Capitulo 2
La semana paso muy rápido y había llegado el momento que no esperaba con ansias, ir a visitar a la tía Lauren. —Joel ¿Ya alistaste tus maletas?. Pregunto mi madre un poco eufórica porque ya era tarde. —Si mamá, ya está en el auto. <<Bueno no me queda de otra, si no me escaparía a la casa de Kelly>>pensé un poco abrumado por todo. —listo súbete al auto ya nos vamos. Dijo mi madre. —mamá en serio es necesario hacer esto, por qué no simplemente vas tú Yo me puedo quedar en la casa de Kelly.—no ya habíamos hablado de esto antes, además nunca has ido a la casa de la tía Lauren, créeme que te va a encantar, tiene muchas cosas antiguas y un gran campo, así que no quiero más quejas. Después de casi 3 horas en el avión llegamos, tenía razón mi madre al llegar a la casa de mi tía era enorme y hermosa, tenía una decoración fina pero antigua, según la casa ya llevaba más de trescientos años en pie, y llevaba de generación en generación en nuestra familia. —Joel querido felicidades es un gusto volver a verte, cuánto tiempo ha pasado desde la última vez. Dijo la tía Lauren con una sonrisa enorme en su rostro decadente por los años. —gracias tía Lauren, también es un gusto estar aquí. Dije aunque yo sabía que no era así. —dejé una sorpresa para ti en tu habitación es un regalo que creo que te va a encantar, me dijo tu madre que te gusta leer así que también puedes tomar cualquier libro que quieras. Al subir a mi habitación me asombré aún más era como una cápsula del tiempo, el tapiz, los muebles todo era impresionante. En mi cama se encontraba un pequeño reloj estaba envuelto en un pedazo de tela, a eso se refería la tía Lauren, y En definitiva no se equivocó era demasiado precioso.
Al siguiente día mientras admiraba la cantidad de libros que tenía en la habitación cayó un pedazo de papel que estaba dentro de uno de ellos, era la mitad de una carta, que decía; Emily Robert eres una señorita especial, Pero me has traído a la desgracia, tus actos Y tu rebeldía hicieron que mi familia no acepten nuestra Unión, aún así yo te amo y si pudiera regresar el tiempo con este pequeño reloj, regresaría e intentaría conquistarte de todas las maneras posibles y espero… En la familia nadie se apellida Robert, me dejó intrigado saber el final de aquella carta, tal vez fue el romance fallido de algún antepasado. —Joel baja ya a desayunar. Grito mi madre.