Organizar de nuevo

-Buenos días.

Pequeña risa - De verdad crees que hay algo de buenas. (sentado Fabio con el desayuno en frente en la suite que comparten desde anoche)

-Perdón no sabía qué decir.

-Ah hermanito te queda todavía mucho y ahora nos queda mucho que planear hemos dejado la casa de nuestra madre a ellos y.

-¿Entonces nos rendimos ya no vamos a hacer nada?

-Por supuesto que no, estoy hablando de casa y trabajo, pero no les voy a dejar ganar no después de todo (recordando la cachetada con la mano).

-Hoy búscate firmar el contrato del departamento. (su hermano solo accede con la cabeza mirando por la ventana en ese tiempo Eduardo se sentó a comer)

-Señor han venido para la junta, sin embargo, ninguno de sus hijos está para recibirlos esperan ya mucho.

-Si bueno cancela todo lo que puedes en las agendas de ambos mis hijos y de las que no logras me encargo yo.

-¡De ambos! Okay. 

-A planear nueva vida. (dice Neren para sí mismo)

Mirando y asimilando todo Karla escribe una carta. La misma que Neren encuentra, en cambio, a ella.

Amor, 

has perdido a la mujer más importante de tu vida y ahora por mí lo único importante que te quedó de ella. Desde el principio de nuestra relación sabía que sin ellos tú no estas y que si no los acepto no hay nosotros y lo intentamos no obstante lo único que logramos es perder a nosotros y a ellos. Sé que esto no vas a aceptar así que no te dejo la opción ¡me voy! Yo te importo, pero no soy ni ella menos ellos. Nos va a doler en el principio como en cualquier relación, no obstante el dolor será menos que por la pérdida de tus 3 grandes amores. No busco que me perdones o lo entiendas, sin embargo, sé que lo hago porque te amo y sin ellos de ti no va a quedar nada. Nunca te dije cuanto pienso en este último tiempo de esto cada vez que te veo triste o alejado de ellos me daba más de cuenta así es mejor recuperarlos y no les guardes el rencor porque yo no voy...

         Te amo 

                          hasta siempre 

                                                      Karla 

Neren contempla la carta perdido en pensamientos.