — Jeremy la mira y ella guiña su ojo — Buen provecho — Sonríe y empieza a comer, Jeremy se queda quieto por un momento y toma el pan y empieza a comer.

— ¿En serio son madre e hija?— Pregunta intrigado.

— Así es querido — dice mi madre sin importancia.

— Pero luce tan joven — Susurra.

— ¿Quieres saber mi secreto?— Pregunta y asiente — Somos vampiros — Susurra llevando su mano a la boca como si fuera un secreto.

Jeremy mira a mi madre y luego a mi y ambos soltamos una carcajada.

— Bueno chicos, iré a dormir — Mi madre se levanta y besa mi frente, se acerca a Jeremy y hace lo mismo dejándolo sorprendido, guiñe su ojo y camina hasta la entrada de su habitación — Por cierto, espero que no hayan acabado los condones — Jeremy se atraganta con el café y entra cerrando la puerta.

— Vaya... tu madre es...— Sonrió y abro la boca para hablar, pero soy interrumpida por mi madre que se asoma por medio de la puerta.

—Jeremy, quédate todo el tiempo que quieras si deseas poner a dormir a mi hija en el suelo — Bufo y lo escucho reír — Estas en tu casa, tus padres hicieron mucho por mi y ahora quiero hacerlo por ti — Sonríe — Si van a follar por favor no hagan mucho ruido tengo el sueño ligero — Borro mi sonrisa y cierra la puerta. Jeremy suelta una carcajada y pasa la mano por mis hombros.

— Es bueno que mi suegra me quiera — Susurra en mi oído — Pero no tendré sexo hasta que me des tres citas — Su aliento en mi oreja me provoca escalofríos, levanto el codo y le doy en toda la costilla Jeremy suelta un gemido de dolor ya que le di en toda la herida.