LOGAN.
Primer dia de clases.
Nueva ciudad.
Una nueva escuela.
No hay nada peor que ser el nuevo en otra escuela de otra ciudad.
Nos mudamos aqui por el trabajo de mi papa a mi al principio no me gusto pafa nada la idea pero talvez aqui logre encontrar a mi destino.
Miro mi nueva escuela y suspiro.
Y esto recien empieza.
Entro a la escuela.
Alumnos llendo de aqui para alla se nota que es el primer dia de muchos.
Trato de pasar por la multitud y una persona termina chocandome el hombro cuando estoy cayendo le agareo el brazo a alguien.
Aunque eso no evito que cayera.
Veo el brazo.
La muñeca para ser mas exactos.
Y no puedo creer lo que veo.
La serpiente plateada.
Tiene la serpiente plateada en su muñeca.
Es ella.
Mi destino.
Al fin encontro mi destino.
Levanto la mirada.
Y la veo, es hermosa, rubia de ojos verdes.
Al darme cuenta que sigo en el suelo me paro enseguida y le suelto la muñeca.
- Mi destino, eres mi destino. -Le digo emocionado.
- ¿Como sabes mi nombre?
- ¿Eh?
- Mi nombre, me llamo Destiny.
Destiny, destino no puede ser una coincidencia.
- No sabia que te llamabas asi, lindo nombre, yo soy Logan.
- No te pregunte tu nombre porque no me interesa saberlo.
- ¡Destiny!
Un grito me hace voltear.
Una chica castaña de ojos avellana viene corriendo en nuestra direccion.
Veo como se tropieza y cae encima mio haciendo que caigamos ambos al suelo.
Al mirarla bien veo qje tiene puesto una remera manga largas negra.
Esta loca, hace un calor.
La miro a los ojos y ella a mi.
Luego de unos segundos habla.
- Perdon, me llamo Cindy.
- Logan, disculpa pero podrias quitarte de encima mio.
- Ah si claro.
Se levanta enseguida y me ayuda a pararme.
Se me queda mirando unos segundos mas para luego mirar a Destino.
- Des, ¿A que no sabes que paso?
- No, ¿Que paso?
Empiezan a hablar como si no estuviera aqui.
- Mis Padre me castigaron un mes sin salidas.
- ¿Que? ¿Porque? ¿Que fue lo que hiciste ahora?
- Pues... ayer en la noche termine en la carcel, porque robe una moto aunque te juro que la iba a devolver, pero los policias no me creyeron y me dejaron encerrada hasta que mis oadres me fueron a buscar.
Me quedo escuchando la conversacion.
Necesito hablar con Destino y decurle que ella es mi destino.
- ¿Me estas hablando en serio? Justo esta noche tenemos la fiesta de Adam.
- Pues me voy a tener que escapar y vos me vas a ayudar.
Me apunta a mi al decir lo ultimo.
- ¿Yo?
- ¿El?
- Si, necesito que vayas a mi casa y me atrapes cuando salte de la ventana del segundo piso.
Anota algo en un papel y me lo entrega.
- Te espero a las ocho.
Sin mas se van ambas y yo termine metido en problemas ajenos.
Y ni siquiera pude hablar con Destino.
Resignado me fui a mi primera clase del año.
Matematica.