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                       Shaftesbury Dorest 
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                               Emi Wright

Observé de nuevo la carta de admisión a la universidad que tenía en las manos no lo podía creer después de tantos intentos al fin me habían admitido 

_A la tercera va la vencida_ Susurre para mi misma mientas abrazaba la hoja, pero toda mi paz se esfumó cuando la puerta de mi cuarto fue abierta con brusquedad 

_Te admitieron!!?_ Grito Astrid mientras saltaba a mi cama. 

_Astrid!!! No puedes entrar así!!! Un día de estos me matas_ dije mientras intentaba recobrar la respiración

_Enhorabuena!!_ grito ignorando lo que la había dicho _Se lo enseñaré a papá_ antes de que pudiera reaccionar Astrid ya estaba fuera de mi habitación. 

Guarde la última maleta en el maletero del taxi que estaba estacionado en la entrada de mi casa, abrace con fuerza a mi hermanita 

_Deja de escabullirte en las noches, ya no estaré aquí para encubrir te_ la Susurre al oído 

_Descuida, ahora tengo mi propia llave_ la observe confundida y ella solo me giño un ojo para después sonreír no pude evitar mirar esos ojos verdes con tristeza.

Durante los últimos años sólo deseaba irme y ahora que realmente tenía que marcharme me costaba un poco, volví a abrasarla con algo más de fuerza 

_Le quiero mucho aunque él no lo sepa_ dije mientras sollozaba, me sentía mal ya que mi padre no estaba presente en un momento tan especial para mí

_El te quiere más_ contesto Astrid volvimos a mirarnos y después subí al taxi que me llevaría a la estación de tren. 

Después de unas horas de viaje llegue a Londres específicamente a Southbank, junto al río Támesis, y era realmente hermoso, jamás había salido de mi pueblo y eso me hacía parecer una turista perdida y emocionada al mismo tiempo iba tan concentrada en lo hermosa que era la ciudad que no me di cuenta de la persona parada delante de mi hasta que chocamos

_Lo siento mucho_ dije con la cabeza baja me daba mucha vergüenza 
 

_Tranquila no pasa nada, puedes levantar la cabeza es muy raro que estés así_ poco a poco levante la cabeza para observar al chico de voz monótona, lo primero que pude observar era el tatuaje que tenía en el cuello para después fijarme en sus ojos.

Estuvimos viéndonos durante un buen rato en silencio, nadie decía nada y sólo se escuchaba el ruido que hacía la gente a nuestro alrededor 

_Bonitos ojos_ dije rompiendo el silencio que se había formado entre nosotros dos y sin esperar respuesta alguna volví a hablar 

_Son hermosos un negro puro y brillante, son poco comunes_ 

_A mi me parecen normales y comunes_ dijo mientras se llevaba un cigarro a la boca 

_Gran equivocación, lo normal es tener los ojos marrones son los más comunes pero no menos hermosos, hay muchos tipos de marrones desde los más claros a los más oscuros pero los ojos negros son difíciles de encontrar y eso los hace más hermosos_ dije mientras le sostenía la mirada 

_Baya, gracias supongo_ respondió mientras soltaba el humo, tiro la colilla del cigarro al suelo _Tus lentillas verdes también son preciosos_ soltó y comenzó a caminar no se en que momento comencé a caminar pero ya estaba detrás de él agarrando le el brazo 

_Para tu información yo no llevo lentillas este es el color original de mis ojos!! _ dije gritando provocando que algunas personas se fijarán en nosotros dos 

_Tranquila Iridessa, solo era una broma y creo que esas maletas de ahí son tuyas_ dicho esto el chico volvió a tomar su camino ignorándome completamente 

_Iridessa!?_ volví a repetir enfada observe al chico que se alejaba Solté un bufido y volví corriendo a por mis cosas, es increíble lo fácil y rápido que había cambiado mi humor 

_Presumido!!!_ grite en medio de la estación provocando que todos me miraran nuevamente.