Destino Inevitable

CAPÍTULO 20

SALIDA

Luego de visitar a mi amigo “espía” como le digo me dirigí a mi departamento. Hoy, dentro de unas horas saldría con Elianna. 

Justo en este momento me estaba escribiendo. 

Me dijiste que fuera casual, ¿a qué denominas casual? 17:56 

Normalmente te vistes casual, al menos te visto de esa manera cuando has salido a comer con mi hermana. 17:56 

De acuerdo, anotado. 

Te veo luego. 17:56 

 

No seguí respondiendo y me enfoqué en arreglarme. La llevaría a un lugar que he querido visitar, no se me ha dado el momento, así que aprovecharé esta ocasión para ir. 

A veces me venía a la mente la conversación que tuve esta tarde. Le había comentado esto a Franco y en pocas palabras me dijo que no me fiara en nadie que intente acercarse o entablar una conversación un poco extraña, pues puede que sean mandados por Emiliano. 

Debía estar atento a cualquier situación que notara extraña, no era de los que hablaban con cualquier persona que se me cruzara por al frente; sin embargo, tenía que estar alerta. 

Aparque al frente de la casa de las chicas, cuando toqué la puerta no me esperaba que ella fuera quien me abriera la puerta, mi hermana y para ser sincero no le vi una buena cara. Me miraba como si hubiera hecho algo malo.  

—Hola, hermanita. 

—¿Así que vas a salir con mi amiga? 

—Así es, ¿no puedo? 

—Hay algo que debo decirte… 

—No, no hay nada que debas decirme y mucho menos que esto sea para que no salga con ella. Solo será un paseo no te alteres. Y si te molesta que salga como tu amiga, permíteme decirte que a mí tampoco me gusta que salgas con… 

—¡Alto! Nadie ha dicho nada malo, hermanito —trataba de evitarme el tema y lo evadió, definitivamente —. Al contrario, me alegro de que salgas a pasear con una chica, luego de… 

—¡Alto! Ahora yo te digo esto. Terminemos esto aquí y me puedes dar permiso, por favor. 

—Claro, adelante. ¡Eliii! 

—Olvidaba que te encantaba gritar. 

Me mostró una mueca en su rostro que me hizo reír.  

—Chao, espero que te diviertas. No, espero que se diviertan. Disfruten chicos. 

Elianna venía bajando las escaleras cuando mi hermana estaba hablando y por eso hizo la corrección.  

—Hola, estás bellísima.  

—Gracias, Inder. Tú también te ves muy bien. 

—Muy bien, ¿lista para lo que se venga? 

—Más que lista, estoy preparada para todo. 

—De acuerdo, vámonos entonces. 

 

╰───────────❍───────────╮ 

En el camino ambos veníamos en silencio, ella estaba concentrada en su celular y no quise interrumpirla. Aunque rompió el silencio formado.

—¿Te molestaría si pongo algo de música? 

—Para nada, puedes hacerlo. 

—Ok. Prepárate para escuchar buena música.  

—Ya veremos —enarcó una ceja, tal vez se sentía ofendida por el comentario que había hecho, aunque tenía cierta idea de que clase de música escuchaba. 

—Permíteme decirte que mi gusto hacia la música es muy buena. Ya lo verás. 

Colocó una de mis músicas favoritas, por supuesto. Al igual que yo, ella escuchaba una de las tantas bandas favoritas que tenía.  

—Debo decir que en verdad tienes un buen gusto musical, es una de mis bandas favoritas de pop. 

—Ya lo sé —fruncí el ceño y ella me vio —, no me veas así, lo que quise decir es que ya sabía lo de la buena música. Lo que no sabía es que también te gustaran esas músicas y pues, la banda. ¡Sus canciones son fantásticas! 

—Concuerdo contigo en eso. Estamos cerca de llegar. 

—¿Por aquí? —asiento. Es un lugar un poco alejado de la ciudad y todo su alrededor, estaba un poco lejano, aunque eso no significaba que estuviera sin gente, Al contrario este lugar era muy concurrido por sus habitantes o por algunos turistas.  

 

—¡Vaya es un lugar muy hermoso! No tenía idea de que esto estaba aquí.  

—Se instalaron aquí hace unos dos meses, se retiraran en unas semanas. 

—Entonces hay que disfrutar la visita, ¿no? 

—Por supuesto, ¿algo que quieres hacer primero? 

—Comer, primero eso. Debo estar con el estómago lleno para poder realizar cualquier actividad. Luego veo con que se puede continuar, pero la comida es lo esencial.  

—Muy bien, a comer. 

—Mira allá —me señaló un puesto de helados. 



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En el texto hay: novela juveil, destino inevitable

Editado: 02.04.2024

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