Capitulo 7

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─¿Como esta?─ Le pregunto Umar cuando Rebeca bajo las escaleras, recien volvió a su forma de humano mientras cargaba a Paty en su cadera. La niña ya era lo bastante grande como para caminar sin ningun problema, pero siempre le gustaba cargarla.  

─Parece que esta bien, algo cansada, ya sabes─ Miro a su hija, que se rio y se abrazo al cuello de Umar para que su padre no la bajara ─Mira tu─ Le pellizco los cachetes a su hija para formarle una sonrisa y Paty grito en protesta. Cuando la solto, miro a Umar ─¿Crees que puedas echarle un vistazo alrato? 

─No te preocupes, planeaba hacerlo 

─¿Algo en especial? 

─El olor que tenía pegado a la ropa, ya sabes, me era familiar─  

─¿El slime? 

─Ademas de eso, olía a cambiaformas. Como su alguien se hubiera quedado con ella por muchisimo tiempo y el olor se le impregno, pero no lo sentí cuando salió de bañarse. No había nada mas en las prendas, así que supongo que debio de haberse separado cuando se fue de donde sea que el Slime la encontro.  

─Que raro─ Suspiro ─Le escribire a Orum, y entonces espero que me diga cuando nos iremos, para llevar a Luisa conmigo 

─¿La llevaras hasta su casa? 

─No, solo la dejare en algun lugar cerca de una estación de camiones, para que pueda llegar por su cuenta.  

─¿Qué hay de dejarla en Verachuz? 

─Veracruz─ Corrigió Rebeca, la pareja comenzo a caminar a la cocina ─Y no se si el rancho siga siendo de la familia, o si lo vendieron, o si esta abandonado─ Se tallo la frente con una mano y arrugo la cara ─Es mejor dejarla lo mas cerca posible de un lugar que ella conozca, ademas, Orum no me ha dicho que lugar es donde vio a ese tal Lucas ¿Por qué nunca mencionaste a Lucas? 

─Ve a sentarte en la mesa, Paty, ten, llevate esto─ Umar bajo a Paty y le dio un tazón con frutas, Paty, en toda su gloria de niña de seis años, obedeció a su padre. Cuando la niña salió del comedor, Umar miro a su esposa y respondió con sinceridad ─Era un puto sádico─ Beca Trago saliva ─Disfrutaba triturar toesos y ordenar asesinatos. Pero no lo hacía él mismo, siempre ordenaba que lo hiciera y se quedaba ahí, viendolo. 

─Suena como un loco─  

─Era un loco, o es, depende de si sigue vivo─ Sacudio la mano y resoplo ─Orum no podría confundirlo, lo conoció mas veces que yo. Cuando el conflicto estallo, el bastardo escapo porque su residencia fue la primera en ser tomada, era un cambiarformas, como yo─  

─¿Y en que se convertia? Hasta donde recuerdo que me contaste, Simon no lo és y Heran no lo hera─  

Simón... si, él estaba vivo. Encerrado, de por vida y lo que le sigue. Aislado en una residencia a las afueras de la nación  y con una guardia que no lo dejaba salir del cuarto donde se le encerro.  

Al parecer le estaba yendo bien, o al menos eso escucho de Ayar.  

El hombre no se quejaba, se le daba de comer dos veces al día y aunque no se le permitía salir, una vez al mes le llevaban libros de diferentes temas para entretenerse, un hombre aburrido era alguien que buscaba algo para entretenerse.  

─Una especie de gusano─ Arrugo la nariz ─Uno venenoso, provocaba parálisis y malestares. Un maldito gusano como él─ Umar estaba enfadadisimo y Rebeca pensó que tal vez había pasado algo ahí.  

─Supongo que fue a ti a quien afecto 

─No─ La respuesta fue rápida, pero honesta, su ceño se relajo y suspiro ─Fue a Josephine─  

─Oh─  

Josephine, la ex pareja de Umar que los traiciono a todos y se unio a la dictadura para poder casarse con Simón, quizá en ese momento ella todavía no era una traidora, quizá ya lo era. No podrían saberlo, ella estaba muerta y Simón dijo que Heran no compartía información con él hasta el momento que los caso. 

─Como sea, el bastardo se escapo con cualquier cosa de valor que lograra encontrar─ Cerro los ojos y se encogió los hombros, nunca mas fue encontrado. Supongo que tomo las esferas Inter mundiales y se marcho.  

Rebeca le acaricio el brazo antes de agarrar un par de platos y servirse a si misma y a Umar un poco de pasta, mientras su esposo servía el agua y comenzaba a lllevar las bebidas y vasos a la mesa.  

Luisa seguramente dormiría por un tiempo, estaba cansada y si no fuera porque estaba mal, Rebeca la invitaría a comer con ellos.  

─Hola, buenas tardes─ Mariana saludo a la directora del plantel educativo de Susan ─Soy Mariana, hermana de la maestra Luisa 

─Ay ¿Y que excusa tiene para no haber venido a la escuela en mas de dos semanas? 

─Mi hermana esta desaparecida, señora─ Mariana le explico a la directora, eso parecio sorprender a la otra mujer que estaba alrededor de lso sesenta. 

─Ay, tome asiento─ La directora señalo las sillas frente a ella ─¿Ya se levanto un acta? 

─Si, tuve que ir al pueblo de alado porque aquí no hay una estación para hacerlo 

─Si, somos demasiados pequeños, ya sabe─ Apretó los labrios y miro a Mariana rápidamente de arriba abajo. Llevaba un bonito traje elegante debajo de una chamarra para el frío, además de que dejo su impermeable en la entrada para no mojar la oficina. 

─Soy su hermana mayor, me gustaría preguntarle un par de cosas ¿Cuándo fue la ultima vez que vino? 

La directora saco una carpeta de su cajonera y lo abrió, era la lista de firmas de los maestros mientras buscaba la ultima fecha de firma de Luisa.  

─El jueves de hace casi tres semanas fue el último día se asistencia de Luisa Hernandez─ Le conto la directora con un suspiro ─Mande a alguien a su casa, pero no había nadie. Había estado diciendo que su padre tenía problemas de salud y quizá necesitaría ir a verlo. Pense que era por eso. A veces no hay red en este lugar, así que pense que las cosas se habían puesto mal y no había red para contestar llamadas 

─Esta bien, gracias ¿recuerda algo mas? 

─No, nada.