Al día siguiente Alberto estaba en su trabajo ya un poco mejor puesto que con lo que había pasado logró caer en cuenta que era algo material y sin importancia ya que él se encontraba muy bien de salud junto a sus padres y su familia. El día no iba muy bien pero una llamada muy inesperada capta la atención de él, era Ana, le decía que se dirigiera tan sólo un momento a su casa a reclamar algo que había dejado allí. Era muy curioso para Alberto, así que de inmediato se quita la intriga y se desplaza a la casa de ella, al llegar allí su prima Valeria quien estaba ahí de vacaciones le entrega una bolsa con unas cosas adentro, de inmediato se dirige hacia su trabajo nuevamente y no dudo un segundo en abrir lo que Ana le había dejado. Era algo muy sorprendente y bonito. Había un detalle para él, unas galletas y unos dulces; dentro de ésto también habían unas palabras de aliento, de esperanza y lo que sentía Ana por él. Le cambió la actitud a Alberto y se puso muy contento por lo que había recibido. Quedó muy sorprendido y de inmediato buscó la manera de hablarle para agradecerle lo que había hecho por él. Después de ésto, se comenzó a desarrollar en la mente de Alberto que algo iba a pasar con ella, pues se iba a convertir en una persona más que especial e importante para él.
Al llegar la noche, Alberto y Ana se ven y rápidamente él le vuelve a agradecer lo que había hecho. Fue una noche muy bonita, las cosas habían cambiado rápidamente, las intenciones y el gusto de ambos cada vez aumentaba más y las ganas de estar juntos también.
Editado: 26.04.2020