Diario de una perdedora

Capitulo 23

Un año y medio que yo y Kilian somos novios, nunca me vi en una relación, creí que siempre estaría sola, pero ahora no me veo sin Kilian, me amarro el cabello en una coleta, me miro en el espejo y sonrío, hoy Kilian vendrá a verme, sé que estos meses no han sido muy buenos para él, y el que venga a verme, me hace sentir bien.

Me despido de mis padres y salgo de casa, quedamos de vernos junto a la playa, camino, hoy el día se siente genial, este año que ha pasado ya no me han pasado cosas malas, sin contar que a veces me topo con vera, de Dana y Zac ya no supe nada y para mi esta mejor, bien dice la frase “Lo mejor llega cuando no te lo esperas”.

Me siento feliz, encontré dos mejores amigas con las cuales puedo ser yo misma, tengo un novio guapo y además me ama, aunque quisiera que aquí entra Basil, pero nos hemos distanciado de manera dolorosa, a veces me habla, fue un buen amigo en su tiempo y eso es todo, solo quedan los recuerdos.

Llego y veo al apuesto hombre parado viendo hacia el mar, corro hacia él y lo abrazo por detrás, él se ríe y lo miro con una ceja enarcada, antes de que haga mi drama él me toma de la cara y me planta un beso, mis mejillas se ponen rojas, mis brazos rodean su cintura.

—¡Listo! Ya puedes hacer tu drama — me dice con una sonrisa, le doy un golpecito en el abdomen.

—Ya se me quitaron las ganas de hacer drama — me cruzo de brazos indignada

Kilian me abraza, me hace caer con cuidado en la arena, el cae sobre mí, su mirada no deja de recorrerme la cara, lo tomo de las mejillas estirándosela, el hace una mueca.

—¡Auch! Eso duele, amor

—Que tienes, hoy andas más cariñoso que otros días — le pregunto y el desvía la mirada — Kilian…

—Quería proponerte algo — dice durativo

—Adelante habla

—Como sabes…pronto será mi cumpleaños y bueno mi madre me dijo que tengo que estar fuera del país, entonces como no estaré aquí, quisiera que tu fueras conmigo y pasemos unas lindas vacaciones en Turquía

Mis ojos se agrandan, abro la boca intentando hablar, pero las palabras no me salen.

—Yo…yo…s-si quiero…pe-pero

—Tranquila, hablare con tus padres antes, me entere por alondra que tu tratamiento ya ha acabado, no creo que haya mucho impedimento — explica

Después de ir a comer, recorrer la playa y platicar sobre lo que nos pasa, decidimos ir a platicar con mis padres, estoy un poco nerviosa, nuca antes había hecho algo así, supongo que es normal, no sé cómo reaccionaran mis padres, ya estando en la sala, esperamos a que ben vuelva, Kilian me toma de la mano y me sonríe, ben llega y se sienta, mira a Kilian con recelo.

—De una vez te digo que, si hay una pequeña criatura dentro de mi hija, no vivirás para contarlo — amenaza mi padre

—Sería tan cruel para dejar a la pequeña criatura sin su padre — Kilian pone una mano en su pecho indignado

Ben se pone colorado, Kilian intenta aguantarse las ganas de reír, mi madre solo niega y yo e doy de golpes mentales.

—No es eso — digo, tomo aire

Okey…no nos fue tan mal, al principio ben no parecía convencido, pero mi madre lo convenció, podre ir una semana con Kilian y eso me pone feliz, ahora mismo él se fue a su casa a preparar todo, nuestro vuelvo saldrá mañana por la noche así que tengo que alistarme también. Saco mi maleta y empiezo a empacar, el timbre de mi celular suena, lo tomo frunzo el ceño, segundos después entra una llamada de un número desconocido.

Hola querida, hace mucho que ya no nos vemos, te quiero ver y no creo que estés en posición de negarte.




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