Hola a tod@s, déjenme que les diga que estoy súper emocionada de que lean esto. La verdad, es mi primera vez comprometida con un libro y me divertí mucho escribiéndolo.
Quiero que sepan que esta historia contiene seres mágicos, muchos de los cuales ya conocemos, y otros que no. Por ejemplo, los Temples los inventé y los moldeé a mi manera. Más adelante se describe bien a este tipo de criaturas, pero lo cierto es que su función es muy parecida a la que cumplen los genios de las lámparas. Otros que más adelante se mencionan son los Andrades y los Yagtupis.
Y, en este mundo, Dios es representado por Malé, y el diablo serían todos los seres mágicos que fueron malditos por la magia, ya que su propósito es hacer mal en la tierra. Aunque cabe recalcar que, si el bien y el mal existen, solo así hay equilibrio. No me malinterpreten: al ser un mundo inventado por mí, no significa que desvalorice a nuestro Dios, sino que creo que, al ser épocas distintas y mundos diferentes, a Dios se lo debe conocer por un nombre diferente, pero siempre será el mismo.
Se menciona violencia explícita, lenguaje violento, referencias a violencia y abuso mental, lenguaje discriminatorio y algunas escenas de contenido sexual. Así que ya saben, esta historia es para mayores de 18 años. Si no tienes esa edad, queda bajo tu responsabilidad.
Si sientes que la historia va lento, créanme que es necesario. Todo tiene un sentido y son necesarios los detalles. Ya verán.
Por favor, siéntanse libres de comentar y criticar. Ahora sí, les dejo con el inicio del libro.
Los quiere,
Len.