8 de Enero.
Habíamos llegado en la madrugada y hacia tanto calor que creía que me resfriaría, ¿Pasar del frio de Manhattan al calor de Paris? Por fortuna mía si había una tienda de verano en al que pude comprar ese camisón que quería, y aunque el precio estaba muy exagerado lo tuve que comprar si no quería que la familia del padre de mi bebé-lo incluyo a él-se enterara de que estaba embarazada o empezaran a hacer comentarios sugestivos de que había ganado peso porque si no, comenzaría a llorar como en año nuevo con Víctor.
-Bueno chicos, ustedes hagan lo que quieran pero no se metan en problemas.-Nos dijo la mamá de Chase y Jackson a los tres, nos vio amenazante pero luego nos sonrió.-No quiero que ninguno mate a otro, y compartirán la habitación.
Salió del cuarto dejándonos a los tres con la boca abierta. ¿Compartir la cabaña con esos dos simios?
-Pido la cama.-Dije haciendo que ellos arrugaran el ceño, comencé a correr a la cama y con mucho cuidado me deje caer de espaldas quedando en el centro de esta, Jack no tardo en querer aventarse sobre mi pero lo detuve con un grito.- ¡Cuidado!
Jack se quedó confundido y Chase solo arrugo el ceño. Mordí mi labio y me senté en la cama cruzándome las piernas de una manera rara. Más obvia no podía ser.
-Tengo dolor de estómago.-Me excuse pero se vio que ninguno de los dos se lo trago.- ¿Vamos a nadar?
-El último en llegar es popo de Chase.-Dijo Jack que sin importarle, se bajó los pantalones y se sacó la camiseta, el venia preparado con su traje de baño debajo de todo, rodé los ojos, Chase seguía en la habitación que claramente había tocado ser mía.
-Me voy a cambiar, ¿Puedes salir?
-Ya te he visto desnuda, ¿Qué tiene de diferente ahora?-Se acercó a mí.
-Es incomodo.-Me aleje un poco de él pero termino acorralándome contra la pared.-Chase…
-No saldré de la habitación Megan, así que, podemos pasar todo lo que resta de la madrugada y tal vez las próximas tres semanas así, o puedes simplemente cambiarte frente a mi.-Trague saliva y fruncí el ceño, Chase simplemente me veía indiferente.-¿No es que te hayas operado los pechos y no quieras mostrarme cierto?
-Nada que ver.-Lo empuje y se sentó en el borde de la cama, agarre mi maleta y la abrí sacando el traje de baño negro que había cargado, junto con otros más. Lo mire viendo si no se quería ver pero claramente no, me voltee dándole la espalda y me saque el top deportivo y rápido me puse la parte de arriba, todavía seguía trayendo los leggins por lo que no veía tanto mi panza. Gracias a mi increíble cerebro me puse el camisón de playa que había comprado, me voltee para sacarle la lengua a Chase y rodo los ojos, me baje los leggins junto son mis braguitas y con una velocidad que no sabía que tenía, me puse la parte de abajo del traje de baño.
Me voltee a mira a Chase pero en vez de eso vi su pecho cubierto por una camiseta blanca, estaba a tan solo dos pasos de mi pero sentía que me asfixiaba. Alce la mirada para verlo, sus ojos simplemente estaban en mi vientre.
-Jack nos espera.-Dije y sus ojos ahora me miraban a mi.-Chas…
-¿Pensabas decírmelo?
De repente mi actitud de siempre se fue. Necesitaba trabajar en esto de esconder cosas, porque definitivamente era muy mala. Yo ya sabía a qué se refería.
Negué.
-¿Por qué?-Agache la mirada, de pronto tenía ganas de llorar.-Megan, ¿Por qué?
-Pensé que me mandarías a la mierda así que decidí mandarme yo sola.-El me tomo de la barbilla y me obligo a mirarlo, varias lagrimas salieron de mis ojos.-Es difícil Chase, es muy difícil.
Me abrazó y llore como una niña. Esto de estar más llorona de lo normal no me gustaba, pero era agradable la sensación de que alguien estuviera consolándome. El vaso de agua iba por la mitad, solo faltaba mi madre y la familia de Chase. Llore hasta que me canse y simplemente las lágrimas dejaron de salir.
-¿Cuándo te enteraste?-Me miro y vi como trago saliva.
-Hace un mes.-Abrió los ojos de par en par.-No quería decírtelo porque… bueno, si pensaba decírtelo, pero no encontraba el momento adecuado.
-¿Tus padres lo saben?
-Solo papá, me descubrió a las cuatro de la mañana comiendo pollo frito y puré viendo Doctora juguete.-Chase soltó una carcajada y yo igual.-Supongo que no soy buena ocultando cosas.
-Para nada.-Se agacho a mi altura y me miro.-¿Quieres saber cómo lo supe?-Asentí con una sonrisa.-En navidad estabas toda loca, tenías hambre y te dormiste demasiado temprano, no bebiste cerveza y ni siquiera vino en el brindis, en año nuevo Cecy me lo dijo, bueno, ella pensó que tú ya me lo habías dicho, así que la obligue a decirme lo que me estabas ocultando.-Mordí mi labio nerviosa, maldita Cecilia, te las veras conmigo cuando regrese.-Aparte de los vómitos cuando iba a tu casa, y ahora se te nota más.-Puso su mano en mi vientre y retuve el aire.-El bebé y las galletas.
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Editado: 25.10.2019